Hasta El Último Aliento

Parte 9

Cuando era pequeña, tenía una carpeta llena de ideas para mi boda de en sueño. Iba a ser en la iglesia donde mis abuelos maternos se casaron y en una casa de campo grande pero toda la decoración y las mesas estarían en el patio de la casa. No seria muy grande, somo vendría mi familia materna y amigos y por parte del novio si familia y amigos. Pero todo eso se fue de mi cabeza cuando me dijeron que tenía leucemia.

Durante un tiempo estuve en un psicólogo. La idea de morir me aterraba y no conseguía vivir en paz por lo que mamá decidió apuntarme al psicólogo. Me ayudó bastante pero hay cosas que aún sigo sin asimilar que no pasaran como probablemente sea casarme

-Mica: ¿Cómo te has sentido esta semana?

Mica es mi psicóloga aquí en Austria, más bien es la psicóloga que tienen en Red Bull y me han dejado que me atienda una vez a la semana, todos los lunes. Es una chica de unos treinta y cinco años y mexicana, pelo rubio corto y ojos marron claro

-Irina: Bien, he tachado cosas de una lista de sueños que tengo para antes de morir

-Mica: Eso está genial ¿Y qué has cumplido si puedo saberlo?

-Irina: Bueno...creo que no estaría buen decirlo

-Mica: Bien, no importa. Dime, ¿Podría ver esa lista?

Le di mi móvil con la lista de todos mis sueños.

-Mica: Hasta el último aliento...es buen nombre...- yo asentí.- Sueño número quince: que nadie se enamore de mi...¿Y este sueño? Algo raro ¿no?

-Irina: Es que...no quiero enamorarme ni que nadie se enamore de mi...

-Mica: Irina, el amor es algo que no puedes evitar, cuando llega ha llegado

-Irina: Pero puedo hacerme la dura y hacer como si nada

-Mica: Eso pensamos muchos cuando nos enamoramos pero el amor nos hace más débiles y no podemos controlarlo

-Irina: No quiero que me pillen cariño porque no quiero que nadie sufra cuando yo me vaya...

-Mica: El sufrimiento es una etapa más de la vida. Irina, no te impidas amar o que te amen, disfruta de esa sensación porque es hermosa. Ábrete al mundo y deja que te quieran y te cuiden

De pronto una alarma en el movil sonó. Eso indicaba que la cita había acabado y tenía que irme ya

-Irina: Gracias por la hora de hoy

-Mica: No hay por qué dar las gracias y estoy aquí si necesitas hablar algo antes de la próxima cita

Sali de su despacho que s encontraba en las instalaciones de Red Bull. Cuando salí, fui en busca de mamá pero la vi concentrada en su trabajo y nnquise molestarla. Segui mi camino hacia fuera del edificio para coger mi coche y volver a casa

-Max: ¡Irina!

-Irina: Max...

-Daniel: ¡¡Daniel!!

-Max: ¿Te vas o vienes?

-Irina: Me voy...¿Y vosotros?

-Daniel: Venimos a jugar un poco con el simulador

-Max: Nos aburrimos y como algunos del resto del grupo se han ido hemos querido a pasar la mañana

-Irina: ¿Quién se ha quedado?

-Daniel: Lando y Carlos. Bueno voy a ir entrando

-Max: Ayer me dejaste con las ganas de leer tu lista de sueños