30 days to fall in love (DekuBaku) [Omegaverse]

『Día 2』

Un bouquet de 500 Rosas ¿no estará exagerando con ello? Mmmm no, la florista había dicho que entre más Rosas más demostrabas lo grande era tu amor... Mh ¿Estrategia de venta o realidad? Sea como sea le creyó. Se hubiera llevado más de 1000, pero ya no tenían en la floristería en ese momento ¿¡Entonces por qué le dijo que la cantidad de Rosas demostraba lo mucho que amaba a su Omega sin tener las suficientes!?

Se enojó... Un poco... Un poquito, la dependienta del negocio no tenía la culpa.

Se despidió de la vendedora agradeciéndole la ayuda y se retiró del lugar listo para ir al encuentro con SU (futuro) Omega. Pero primero a una tienda más, después seguirá su camino al refugio mientras que su vez más llamaba la atención de los transeúntes ¿por el imponente ramo de Rosas? ¿Porque se trata de el héroe número 1? ¿Por las dos? Mph, en su caminata escuchaba los sonidos de cámara del teléfono y muchos murmullos, preferiría no hacer caso y no detenerse quería llegar al lugar donde su amado se encontraba tan rápido como le fuese posible sin maltratar las rosas.

Los jadeos de asombro nacieron de las gargantas de algunos Omegas y Betas en cuanto vieron al Héroe llegar al refugió con semejante y majestuoso bouquet de Rosas. Sin lugar a dudas Bakugō era el Omega más afortunado que conocían, siendo también la esperanza de todo aquel Omega en el refugio que esperaba la llegada de un Alfa tan maravilloso y cariñoso como lo era Deku.

Izuku no necesito preguntar el paradero de Katsuki pues inmediatamente lo llevaron al lugar donde se encontraba junto a sus cachorros. El comedor común.

Katsuki no estaba pensando en Deku exactamente..., tenía otras preocupaciones en mente alimentando a Kaori entre sus brazos y Yoshio a su lado comiendo un sándwich. Apenas se topó con las esmeraldas del Alfa y ese ramo de rosas gigante todas sus angustias se disiparon...

... Un segundo...

¡¿Un ramo de rosas gigante?!

-¡Deku!... -Tuvo que bajar el biberón. Kaori ya había bebido la gran parte así que no se quejó.- Oh. Dios.

-Katsuki-san I'M HERE- hablo detrás del bouquet apenas. El nombrado subió un poco más a la niña cerca de su rostro, para ocultar que estaba sonrojado como nunca antes.

Yoshio saltó de su asiento, y corrió hasta colgarse de la pierna de Deku. ¡Estaba muy feliz de verlo!

-¡Deku-san! ¿Esas flores son para mi mamá? -exclamó, en voz perfectamente alta que todos escucharon.

Igual, todos estaban viendo la situación del refugio. ¡Qué omega tan afortunado era Bakugō-san!

Asintió volviendo a agacharse quedando a su altura -Y también traje algo para ti- dijo con voz baja. Con un brazo sostuvo el bouquet llevando su mano libre hacia su cinturón sacando de una de las bolsas algunos empaques de galletas donde venían tarjetas sorpresa coleccionables de héroes. -Solo no las comas todas de una sentada, te saldrán caries ¿bien?- volvió a ponerse de pie tomando una de sus manitos -¿me acompañas a darle esto a tu mamá?- susurro, como Si de un secreto se tratará

¡Sí! ¡Deku era increíblemente genial! por supuesto que lo acompañaría, a todos lados, ¡era su héroe favorito! Tomó su mano y lo siguió en calma hasta encontrarse con su mamá hasta encontrarse de nueva cuenta frente avergonzado cenizo -Sorpresa- dijo en voz alta, no extendía el ramo en su dirección, sabía que al tener a la cachorra en brazos le sería imposible tomarlo -disculpa que sea algo tan pequeño- rió bajo por su mala broma.

Cuando el héroe descubrió su rostro, Kaori balbuceó en dirección a él. No decía nada coherente, pero parecía querer acercarse a Deku (o a las rosas) mientras Katsuki, detrás de ella, no paraba de mirarlo, encantado.