Capitulo 13 - Madre e Hija

303 38 5
                                    

Victoriano POV
Estoy en la sala de espera de un lado para el otro, nunca he sentido tanto miedo como en estos momentos. Ines lleva tiempo allí adentro y nadie sale a darme noticias de ella, la última vez que la vi estaba tan pálida que se me rompió el corazón. Estaba a punto de ir a preguntarle a la recepcionista cuando por fin salió el doctor, yo me acerque rápidamente a él.

- Doctor como esta mi esposa, - pregunté con la voz entrecortada
- Le hicimos un lavado de estómago y por el momento ella y el bebe está bien
- Escuche bien, dijo bebe, - dije entre afirmación y pregunta
- Si Señor Santos, su esposa esta embarazada felicidades, - sonrei como tonto
- y podría decirme si abusaron de ella, - no sabía cómo preguntarlo
- Puede estar tranquilo, a su esposa no la tocaron, - sentí como si mi alma regresara a mi cuerpo
- Gracias Dios mío, puedo verla, - pedí casi en suplica
- Lo dejare pasar pero solo unos minutos, su esposa debe descansar
Gracias por todo doctor, - apreté su mano

Aproveche que el doctor fue por la enfermera para llamar a Diana, le conté lo que pasó y como estaba todo. También le pedí que le contara a la madre de Ines, ya que esta debe estar preocupada, cuando vi al doctor acercarse termine la llamada. La enfermera me llevó hasta el cuarto de mi esposa, me dio varias instrucciones para luego retirarse.

Cuando entré al cuarto mi corazón se partió en mil pedazos al verla ahí en esa cama toda pálida, me acerque con cuidado y tome su fría mano para darle un beso. Cuando sintió mi beso mi morenita se removió en la cama, abrió los ojos y me miró, en ese momento me perdí en lo verde de su mirada que me decía a gritos cuánto se alegraba de verme.

- Que paso mi amor, - me preguntó con voz débil
- Eso no importa ahora mi vida, lo importante es que tu y mi hijo estén bien, - besé su mano otra vez
- Qué le pasó a Alejandro, - dijo con voz asustada
- Tranquila Ale esta bien, esta con Diana
- Entonces porque dijiste que tu hijo
- Mi morenita, el doctor me dijo que estas embarazada
- Que, y como esta el bebe
- Gracias a Dios los dos estan bien, nada más que el doctor prefiere que te quedes esta noche
- Que bueno, me hubiera sentido muy mal si algo le pasaba
- Lo se, ahora descansa mi vida
- Lo haré si prometes que no me dejaras sola
- Te lo juro, te amo no sabes el miedo que tuve a perderte
- Pero ya estoy bien, te amo mucho Victoriano, - nos dimos varios besos para luego quedarnos dormidos
>>>>>>>>>>>>>>

Ines POV

Unos días han pasado desde el incidente en la mansión Mendoza, aún no puedo creer que Enrique fuera capaz de hacer algo tan vil. Cuando Victoriano me contó lo que pasó yo no lo podía creer, gracias a Dios yo no recuerdo mucho por eso de la droga. En estos días que tomé de reposo Victoriano no se ha separado de mí, ha estado trabajando desde casa con tal de cuidarnos.

Hoy regreso a la casa de modas aunque a Victoriano no le agrado mucho la idea, me dejo ir pero me hizo jurarle no se cuantas veces que me cuidaría y comería bien. Después de dejar a mi pequeño en la escuela, pase por Diana para irnos juntas al trabajo. Al llegar me sorprendieron con una hermosa bienvenida, todos y cada uno pasó a darme sus mejores deseos.

Una vez todos se retiraron a sus trabajos Diana, Pipino y yo nos pusimos a trabajar en los últimos diseños que necesitamos para el desfile de la bienal. Estábamos en eso cuando me avisan que alguien me buscaba, deje instrucciones y salí a ver quien era pero me lleve una sorpresa al ver que era mi madre. Enseguida la pase a mi oficina, en cuanto entramos le di un abrazo que duró varios minutos ya que la extrañaba horrores.

- Te extrañe tanto mamita, perdoname por no llamarte en todos estos años, - le pedí mientras acariciaba su rostro lleno de lágrimas
- También te extrañe mi vida, y no te preocupes yo entiendo porque lo hiciste, - nos abrazamos nuevamente
- Quieres algo de tomar o de comer, - le pregunté
- Estoy bien, dime como estas tu, me quede muy preocupada desde el dia de la fiesta
- Tranquila tu nieto y yo estamos bien, gracias a Dios la droga no nos afectó
- Y que tiene que ver Alejandro en todo esto, déjame decirte que mi nieto es tan guapo
- Si como su padre, y no me refiero a Ale sino al que está aquí, - puse su mano en mi vientre
- Voy a ser abuela de nuevo, se nota que tu y tu marido no pierden tiempo eh, - reímos las dos
- Ma cuéntame de mi padre, de ti, que ha sido de ustedes en todo este tiempo
- A tu padre le diagnosticaron una enfermedad del corazón, ya lleva varios años en tratamiento y está estable pero no puede alterarse, este tiempo nos hemos dedicado a darle a nuestro nieto el amor que sus padres no le dan
- Mamita si necesitas algo no dudes en decirme, como ves no me ha ido tan mal, y si en la fiesta me di cuenta de la soledad de ese pequeno
- No te preocupes hija Enrique se ha hecho cargo de nosotros, creo que es lo único bueno que ha hecho además de mi nieto
- Bueno pero a partir de ahora lo haré yo, nada mas que no le digas a mi padre sino ya sabes como se pone
- Ni me acuerdes, ahora cuéntame todo y como es eso de que te casaste sin decirnos
- Todo empezo el dia que sorprendi a Enrique con mi hermana, - le conté todo con lujo de detalle
- Aun me cuesta entender porque tu hermana te hizo eso, pero hay que agradecerle porque gracias a ella conociste a tu marido
- En eso tienes razón, y lo de la boda rápido fue porque Victoriano quiere darle su apellido a Ale y creímos que hacerlo asi seria mas facil, - justo en ese momento me avisaron que él había llegado a verme,  no dude en hacerlo pasar
- Mi amor que lindo que estés aquí, - le di un beso que fue subiendo de intensidad hasta que mi madre hizo ruido
- Perdón no sabia que estabas acompañada, - me dijo Victoriano tiernamente
- Está bien, y que bueno que viniste porque así los presentó formalmente, mami el es Victoriano Santos mi esposo, amor ella es mi madre Consuelo Rivas de Huerta, - se dieron la mano
- Es un honor para mi conocerla, Ines me ha hablado mucho de usted, - le expresó mientras beso su mano
- El placer es todo mío, quiero darte las gracias por querer tanto a mi hija, por cuidarla y ayudarla a sanar su corazón, - unas lágrimas se escaparon de sus ojos
- No llore señora, soy yo quien le debe dar las gracias a usted por la gran mujer que es Ines, hizo un gran trabajo como madre
- Yo no diría lo mismo pero bueno
- Ma puedes visitar a tu nieto cuantas veces quieras, las puertas de nuestra casa siempre estarán abiertas para ti
- Gracias a los dos, y les tomaré la palabra ya que quiero ser parte de la vida de mis nietos
- Hoy hablare con Alejandro, estoy segura que estará feliz de saber que tiene una abuela que lo adora, - en eso mi estomago hizo ruidos de hambre
- Al parecer mi bebe tiene hambre, que les parece si las invito a comer, - hablo Victoriano con una sonrisa
- Me encanta la idea, vamos ma así seguimos poniendonos al dia, - exprese yo con felicidad
- Acepto pero que sea en un lugar privado, no creo que aun estés lista para enfrentar a tu padre
- No se si algun dia lo estaré
- Entonces vamos, que hay algo que necesito comentarles por eso vine, - salimos los 3 a comer


Que pasara ahora, será que Ines por fin se reconcilié con sus padres. Que pasara con Enrique? Gracias a todos por leer la historia!!! ♥️♥️♥️

Mi destino eres túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora