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Paso 3: Acaríciame.

La camisa de botones de Yoongi finalmente quedó completamente abierta mostrando su blanco pecho que parecía brillar más con la luz de la luna. Sencillamente una magnificencia de rastros suavemente rojizos por la clara excitación.

Jimin tembló más y lentamente deslizó la tela por los brazos de su amado hasta tomarla en brazos y aspirar su olor.

Yoongi sonrió al verlo y Jimin volvió a verlo deslizando suavemente la tela dejando solo sus ojos visibles. Esos ojos oscuros y sonrientes, brillando de loco enamorado siendo tomado.

El adolescente tiró la camisa que cayó con delicadeza al suelo sin hacer ruido. El suspiro se escuchó en la parte de arriba de la cama cuando Jimin comenzó a pasar sus manos suaves por el pecho del mayor completamente hipnotizado por la belleza. Era un lienzo donde su amor podía salpicarlo de todos los colores que quisiera.

Sus ojos volvieron a conectar y se sonrieron. Yoongi comenzó a sobar sus brazos con suavidad hasta bajar a las piernas y muslos del joven que sobó.

Jimin y suspiró cerrando sus ojos reposando sus brazos a sus costados.

Yoongi rozó suavemente su abdomen, subiendo hasta sus clavículas que rozó y rozó con sus labios antes de dar una tímida mordida. Jimin se estremeció y soltó otro agudo gemido apenas perceptible sintiendo las manos de Yoongi paseándose por su cuerpo desnudo.

No había morbo en absoluto. Para Yoongi, no estaba acariciando un cuerpo desnudo. No. Estaba acariciando una obra de arte. Estaba apreciando el momento de vida de aquel bello ser; naciendo justo como se encontraba ahora de la persona que le había dado vida. Y ahora otra vez; tímido, entregándose nuevamente como nació para dar nacimiento a un nuevo lazo que se formaría cuando se unieran.

Y Yoongi jamás creyó ser más afortunado como en ese momento.








~Kisses

LIMERENCIA ~YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora