Llevo días sin salir de mi habitación, porque ya no tengo motivos para hacerlo.He pensado en la droga que hay en la cocina, pero no quiero volver a eso, aunque tengo ganas de al menos fumar algo.
Seguramente Nanon si sabría que hacer para solucionar esto.
Salgo un momento de mis pensamientos, porque noto que la habitación de Drake está en silencio hace horas.
Oh, es hoy.
Hoy golpearía a Jimmy, pero ya se han conocido diferente, así que no creo que ocurra.
Sin embargo, me asusta creer que algo más pasó esta noche, para que terminara tan mal, y sé que es poco probable, pero prefiero ir a asegurarme de que todo estará bien.
Tomo las llaves y salgo a la calle, cruzándome con un autobús escolar, que está manejando tan tarde, porque están regresando de un campamento.
Me acuerdo.
Están todos los niños dormidos atrás, y yo me paro frente al conductor, que se ve obligado a detenerse.
—¿Qué te pasa? —me pregunta sacando la cabeza por la ventana.
—Tiene un problema con los frenos.
—¿Disculpa?
—Si no baja, van a morir todos en unos minutos.
Él me mira confundido, pero yo no voy a moverme si no me hace caso.
—Recuerdo las noticias de esta noche, no podrá detenerse, y entrará en la avenida principal, varios autos a velocidad van a chocar, y el autobús explotará matando a mucha gente.
—¿Qué?
—Solo revise sus frenos —le digo señalando la parte exterior del bus.
Varios autos atrás están tocando sus bocinas, pero él obedece, y creo que es porque le doy miedo.
Se agacha sin quitarme la mirada de encima.
Rodea el bus, luego de mirar cortamente abajo, y finalmente se para en la puerta de los pasajeros.
—Niños, llamaré a sus padres para que vengan por ustedes, creo que el autobús está dañado.
Suspiro satisfecho, y sonrío, retomando mi camino.
Es reconfortante saber que puedo mejorar esta vida, para muchas personas.
Aunque no puedo mejorar la mía, así que sigo caminando.
No me queda lejos el muelle, y tampoco tengo dinero para darme el lujo de usar un taxi.
Estas calles lucían más bonitas en mis recuerdos, porque Nanon estaba conmigo.
Resoplo cuando por fin he llegado, y entro buscando a Drake con la mirada, pero no esta.
Nanon sí.
Mi mente empieza a trabajar e intento recordar que relación tiene él con las personas aquí, pero esa preocupación se vuelve secundaria, cuando veo que el chico que está bailando con él, lo toca.
Incluso si Nanon le está sonriendo, no puedo evitar meterme.
Al acercarme, entiendo que ha tomado, y ahora tiene sentido que no se lo esté quitando de encima.
Es que Nanon no sabe tomar.
Agarro su brazo al llegar y lo jalo hacia mí.
Giro, empujando a ese Alfa, y su cerveza se echa en su camisa.
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Cuando nos conocimos | Ohmnanon
FanfictionOhm está harto de su vida, y una noche desea volver al pasado para no conocer a Nanon.