Hasta El Último Aliento

Parte 8

El invierno está a punto de hacerse notar en Austria, hace frío y casi todos los días está lloviendo. El invierno es mi época favorita del año. Cuando estaba en Londres, me iba con mamá a la montaña cada fin de semana que sabíamos que había nevado y luego íbamos a la casa de mis abuelos a pasar el día y tomar chocolate caliente al lado de la chimenea mientras me contaban historias de mamá cuando era joven.

Ahora que estamos en Austria tendré que cambiar mis tradiciones invernales y hacer otras nuevas. Escuché que los lagos se congelaban y me apetecía patinar en ellos. Patinar sobre un lago congelado era uno de mis sueños y esperaba poder cumplirlo.

-Irina: ¿Y por qué habéis venido a Austria?

-Lando: Max nos invitó a pasar aquí un tiempo

Estaba en una cafetería con Lando, en la que hacia unos días habíamos visto a Max con una chica y a mi madre con Horner. Desde ese día Lando y yo hemos hablado y decidimos ir a tomar café y conocernos algo más

-Lando: También quiere que pasemos aquí Navidad pero no se si será posible

-Irina: Querrás pasarla con tu familia supongo

-Lando: Si, quiero ir a Bristol en las fiestas

-Irina: Eres británico, ya decía que tu acento era de un chico de pueblo británico y no me he equivocado

-Lando: Que observadora, tu también eres británica ¿no?

-Irina: Si, de Londres pero me mudé aquí con mi madre por su trabajo en Red Bull

-Lando: ¿Y tu padre?

-Irina: No llegué a conocerlo, el abandonó a mi madre antes de que yo naciera

-Lando: Tu madre es muy valiente...- yo le asentí.- ¿Te contó lo de Horner?

-Irina: No hemos sacado el tema en estos días ¿Y a ti Max te ha dicho algo?

-Lando: Absolutamente nada, seguro que sabrá Daniel más que yo

Estuvimos hablando un rato más y conociéndonos más. Lando era muy divertido, tenía dos años menos que yo y parecía que tuviese en algunos momentos diez años menos. Era entretenido pasar el rato con él y me contó algunas cosas sobre eso de la Fórmula 1.

-Lando: Tengo que irme a hacer unos recados

-Irina: Claro, no te preocupes. Yo me quedaré aquí un rato más

Lando salió de la cafetería y yo me quedé un rato más tomando otro café y mirando el movil. No tenía nada que hacer, mamá estaba trabajando y yo simplemente quería hacer otra cosa que no fuera estar en casa

De pronto sentí como una mano cogía la mía y me sacaba corriendo de aquella cafetería.

-Max: Vamos...vas muy lenta...

-Irina: ¿Puedes soltarme? ¿Y podemos no correr?.- El chico no me escuchaba.- ¡¡Max!!.- Mi grito hizo que se parara en seco y yo chocara con él

-Max: ¿Qué?

-Irina: ¿A que se debe tanta prisa?

-Max: Va a llover y no traes ni paraguas ni coche

-Irina: ¿Y no crees que estaba bien dentro de la cafetería?.- el nego con la cabeza y siguió llevándome de la mano a toda prisa.- ¡¡Max para!!

-Max: Sube al coche

Estabamos en frente de su Jeep. Me subí como el mandó y seguidamente se subió él, arrancó y empezó a conducir.