Destino - (TN y Taehyung)

Capitulo 1

Estuve ahorrando para este concierto durante meses. Con mi prima hemos intentado convencer a su hermano para que nos dejará usar su tarjeta de crédito y así poder comprar las entradas. No ha sido fácil, pero lo hemos conseguido a cambio de servirle hasta el que año finalice.
    Bajamos del taxi junto a Yaz. Aquí estábamos, frente a la enorme entrada del estadio. Luego de hacer la fila por algunas horas, entregamos nuestros tickets. Había soñado con este momento por tantos meses. Estar en primera fila. El estadio completamente lleno. Gritos. Luces.
    Las pantallas enormes, sobre el escenario, se iluminaban con las palabras "BTS in concert - Buenos Aires". La emoción y adrenalina recorría todo mi cuerpo. No fui consciente de cuánto tiempo transcurrió. De repente todo se oscureció. Los gritos aumentaron. Las pantallas dejaron de tener la frase "BTS in concert – Buenos Aires" y ahora eran blancas. Las luces de colores se movían de un lado a otro. Los tambores y platillos sonaban dando paso a la introducción de ON. Nuevamente todo se oscureció y solo los gritos resonaban en el estadio. Las luces de los flashes de los teléfonos y las Army Bombs, se agitaban con fuerza entre el público. De pronto, volvió la luz con más fuerza que nunca y los miembros de BTS habían aparecido en el escenario.
    Ya habían cantado 5 canciones. Hasta entonces no se habían acercado a nosotras. Estaban demasiado lejos. Comenzó a sonar Best of me y Jimin fue el primero en caminar hacia donde nos encontrábamos. Sonrió alegre al ver todas las personas que nos encontrábamos en primera fila. Le siguieron Jungkook, Jin y Namjoon. Saltaban al ritmo de la canción mientras cantaban y saludaban con sus manos a sus fans. La parte de Taehyung se acercaba y él comenzó a acercarse poco a poco. Pellizqué a mi prima de la emoción al verlo caminar hacia nosotras. Al parecer ella estaba igual de ilusionada, ya que no se quejó en lo absoluto. Sus ojos seguían los pasos de su bias Namjoon. Los gritos se silenciaron para mis oídos cuando comencé a escuchar la voz de Taehyung. Se sentó en el borde del escenario, justo frente a mí. Con sus ojos recorría a las personas que estaban detrás, a lo lejos. Observaba con atención cada rostro. Hasta que de pronto sus ojos se encontraron con la cámara de mi celular. Mi mano tembló por un momento y decidí arriesgarme a hacer contacto visual con él. Bajé mi teléfono rápidamente y clave mis ojos en los suyos. Trate de mantener una sonrisa que no se deformara por los nervios que sentía en ese momento. Por unos segundos eso se convirtió en una batalla de miradas. Sus ojos no querían apartarse de los míos, como si fuera a perder si lo hacía. Sonrió de lado y me guiñó antes de levantarse y alejarse dándome la espalda. Solté el aire que había guardado todos esos segundos. Mi corazón dejó de latir rápido para volver a su ritmo natural. No podía creer lo que acababa de pasar.
    El concierto estaba llegando a su final. Taehyung se había acercado más de cuatro veces al borde del escenario. Habíamos cruzado miradas cada vez que él venía hacía aquí. Su sonrisa dejaba ver sus nervios pero también su lado seductor. Él sabía lo que hacía y lo que conseguía. No me creía especial por aquel acto. Casi siempre actúa de forma coqueta con las army en sus conciertos. Supongo que eso era algo normal y tal vez jamás volveríamos a vernos.
    La última canción comenzó a sonar. Mientras cantaban corrían de un rincón al otro dándole gracias a sus fans por haberlos acompañado durante toda la noche. Namjoon y Jungkook fueron los primeros en acercarse a la primera fila y nos saludaron cruzando miradas con mi prima y conmigo. Agitaron sus manos alegres y sonreían de oreja a oreja. Taehyung apareció detrás de ellos. Bajó del escenario en un salto. El staff corrió detrás de él. Levantó un peluche y un ramo de flores que estaban en el piso. Corrió de una esquina a otra chocando su mano con algunas armys. Se detuvo frente a mí por un segundo. Volvimos a conectar y sonrió amablemente. Extendí mi mano formando la mitad de un corazón y sin dudarlo, él lo completó. Apenas pude sentir el contacto con su piel. Dio media vuelta y subió nuevamente al escenario.
    Se despidieron y los gritos volvieron a aumentar. Las luces del escenario se apagaron por completo, solo las pantallas quedaron iluminadas, de nuevo con aquella frase. Caminamos en fila hasta salir del estadio. Aún intentaba digerir todo lo que había pasado aquella noche. Deseaba ir a acostarme y volver a recordar cada momento. Cada mirada. Incluso aquel pequeño contacto con su piel.