• Cᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 𝟥

61 5 2
                                    


BELLA OSCURIDAD
──────⋆𖥨ํ∘♡.ೃ*✩──────

Lorie usó su velocidad de vampiro para   limpiar su habitación y después se dirigió  
al cuarto de baño. Se paró frente a la  puerta  y la abrió con mucho cuidado como si un animal rabioso, estuviese a punto de atacarla. Lo  primero que vió, fue el  gran  espejo del que había hablado Drogo. No podía creer lo que  veía, sin embargo en esta ocasión no grito, optó por morderse  el  labio inferior. Así  nadie  diría que quería llamar la atención.

Se  acercó  a  el  para  ver  con detalle  la  silueta  de  una chica  alta,  esvelta,  blanca  como  la  nieve  con  mejillas ligeramente sonrojadas . Se quitó el laso que sujetaba su cabello y este cayó  sobre  su  espalda como una cascada  que  llegaba  hasta  su  diminuta  cintura. El tono rosa  no  había  cambiado,  ni  su  antiguo fleco, pero  sus  facciones  ya  no  eran  las  de  una  niña,  se veía    como  una   chica   de  unos 22 años. 

Paso  las palmas  de  sus  manos  sobre  su  cara. Después  comenzó  a  desvestirse y se quedó en ropa interior frente al espejo. Se giró en varias direcciones mientras pasaba su manos por varias zonas de su cuerpo. Por un momento su corazón se llenó de felicidad, recordó todas las veces que había molestado a la canguro, porque muy en su interior sentía algo de envidia. 

Se giró en   dirección  al  perchero  de  dónde colgaba  un  bonito  vestido en color rosa descubierto levemente de la espalda, en corte  sirena  con  tirantes  gruesos  que  corrían a mitad de  los  hombros. Lo acarició  suavemente con sus dedos. Era  algo  increíble, tenía  la  sensación  de  que  en  algún momento se despertaría. Pero le apetecía disfrutar del momento.

Se  metió  a  la  ducha  y  dejo el agua fluir por su  cuerpo mientras masajeaba su cuero cabelludo. Pasaron algunos  minutos,  cuando   terminó  se  colocó  la  bata  y se  puso  una  toalla  en  la  cabeza. Tomó   su  vestido  y   lo   colocó   suavemente   sobre   su   cama. Había  llegado la  hora  de  la  verdad. No  había  nadie esperándola  para  ayudarla a vestirse o peinarse. Tenía que hacerlo sola.

Una   vez   que   seco  su  cabello  se  hizo  un  moño  con una trenza al estilo griego casí sobre su frente. Algunos mechones rosas salían  de  su peinado  lo  que le daba un toque alocado y casual. Nunca había usado un vestido de mayor, así que tenía que improvisar y al ser el vestido tan ceñido seguro no debía colocarse ninguna prenda debajo de el. 

Suspiró   profundamente, en  su  cientos  de  años  jamás  había  tenido  que  pasar por una  situación  igual.  Pero ayudar a la canguro a maquillarse y peinarse le había servido para poder hacerlo ahora.

Antes de ponerse el vestido, buscó en su clóset sus zapatos, había muchos de diferentes colores, pero si algo tenía Lorie era  su  gran  estilo para combinar las piezas que portaria. Se puso sus tacones y se colocó el vestido, cuidando de no despeinarse. Se maquillo un poco, se rocío con un perfume con aroma a lavanda  y se colocó un pequeño collar de oro blanco con un corazón de cristal que seguramente su padre le habría traído del algún viaje.

Escuchó como un móvil emitía un sonido en alguna parte de la habitación. El sonido venía de debajo de la cama. Lo levanto y leyó un mensaje de su hermano:

Dᴇ Dʀᴏɢᴏ ᴘᴀʀᴀ Lᴏʀɪᴇ:
¡𝐿𝑜𝑟𝑖𝑒 𝑦𝑎 𝑒𝑠 𝑡𝑎𝑟𝑑𝑒! ¿ 𝑃𝑜𝑟 𝑞𝑢𝑒́ 𝑡𝑎𝑟𝑑𝑎𝑠 𝑡𝑎𝑛𝑡𝑜?

Pasión y Poder Donde viven las historias. Descúbrelo ahora