Destinos Cruzados

Capítulo 2

(POV Zoro)

 Habíamos terminado el ensayo temprano ese día, Kaya, la novia de Usopp se había encargado de grabarlo para nosotros, ya estaba casi lista la grabación del disco y en un par de días seria el lanzamiento.

Deje mi bajo junto a la pared, los chicos hacían lo mismo con sus instrumentos, a excepción de Franky y Usopp, ya que el primero toca la batería y el segundo el teclado.

­—Oi marimo idiota, no vayas a olvidar lo de esta noche, sé puntual. – el maldito cejas de sushi me dijo mientras ponía su guitarra junto a mi bajo.

—Ya lo sé cejas de caracol, ahí estaré, solo debo encontrar niñera para Chopper. – Chopper es mi hermano menor, solo tiene diez años y nuestros padres murieron cuando él era solo un bebe, me hecho cargo de él desde entonces, aunque hasta que cumplí la mayoría de edad estábamos bajo la tutela de mi padrino.

—Que paso con Dadan? – Luffy se acercó a nosotros luego de apagar el micrófono.

—No podía hoy, tenía un compromiso. – les explique, Dadan era la antigua cuidadora de Luffy y sus hermanos, era una mujer algo entrada en años y podía parecer mal humorada, pero tenía buen corazón.

—Chicos, ya es hora de su encuentro con las fans. – anuncio Vivi, nuestra representante.

—A quien mierda se le ocurrió esta estúpida idea. – me queje como cada ensayo.

—Sabes que fue la maldita idea de Crocodile. – Crocodile era el apodo que recibía el dueño de la disquera con la que acabábamos de firmar hace solo unos meses, el tipo era un bastardo, pero el bastardo sabía lo que hacía.

No es que no me agradara la idea de compartir con las fans luego de los conciertos, pero Crocodile había insistido en que sorteáramos entradas para que también asistan a los ensayos y eso es agotador, pero no podíamos hacer más, ya estábamos metidos en esto.

—Hey linduras gracias a todas por estar aquí. – definitivamente el idiota de cejas rizadas tenia tacto para esto, a pesar de ser Luffy la voz principal de la banda, al momento de conquistar el corazón de las chicas era el rubio mierdoso quien tomaba la palabra.

—Ahhh. – el grito ensordecedor no se hizo esperar, todos entramos en la sala donde había alrededor de unas quince chicas, en ese momento el celular del rubio sonó y salió de la habitación.

— ¿hacia dónde va Sanji-kun? – una de las chicas me pregunto directamente, le iba a decir que "a quien mierda le importa", sin embargo, Franky hablo por mí.

—Es una llamada de negocios, no te preocupes viene enseguida.

—E...eres Zoro verdad? – me giré cuando oí aquel balbuceo y un toque de un pequeño dedo en mi hombro. Frente a mí se encontraban dos chicas tomadas del brazo, una de ellas muy hermosa debo admitir, tenía el cabello de color turquesa, un poco más oscuro que Franky y la otra era pelinegra y unos centímetros más baja que la otra, también era bonita.

—Hey, que tal. – salude con una fingida sonrisa de medio lado, no estaba del todo de acuerdo con que cada uno de nosotros tuviese que vender una imagen, pero al menos el rol que me tocaba interpretar, me ayudaba a no tener que fingir del todo.

—Ho...hola, soy Alondra. – la chica de cabello negro se presentó. – y esta es mi amiga Hiyori, hemos esperado semanas por este momento.

—Al fin están aquí. – respondí tomando mi botella de sake y dirigiéndome hacia uno de los sofá de la sala destinada para estas reuniones.

—Es un verdadero honor conocerte Zoro, realmente eres más hermoso en persona. – la chica de cabello negro se sentó a mi lado y su amiga junto a ella. Nunca he sabido muy bien cómo reaccionar a ese tipo de comentarios, por lo que cambie el tema.