Full Disclosure

Capítulo Diez.- El ciclo se reanudará, y tu seguirás quedándote atrás

El vaho del aliento se perdió en el aire, el frío quemó las narices, enviando un escalofrío en lo más profundo de la piel, la tensión era plausible en el aire.

Las llantas giraron veloces sobre el asfalto congelado, un mal movimiento podría provocar un accidente, la tormenta de nieve que se desató después no hizo sino imposibilitar aún más el camino, los retrovisores lucharon contra los copos traicioneros que se aglomeraron en el vidrio.

Las luces delanteras poco o nada hicieron por iluminar el camino, la temperatura descendió sin piedad mientras más altas se volvían las colinas, el cielo se oscureció por completo cuando la noche los alcanzó, ninguna estrella en el firmamento que marcara el camino, la oscuridad se cernió por completo sobre los héroes.

En el interior, los puños de Pigsy apretaron con más fuerza el volante, una gota de sudor frío recorrió su rostro. A su lado, Sandy se mantuvo con la vista baja, tragando en seco; Tang no se encontró mejor, los lentes empañados ayudaron a encubrir su expresión aprensiva, una mueca permanente en su boca hizo torcer sus labios.

El silencio envolvió la parte trasera de la camioneta, cualquier murmullo fue sofocado de inmediato, muriendo en la boca de quien sea haya sido el interlocutor.

Ninguno de los presentes pudo sacarse de la cabeza las palabras del mono de las sombras.

Wukong había sido el primero en huir del escenario tan pronto dieron la señal, el telón se había cerrado sólo segundos después de que un muy asustado Tang cayera desde el cielo, siendo atrapado por Pigsy antes que el humano pudiera golpear el suelo.

No pudo decir lo mismo de Macaque; sin el glamour sobre él, el rey observó como la cicatriz en su ojo se llenó de hielo, el mono se apoyó en una de las columnas detrás del escenario, respirando agitado, el pelaje negro se erizó en punta cuando Wukong se acercó.

"Por Buda" exclamó la deidad en un susurro. "¿Qué te pasó?, ¿Estás bien?" Preguntó mientras examinaba la cara del azabache, las orejas de Liu' er temblaron cuando la multitud del otro lado siguió gritando y haciendo estallar el escenario en aplausos. El dios se quitó la bufanda del cuello, enredándola a modo de capucha sobre los oídos sensibles de su antiguo amante, la gruesa tela ayudó a aislar el sonido, agradeciendo que nadie más lo hubiera visto sin el encantamiento encima. "Eso se ve terrible" murmuró el sabio, sus ojos recorriendo el cristal sobre la piel de Macaque.

"Duele menos de lo que te imaginas, Peaches" Siseó adolorido, una de sus manos cubrió la de Wukong, manteniéndolo cerca donde su calor natural alivió la molesta sensación del frío en su interior.

Tuvo que obligarse a abrir los ojos cuando escuchó los pasos de los demás acercarse, el jadeo ahogado de MK le hizo desviar la mirada.

"¿Quién te hizo eso?" Inquirió el niño, asomándose por detrás del hombro de Wukong, el resto lo rodeó en un círculo, sus cuerpos tensos mientras esperaban aquellas temidas palabras.

"Lady Bone Demon" Escupió con rencor, exclamaciones salieron de todos los miembros del equipo, siendo Pigsy el primero en maldecir.

"Mierda, ¡¿ella está aquí?!" soltó con nerviosismo, volteando hacia todos lados como si en cualquier momento la dama de huesos fuera a aparecer. El demonio negó con la cabeza.

"No lo creo... al menos ya no" musitó en voz baja, levantando su vista para encontrarse con los rostros preocupados de los demás. "pero se está moviendo"

Un corto silencio los envolvió a todos, antes de escuchar el resoplido de Tang, sus hombros cayeron con fatalismo, acomodando sus lentes en medio su tic nervioso.