Secrets: I Don't Wanna Fall Away || Lumity - Lumelia •Omegavers•

Capítulo 13: Verde

Capítulo 13.

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«𝐈𝐬𝐥𝐞 𝐎𝐟 𝐅𝐥𝐢𝐠𝐭𝐡𝐥𝐞𝐬𝐬 𝐁𝐢𝐫𝐝𝐬»

||Al carajo las penas||

Un suspiro pesado sale de lo más profundo de sus pulmones en cuanto decide ir a buscar a la enigma y ya cuándo la ubica va hacía ella.

Se queda parada frente a ella, la morena no la ve, de hecho esta viendo el suelo sin mucho interés y eso la hace entristecer.

—¿Me puedo sentar a tu lado?— pregunta, y la Noceda rueda los ojos.

—¿Estuviste sentada ya antes conmigo esta noche?— Amelia asiente y entonces toma asiento a tu lado.

—Lo siento— dice sin más, haciendo que la mayor la vea de reojo.

—¿Que sientes?— anarcando una ceja, va hacía adelante inclinando su espalda, colocando sus brazos sobre sus piernas y agachando la cabeza.

—Lo que te hice hace cinco años— ella nota como la dominicana se sobresalta un poco.

—¿Aún sigues con eso? Dios, pensé que ya lo habías olvidado— da un suspiro y vuelve a recostarse. —Es cosa del pasado Blight, solo olvídalo. Así como yo lo olvidé— la morena dice, casi cerca de un gruñido.

—Yo no creó que sea cosa del pasado— Sus ojos dorados la ven, ella mantiene los ojos cerrados. —Parece afectarte— una risa sarcástica y seca se escucha de parte de Lucia.

—¿Afectarme? ¿A mi?— la Blight asiente. —No digas estupideces Blight, esa mierda ya no me afecta. La verdad nunca le tomé mucha importancia, lo único que lastimaste fue mi orgullo ¿Enserio te metiste con una Thomas?— sigue riendo y esto causa cierta vergüenza en la Blight.

Y es que sí, los Thomas siempre fueron considerados de rango bajo, tanto omegas como betas y en especial alfas; no eran el tipo de personas con las que la gente les gustaría relacionarse, no por ser peligrosos, si no por ser increíblemente inútiles en todo lo que hacían, en especial sus aromas y feromonas, simplemente débiles.

—¿Te imaginas si tus padres se hubieran enterado? ¡Dios una reputación arruinada!— ríe y ríe, olvidó por unos cuantos segundos el hecho de la situación en que está su hermana.

Eso hasta que siente el aroma a algodón de azúcar algo cerca, sus instintos se agudizan, y un cosquilleo recorre su cuerpo completo.

—¿Tu hermana menor está aquí?— pregunta dejándo el anterior tema completamente en el pasado, Amelia hace lo mismo.

—Si eso creó, mamá me llamó y dijo que Edric traería a Amity conmigo— esconde sus manos entre las mangas de su sudadera y Lucia sabe lo que significa.

—Tus padres no saben que estás aquí ¿Verdad?— entre cerro los ojos y la vio fijamente.

El moca estaba mezclándose con la miel.

—Eh no, no sabe ni siquiera lo que paso con Luz... ni siquiera les importa— la Noceda se encoge de hombros y la sigue viendo.

El contacto visual entre ambas se nota interrumpido cuándo Amity llega corriendo a abrazar a su hermana mayor.

—¡Ames!— grita con algo parecido a la emoción. —¿Como esta Luz?— la sigma se tensa ante esa pregunta y abraza con un poco de fuerza a la menor.

—Bueno ella...— algo que siempre le ah sido difícil de explicar son las situaciones trágicas.

El silencio de Amelia hace que la Blight menor se sienta aterrorizada; piensa que Luz pudo haber muerta y aunque este cerca de eso, aún no ah pasado.

—Verás Ammy, ella- — se ve interrumpida por la mayor, que se nota algo irritada por el hecho de que la peli-verde no dice nada.

—Esta en una situación de vida o muerte— ve a la peli-lila aferrarse a su hermana. —Sigue en cirugía, lleva ahí dentro una hora y media posiblemente— explica para luego pellizcar el puente de su nariz con sus dedos y cerrando los ojos.

—Ow, no puedo creer que haya pasado todo eso, siento mucho no haber hecho algo por ella— se disculpa pero la Noceda niega con la cabeza.

—No te disculpes, — dice abriendo sus ojos y viéndola a ella; tan parecida a la Amelia de quince años, solo que con el cabello lila. —no fue tu culpa, fue la mía. Tu no hubieras podido hacer nada por ella, quizás si te hubieras quedado hubieras muerto y una muerte es lo que menos queremos ahora— los dorados de la menor ven a sus moca, hay algo que recorre su cuerpo.

Se forma un corto silencio que fue interrumpido por una llamada al celular de Amelia, vio quién la llamaba y se separó de Amity para levantarse.

—¿Puedes cuidarla mientras atiendo esta llamada?— pregunta hacía Lucia quien enseguida asiente. —Gracias— contesta y se va de ahí.

—¿Cree que se pueda salvar?— ve a la mayor que mantiene su mirada fija sobre ella.

—Posiblemente sí. Si Noah pudo salvarse, ella también, hay que mantener la calma, no hay que alterarnos... no ah aún— Amity asiente de acuerdo y se sienta donde anteriormente estaba su hermana.

—¿Quién es Noah?— anarcando una ceja, entrelaza sus propias manos y se recuesta en la silla, a diferencia de Lucia con las piernas cerradas.

—El mejor amigo de Luz. Seguramente llegó después de que tu te fuiste— truena los huesos de su cuello y suelta un bostezo.

Sucesivamente la menor también bosteza; eso le da algo de ternura a la sigma.

—¿Tienes sueño?— Amity asiente. —Ven— la llama. —Te abrazo si quieres— en el rostro de la omega se forma una sonrisa y se apega a ella.

Lucia pasa su brazo derecho por sus hombros y la acerca más a ella, haciéndo que recueste su cabeza en uno de sus lados.

Poco a poco la menor se queda dormida. Unos quince minutos después ve como Amelia regresa; la forma en camina hace que algo se ponga duro en su entre pierna, bueno talvez estaba duro desde antes, no sabe porque aún con el pasar de los años, la Blight mayor aún la sigue calentando con uno de sus simples movimientos.

—¿Quién era?— dice ignorando el hecho de lo que se encuentra en su entrepierna.

—Nadie interesante. Solo algo de la universidad— responde, pero no convence del todo a Lucia.

Cuando sus ojos se conectan con los dorados de su contraria, solo nota algo en ellos, algo que no le da muy buena espina.

Pero intenta ignorarlo lo más que podía, aún se sentía bastante verde.

Verde: Intrigado, detallado.

Pa' que no me pregunten después.

Luego hago un libro explicando lo que significan los sentimientos ¿Okay?

Soy una máquina de escribir jajsjajdkajd

Bueno sin nada más que decir, nos leemos luego...

Con amor: Alexander Bourbaki

21/08/22