STILL WITH ME

Cap 7🌸

Cuando salieron del hospital lo primero que Taeyong sintió fueron los fuertes brazos del Alfa abrazándolo con ternura, se sentía cálido y al mismo tiempo reconfortado, Yuta le daba una seguridad que jamás había experimentado con cualquier otra persona...

Aún no podía asimilar el hecho de que tendría a dos bebés, tan grande fue su sorpresa que apenas y pudo reaccionar, no recuerda que fue lo que sucedió después de oír esa noticia, lo único que sabe es que logro responder las preguntas de la Omega con simples monosílabas . Después de que Boram lo revisara y le dijera cuando sería si próxima cita, Taeyong y Yuta salieron de ese hospital sin decir palabra alguna, en la mente del Omega aún no podía hacerse la idea de que estaba esperando gemelos pero escuchar el sonido de sus corazones provenientes de esa máquina hizo que cayera en cuenta de que todo era muy real .

Y en el otro extremo está Yuta, que en estos momentos se sentía el hombre más feliz de la tierra, acababa de enterarse de que sería papá y no solo eso ¡Tendría gemelos! ¡Dos hermosos niños  vendrían a a cambiar su vida a mejor!. Estaba tan emocionado que no fue consiente al medir sus actos cuando envolvió al pequeño Omega entre sus brazos, lo trajo más hacia su pecho y susurro un suave "Gracias" contra su oído causándole al mismo una extraña sensación de calidez.

Después de romper aquel abrazo Yuta guió a Taeyong hacia su carro para llevarlo de vuelta a su hogar, el Omega ingreso en el vehículo en completo silencio y espero a que el mayor  ingresará y encendiera el carro . Yuta subió al auto siendo su primera prioridad ayudarle a ponerse el cinturón de  seguridad, Tae se recargo en el asiento cerrando sus ojos por unos segundos concentrandose solamente en sentir el olor del japonés por todo el interior del vehículo, no entendía cómo era que el aroma del Alfa le gustaba tanto, le hacía sentir a salvo, tranquilo y hasta podría decir que en paz, tanto que el camino a su casa se le hizo demasiado corto.

Taeyong abrió sus párpados lentamente cuando la calidez de la mano ajena tocó su mejilla el simple tacto le hizo estremecer , se encontró con la intensa mirada de Yuta observandole con detenimiento.

— ¿S-sucede algo?— pregunto el Omega algo cohibido.

— ¿has estado descansando bien? — le pregunto repentinamente sin apartar sus ojos de su persona, esos mismos orbes que resultaban ser tan hipnotizantes para Tae .

— S-si... Es solo que ahora me agotó con más frecuencia. Le prometo que luego del trabajo descansaré lo necesario— murmuró sonriendo como despedida pero cuando iba a abrir la puerta fue detenido por la mano del Alfa en su muñeca.

— Taeyong quiero que dejes de trabajar— alegó en tono secó y firme causando escalofríos en Tae.

—¿Q-que estás diciendo? — Musitó en un tono tan bajo que el Alfa apenas logro escucharlo, no se sentía con la valentía suficiente como para contradecir al mayor pero aún así quería saber el motivo por el cual debía dejar su empleo .

— estás loco si crees que te dejare trabajar estando embarazado de mis cachorros, no solo debes cuidar tu salud sino también las de los bebés y la doctora dijo que debías descansar — el Omega mordió su labio inferior al ver el ceño levemente fruncido de Yuta.

— pero debo trabajar... Cómo se supone que pague la renta de mí departamento si usted no me permite trabajar — objeto Tae jugando nerviosamente con los hilos de su suéter de lana.

— A partir de ahora Yo me encargaré de pagar la renta de tu departamento, aunque no creo que sea necesario hacerlo ya que quiero que vengas a vivir conmigo a mí penthouse.

— Es usted muy amable señor Nakamoto pero no debería moles... ¡¿Que?!— exclamó al oír lo último.

— Un Omega en tu estado no puede andar solo por ahí sin su Alfa. Boram dijo que es bueno para los cachorros sentir la presencia de ambos padres , necesitas estar conmigo.... Además ,Yo debo estar cerca por cualquier inconveniente que surja — le explico de manera calma, Yuta estaba convencido con su decisión . Para Taeyong todo era una completa locura, nada de esto no era parte del trató ¡En qué demonios pensaba cuando acepto la propuesta de este Alfa!