Capitulo 9 - Felicidad

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Ines POV

Cuando llegamos hacía mucho calor por lo que nos refrescamos un poco antes de bajar a cenar, la casa estaba adornada con hermosos arreglos se notaba el toque de una mujer. Comimos entre risas y anécdotas de la niñez de Victoriano en la finca, eran sus más hermosos recuerdos. Al terminar de cenar nos sentamos en una banca del jardín a ver el atardecer mientras nuestro hijo jugaba en el césped con sus juguetes.

Victoriano tuvo que atender una situación que se presentó por lo que me quedé sola con mi hijo un momento. Cuando se ocultó el sol entre con Alejandro ya que era hora de dormir, lo acosté en el cuarto que habían preparado para él y espere a que se durmiera. Cuando por fin se durmió salí en busca de Victoriano el cual ya venía por mi. Fuimos al cuarto de él, cuando entre todo el cuarto estaba adornado con velas y pétalos de rosas.

Victoriano esta hermoso, - le dije emocionada

Me alegra que te guste Morenita, es solo una pequeña forma de demostrarte todo lo que siento por ti, - me habló al oído mientras me abrazaba por detrás

Gracias me encanto, ahora déjame a mi demostrarte lo que siento, - lo bese con todo el amor que sentía, además esa noche le demostre de varias maneras lo mucho que lo quería

Al día siguiente cuando abrí los ojos Victoriano no estaba a mi lado, solo encontré una rosa con una nota donde me decía que tenía que resolver unos asuntos. Me levanté con una sonrisa de oreja a oreja ya que por primera vez me sentía realmente feliz, y eso me daba cierto miedo. Después de tomar un baño y alistarme fui a la recamara de mi hijo, allí lo encontré aun dormido. Lo desperté a besos ya que le encantaba, no de muy buen ánimo se levantó y tomó un baño para espantar el sueño. Cuando estuvo listo bajamos a desayunar, para nuestra sorpresa Victoriano nos esperaba en la mesa con todo un buffet.

Buenos días, - nos pregunto mientras me daba un pico y saludaba a nuestro hijo

Hola, Tenemos invitados a desayunar, - pregunte curiosa ya que era mucha comida

No, todo esto es para ustedes mis amores, - nos dijo con una sonrisa

Pero es mucho Victoriano, pareciera que va a comer un ejército

Es que en este lugar siempre se ha comido bien, pero comamos que muero de hambre, - nos sentamos a la mesa, comimos tanto que parecía que íbamos a reventar en cualquier momento

Sobró mucha comida, porque no le dices a tus empleados que se la coman, así no se desperdicia, - le exprese con algo de pena

Lo que la señora de la casa diga, Candela por favor comparte toda esta comida con los demás trabajadores

Sí mi niño, - respondió la nana de Victoriano

Ahora vamos que les tengo una sorpresa, - nos habló con una sonrisa

Cuando salimos de la casa ya nos tenían dos caballos ensillados y esperando por nosotros, yo me monte en uno al mismo tiempo que Victoriano montaba el otro con nuestro hijo. Como yo no sabía montar fuimos despacio, Victoriano me daba instrucciones y se mantenía alerta por si a mi caballo le pasaba algo. Después de un rato llegamos a una hermosa cascada la cual estaba adornada con flores, también había una manta en el suelo con cosas de comer y tomar.

Mi amor esta hermoso, pero cuando hiciste todo esto

Ya ves, tengo varios trucos por ahí

Si me doy cuenta, gracias, - le di un beso

Y aun falta lo mejor, - Victoriano se puso de rodillas, sacó una cajita de terciopelo y la abrió mostrando el más hermoso anillo de compromiso

Victoriano es hermoso, - exprese con lágrimas en los ojos

Ines Huerta, mi morenita hermosa quieres casarte conmigo y hacerme el hombre más feliz sobre la tierra, - yo me quedé en shock por lo que no dije nada

Di que si mama, - me grito Alejandro

Si acepto ser tu esposa, - Victoriano colocó el anillo en mi dedo para luego levantarme en el aire y dar vueltas

Dijo que sí, - gritó él a todo pulmón.

Estas loco Victoriano, ya bajame

Si estoy loco pero por ti, - tomó mi boca en un beso apasionado

El resto del día la pasamos en la cascada celebrando el compromiso, nadamos y jugamos en el agua hasta cansarnos, también comimos de lo que había ya que de tanto juego nos dio hambre. Ver a Victoriano compartir con Alejandro fue hermoso, era como si se conocieran desde siempre. Al caer la tarde regresamos a la casa, después de tomar un baño y comer Alejandro cayó dormido ya que venía bastante cansado.

Una vez dejamos a nuestro hijo en su recamara Victoriano y yo nos fuimos para la nuestra, nos pasamos todo el camino besándonos y nos tropezamos varias veces. En cuanto cerramos la puerta comenzamos a desvestirnos, quedamos desnudos en cuestión de minutos ya que ambos nos deseábamos locamente. Esa noche nos amamos como solo él y yo sabemos, pero además de lo físico también conectamos nuestras almas con esa entrega, fue como si nos unieramos para toda la vida sin que nadie pueda separarnos.

Mansión Mendoza

Enrique estaba reunido con su amigo Gerardo en su despacho, revisaban cosas del trabajo mientras tomaban unas copas. Ellos además de ser grandes amigos eran socios a partes iguales del bufete que fundaron al salir de la Universidad de Leyes, aunque a veces no tenían la misma opinión siempre lograban entenderse bien para defender a sus clientes y esta era una de esas ocasiones.

Por lo visto no vamos a ponernos de acuerdo así que mejor lo dejamos por ahora, - dijo Gerardo tomando un sorbo de su bebida

Es que eres un terco

No aqui el unico cabeza dura eres tu, pero ya dejemoslo ahi por hoy

Si creo que sera lo mejor, sabes no he podido sacarme a esa mujer de la cabeza

La de la fiesta, amigo pero que te dio para tenerte asi

No se, es tan bella

Tengo que conocerla a ver porque te tiene tan loco

Ya lo veras cuando la conozcas, ahora necesito que me averigues sobre ella

Y como pretendes que haga eso, quieres que contrate un detective privado

No menso, con preguntarle a tu mujer tienes, ella siempre se sabe todos los chismes de nuestra clase social

Quieres que le pregunte a mi esposa por otra mujer, quieres que me pida el divorcio verdad

No claro que no, preguntale cuales son los últimos chismes o algo asi

Vere que puedo hacer pero no te prometo nada, ahora ya me voy

Nos vemos mañana en el bufete

Nos vemos Enrique, y mejor prestale atencion a tu esposa y deja de pensar en esa extraña

Que chistosito me saliste, tú sabes que no aguanto a Debora

Yo solo digo que la mantengas feliz, es capaz de quemar un edificio con tal de llamar tu atención

Eso sí, pero ya no quiero hablar de eso, adios amigo

Adiós, - Gerardo se montó en su coche y se fue a su casa, todo el camino se la paso pensando en esa obsesión de Enrique, le preocupaba que cometiera una locura 


Aqui les dejo este capitulo que espero sea de su agrado. Gracias por leer y seguir mi historia significa mucho para mi. Espero sus votos y comentarios con ansias... Otra vez gracias ♥♥♥

Mi destino eres túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora