Lauren Jauregui
Jueves-23:08
Las luces violetas se apagaron, esa fue la señal de que debía bajar del escenario y marcharme.
-¡Wou!, éso fue mágico - escuche la voz de una chica que conocía bien a mis espaldas
Algunos me silvaron y dijeron cosas halagadoras, eso hacía que todo valiera la pena cada noche.
- Qué haces aquí?, deberías estar durmiendo- le dije dándole un cálido abrazo
- Divirias istir dirmindi - se burló imitando mi voz
- Yo no sueno así - le dije ofendida mientras agarraba mis cosas, caminé hacia la barra donde estaba la chica que me pagaba por tocar cada noche, o más bien ella se encargaba de que me pagaran - Hola Clara.
Sonrie - Aquí tienes- me da un pequeño fajo de dinero y yo lo guardo en mi mochila negra - Estuviste perfecta, como cada noche.
Sonrei - Gracias, te veo mañana.
- ¿No te quedarás un rato?- preguntó extrañada ya que siempre me quedo un rato más
Negué - Debo asegurarme de que esta niña llegue a clases mañana para que no diga que soy una mala influencia - expliqué señalando con la cabeza a la linda chica parada junto a mí, ignore su mirada ofendida
Ríe por lo bajo- Nos vemos entonces.
Asenti con la cabeza y me dirigí a la salida y fui por mi moto negra, ella no dijo una palabra y se subió, en menos de quince minutos llegamos a nuestro apartamento. Estacione la moto en la entrada y luego entramos.
Me extrañó que estuviera tan callada en todo el camino, pero luego entendí todo cuando sus manos me agarraron de la cintura y me presiono contra la pared.
Enarque una ceja
- A esta niña no le importaría ser mal influenciada - canturreo coqueta muy serca de mi rostro - menos si eres tu..- agregó y comenzó a dejar besos húmedos en mi mandíbula hasta mi cuello y clavícula
Suelto un pequeño suspiro, admito que estaba algo cansada, pero no tanto como para negarme a ella.
- Magdalena..- advertí y pude sentir su sonrisa en mi piel
- Si, amor?- pregunto en un todo dulce e inocente
- La mal influenciada soy yo- aclaré y ella ríe un poco, sus ojos miel fijan los míos - Sabes que esto podría complicar las cosas...
- Shh- me interrumpió con un dedo en mis labios - arruinaras el momento
Sonrei - No digas que no te lo advertí.
Ella vuelve a besar mi cuello ignorandome por completo pero de una manera más exquisita la cual no pude evitar reaccionar. Desabotone su camisa blanca y descubrí que no usaba sostén, le sonreí malvada y la besé con ansias a la vez que mis manos tocaban sus senos. Ahora ella era la que estaba contra la pared y mis ganas de apagar este fuego dentro de mi.
- Vamos al sofá..
No tuvo que decirlo dos veces, la tomé de los muslos y luego de que enredara sus piernas en mi cadera me dirigí a la sala donde yace el sofá marrón.
- Lauren, amor, despierta.- unos cálidos besos en mi rostro me despiertan lentamente
Gruño - Te dije que dejes de llamarme así...- dije con voz ronca aún con los ojos cerrados
- Mientras estemos en esta casa, te diré cómo quiera..- aclaró más seria
- El desayuno ya está listo, levántate ¿quieres?Segundos después escuché la puerta de mi cuarto ser azotada. Creo que se enojó
A esto me refería anoche...
Abri mis ojos y me senté en la cama, miré a mi alrededor y todo estaba iluminado por el radiante sol que entraba por mi ventana .
Estire mis brazos y luego me levante y fui al baño, luego de hacer mis necesidades me duche y me cambié, al bajar e ir a la sala veo a Magdalena desayunando una taza de café muy seriamente, aunque admito que se ve graciosa así.
- Buenos días para ti también - dije al sentarme frente a ella
Ella le da un sorbo a su taza, con ese movimiento suave y delicado. Sus ojos miel estudian el pastel de frutas como si fuera lo más importante ahora, su rostro se mantenía serio aunque sé que por dentro se moría por expresar su molestia.
- No digas que no te lo advertí - le recordé repitiendo mis palabras y finalmente ella me mira
- No estoy molesta por lo que has dicho- aclaró y la mire intrigada
- Es solo que...- lo piensa un momento y luego niega para ella misma
- olvídalo.- No, dime, después de todo somos amigas ¿no?- insistí entrelazando mis manos sobre la mesa
Ella no muy convencida, acepta
Suspira- Es que... creo que eh comenzado a sentir.. cosas- admitió algo avergonzada y frustrada
- Cosa que no deveria pasar ya que sé que no es ni será recíproco. - agregóLa mire con mis cejas alzadas y formando una "o" con mi boca, es que si me había tomado por sorpresa la Magdalena.
- En fin..- dijo al ver que no dije una palabra - No es importante- mintió
- Iré a clases, te veo en la noche- dijo con prisa y luego me da un beso en la frente y junto con su mochila se va azotando la puerta.Solté un suspiro que no sabía que retenia.
Las cosas que uno se entera...
Después del desayuno hice un poco de aseo y luego llamé a Julia para decirle que preparé a Uma ya que pasaría por ella en una hora.
Después de preparar algunas cosas, salí y me fui en mi moto, en menos de 20 minutos ya estaba frente a la casa de mi hermanita. Estacione la moto y fui a la entrada, después de tocar dos veces; una linda niña de tes blanca, cabello negro y ondulado de ojos esmeraldas me dio la bienvenida.
Sonreí
-¡Hermana, viniste!- dijo con emoción y segundos después me abrazó
- Jamás te desepcionaria, mi pequeña atraviesa. ¿Lista para ir al parque por un helado?
-¡Sii!, estoy listísima
- Alguien está muy emocionada hoy- dijo Julia apareciendo de repente
- Hola Lauren, ¿cómo estas?- Hola Julia, bien gracias.
- Si porque la chica de las palomitas vendrá con nosotras- dijo emocionada tomando mi mano
-¿Chica de las palomitas?
- Oh, es una amiga, no te
preocupes. - le explique sabiendo como es- Bien, que se diviertan entonces - le deja un cálido beso en sus mejillas rosadas - Y no duden en llamar si algo pasa, ¿si?
- No vemos, Julia.
Junto con Uma, caminamos hacia el parque que nos quedaba a unas tres calles y mientras eso pasaba ella no paraba de dar pequeños saltos de emoción y alegría. Sin ella, no sabría qué hacer con mi vida, ella era la única razón de levantarme cada día e intentarlo de nuevo.
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Sempiterno [camren] (Re-subiendo)
FanfictionNo, claro que no fue coincidencia toparme con ella aquella noche y claro que no lo fue que pasara muchas otras veces más porque, aunque no quisiera admitirlo al principio; ella era ... Parte de mí, y yo de ella. - Necesitas que te ayude? - No necesi...