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"Al menos te saqué una sonrisa, no tienes idea de cómo me puse. Me encantaría ser el único dueño de esas sonrisas, admito que me pone algo celoso el saber que otros la disfrutan. Sé que nadie lo haría como yo.

Hermoso niño, ¿qué me haces? Cada día es una lenta tortura el verte tan lejos y a la vez tan cerca. Seca tus preciosas lágrimas y sonríe para mí, no me gusta verte triste. Te dejé más regalos, espero que al menos eso te saque más sonrisas.

Sé fuerte, me tienes y pronto estaremos juntos."



Jimin empujó la puerta de su casa aún con lágrimas en sus ojos y avanzó a paso lento a la sala que estaba casi vacía. Sintió un calor en su pecho y no pudo evitar soltar una leve risa sorbiendo por su nariz.

Observó decenas y decenas de rosas rojas en la mesa, cajas enormes de chocolates y al lado también un pequeño peluche de perro con un corazón en las patitas.

— Tan lindo. — Susurró tomando el perrito y dejando un profundo beso en la cabeza de éste y abrazándolo con fuerza acto después.






~Kisses

LIMERENCIA ~YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora