𝐁𝐎𝐃𝐘𝐆𝐔𝐀𝐑𝐃 𝐎𝐅 𝐀 𝐍𝐈𝐆𝐇𝐓𝐌𝐀𝐑𝐄 (𝐊𝐚𝐠𝐞𝐇𝐢𝐧𝐚)

Capítulo 10. "El ataque"

*Aparece* 👀

...

Kageyama no comprendía como podía haber cruzado la línea con Hinata, una línea que parecía imposible de cruzar-

Estaba tan confundido que su cabeza daba vueltas. Luego de lo sucedido había corrido a su habitación como un niño asustado por "El Coco", dejando a Hinata solo en el gimnasio de su casa. Kageyama nunca se había sentido más patético por algo que hubiese hecho en el pasado. Él ni siquiera pudo ver a Hinata a los ojos.

Bien, eso había sucedido. Él se había corrido por frotarse con otro hombre. Eso nunca había pasado antes, pero como bien decían, siempre hay una primera vez para todo. ¿Eso significaba que ahora era gay? Kageyama no estaba seguro. Hasta ese momento las pocas personas por las cuales se había sentido atraído habían sido mujeres, así que simplemente había asumido que era heterosexual y nunca se detuvo a analizar más allá, pero ahora, con los hechos recientes, tal vez tenía algunas cosas que replantearse.

Tenía que admitir que encontraba atractivo a Hinata, y si, había disfrutado más que lo que podía admitir aquel encuentro. ¿Pero eso lo convertía en una persona gay? La verdad era que no se sentía atraído a otros hombres además de Hinata, pero Hinata era un hombre, por lo que Kageyama estaba casi seguro de que podría ser bisexual. Sin embargo, no quería preocuparse en ponerse una etiqueta todavía. Kageyama había descubierto recientemente -gracias a Kuroo- que cuando se trataba de sexualidad había tantas como colores en el arcoíris -y más-

Lo único que Kageyama sabía, era que no sabía nada en lo absoluto.

Lo que si sabía era que no podía permitir que aquello se convirtiera en un problema para él. Hinata estaba definitivamente fuera de los límites, no solo porque era una pequeña mierda odiosa que encontraba difícil de soportar, también porque era su maldito jefe. Incluso si Hinata fuese mujer, aquello habría estado terriblemente mal por el simple hecho de ser su empleador. Y él lo sabía mejor que eso, él estaba trabajando ahí con un objetivo en mente, él no podía estar perdiendo el tiempo en asuntos como ese.

Entonces, si, aquello había pasado, y si, él lo había disfrutado, pero eso era todo. Tenía que poner un límite con Hinata antes de que malinterpretara las cosas.

Lo que lo llevó a su siguiente pregunta. ¿Por qué habría hecho Hinata aquello? ¿Acaso Hinata gustaba de él? Kageyama era consciente de que Hinata era gay, pero eso no tenía que significar que iba a gustarle cualquier hombre, por lo que nunca creyó que Hinata pudiera estar interesado en él ya que hasta donde él sabía, Hinata lo detestaba casi tanto como él a Hinata. Entonces surgía la pregunta ¿Por qué Hinata había hecho aquello? Y más importante aún... ¿Por qué Kageyama había dejado que lo hiciera?

Y luego, cuando Kageyama por fin se sintió con el valor suficiente para enfrentarlo, el idiota se había ido. Kageyama no pudo encontrarlo en ningún rincón de la casa, y no estaba contestando su maldito celular. Si algo le sucediera al idiota mientras se suponía que debía estarlo cuidando, las cosas podrían resultar terribles para él. La cantidad de dinero que tendría que pagar por incumplimiento del contrato sería más de lo que podría pagar en tres vidas. Así que desesperado, hizo lo único que quedaba por hacer: llamar a Daichi.

Daichi claro que localizó a Hinata enseguida. El imbécil se había ido a casa de Kenma. Kageyama había pensado en esa posibilidad, pero no tenía idea de donde vivía el rubio teñido y ni siquiera tenía su información de contacto.

Daichi regresó con Hinata un par de horas más tarde. Hinata ni siquiera lo había volteado a ver y se encerró en su habitación. Daichi le preguntó si había sucedido algo y Kageyama había tenido que mentir. Daichi por su puesto que no le creyó, pero lo dejó ser.