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En una de aquellas molestas juntas que se daban cada cierto tiempo, third reich como en todas estas hacía todo menos poner atención, en este caso para matar el tiempo comenzó a comerse al ruso de forma disimulada con la mirada

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En una de aquellas molestas juntas que se daban cada cierto tiempo, third reich como en todas estas hacía todo menos poner atención, en este caso para matar el tiempo comenzó a comerse al ruso de forma disimulada con la mirada.

Observaba sus acciones, su entrecejo fruncido mientras escribía y el como relajaba ligeramente su rostro al levantarse por un pequeño lapso de tiempo para distintas cosas, como opinar o dar ideas con el tema que se trataba en aquel momento. El ruso siempre llevaba ropa para el frío pese a estar a 70° celsius, bueno, no tanto, en esta ocasión aquel gran abrigo acolchonado que llevaba lo tenía desabrochado, por lo que podía verse su torso cubierto con una camisa gris que comenzaba por la mitad del cuello y finalizaba un poco más abajo de su cintura.

La camisa que portaba era algo pegada, por lo que podía verse de mejor manera la complexión del ruso, se notaba que estaba en forma y reich lo noto. Durante el resto de la junta, no paro de desnudarlo con la vista.

[...]

El alemán mayor estaba en eso precisos momentos algo nervioso, como lo estaba desde hace ya un tiempo cada que aquel albino se encontraba cerca suyo. Alemania, invito al ruso para almorzar en un café cercano, reich sabía que su primogénito no lo había hecho precisamente por amabilidad, solo lo quería molestar.

En una de sus manos cubiertas con un guante blanco, llevaba un vaso de cristal que un poco de agua de uva en ella, fácilmente podría decirse que era vino a decir verdad. Podía ver cómo Alemania y Rusia mantenían una charla tranquila, no podía evitarlo, sentía algo de envidia por el azabeche, más no precisamente por poder hablar de forma tan animada por el eslavo, sino de otras cosas.

El podía hablar con cualquiera, podía disfrutar de una agradable charla sin algún insulto y no le tenían el mismo terror o desprecio que todos sentían con el, sin darse cuenta agachó la mirada y se sumergió en sus profundos pensamientos.

El alemán menor lo noto, sabía muy bien el por qué de la actitud de padre, no había sido su intención haberlo desincluido de la charla.

— sabes papá, el día de hoy luces bastante bien — halago el alemán, mientras le señalaba con su dedo índice — ¿No es verdad, Rusia? — el nombrado, quien ya estaba en más confianza con los alemanes, analizó de pies a cabeza a reich, poniendo algo nervioso a este por la atenta mirada bicolor sobre el.

— alemania tiene razón, hoy luces genial — reich se ruborizo, ¿De verdad le acababa de dar un cumplido? — se ve muy bien en traje, es bueno que los use casi todo el tiempo, así puede mostrar lo genial que le van — el nazi no respondió, solamente desvió su mirada mientras su corazón latía a gran velocidad.

— tranquilo Rusia, si no acabarás diciendo cosas sucias de mi padre — el ruso se ruborizo un poco, se expresó de más.

— lo siento, no fue a propósito — se disculpó algo apenado, retomando su postura.

a tu lado - rusia×third reich.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora