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Capítulo OO9: Let's be what we are

Sana soltó un fuerte gemido dando paso a leves hormigueos por todo su cuerpo, todo había sido demasiado rápido e intenso, no aguantaba los muslos los cuales temblaban como si fueran gelatina, Tzuyu la miró y sonrió, hizo un buen trabajo y fue premiada con los suaves y dulces sonidos de la castaña.

Se sentó a su lado y sonrió un poco, hace ya bastante tiempo que estaba pensando en la posiblidad de decirle lo que sentía por ella, no era solo sexo lo que tenían, existía una conexión entre ellas muy distinta a la que ha tenido con muchas personas y eso despierta la curiosidad.

Tiene miles de preguntas que hacerle pero se mantiene en silencio, no quiere incomodar a la única chica que ha estado con ella por más de tres meses, no es que no es estable es que cada que creía que conseguía a alguien estaba equivocada, porque esa persona no la veía con los mismos ojos.

En cambio Sana si lo hacía, porque le sonría y la trataba como nunca nadie antes lo hizo, así que todo iba bien entre ambas solo que una pregunta que de seguro haría que todas sus esperanzas se fueran al caño era lo que la estaba atormentando, no podía estar tranquila si no lo sabía, demasiado agobiante.

"Sana...". La nombrada la miró de reojo y sonrió un poco, le parecía muy adorable cuando la miraba de esa manera, con esos ojos saltones y brillantes, si, Chou tenía la suya, acababa de hacerle llegar a un orgasmo intenso y luego se comportaba como una pequeña bebé indefensa, quería cuidarla y hacer todo lo que quisiera, hasta donde había llegado por una chica que acaban de conocer.

"Tzuyu...". Imitó el mismo tono, un tanto tembloroso pero serio, cosa que la extraño porque la mayoría de las veces utilizaba un tono neutro, bastante tranquilo al punto de hacer que suspirara de lo lindo que se escuchaba.

Buscaba un gesto o algo que la hiciera saber, antes de que sucediera, lo que estaba pasando pero no fue así, permanecía con la misma mirada, apretó un poco los labios y sintió que probablemente se trataba de algo bastante serio como para estar así, eso le dio bastante miedo porque por la experiencia que tiene cuando le hablan así es porque algo está mal, hay que solucionarlo o peor aún hay que acabarlo.

"He estado pensando desde hace demasiado tiempo esto". No exageraba, desde el comienzo quería darle un nombre a lo que tenían, miles de opciones llegaron a su cabeza pero no sé decidió por ninguno. "Se que es una pregunta demasiado difícil pero a la vez sencilla de responder si es que sabes lo que quieres y eres directa". El corazón de Minatozaki latía con fuerza, estaba bastante asustada porque no sabía que era lo que iba a preguntar pero no tenía demasiado curiosidad.

"Entiendo...". Se mordió el labio y con todo el cuidado del mundo se acomodó para quedar frente a frente, sentía que así estaba mejor, no podría escaparse de la pregunta ni de la respuesta, ambas desnudas, sudadas y rojas, frente a la otra en medio de una situación que no tenía nada que ver con como estaban.

"¿Que es lo que somos?". La japonesa se quedó en silencio, buscando una respuesta clara para lo que acaban de escuchar pero es que ella tampoco sabía que eran, posiblemente amigas pero las amigas no hacían lo que ellas hacen, no se podían considerar novias porque era demasiado pronto para todo, tal vez chicas que se atraen mutuamente pero si llega a decir algo así sonará como un pequeño rechazo, como si no quisiera que ocurriera algo más.

Con la mano un tanto temblorosa acaricia la cintura de Tzuyu, ésta sonrió pero parecía no rendirse tan fácil como ella esperaba, seguía viéndola, estaba buscando una respuesta y la iba a conseguir, era demasiado perseverante, ahora Sana estaba comenzando a darse cuenta que no le agradaba mucho que lo fuera.

"No quiero obligarte a que me contestes ahora pero...me gustaría saber para actuar como debe ser, no quiero que luego hayan malos entendidos porque ninguna de las dos o por lo menos por mi parte no está segura...de lo que somos". A Sana no le gustaba ponerse etiquetas, definitivamente con ella no iba eso, sin embargo, tenía que comenzar a pensar un poco más en Chou ya que ésta parecía estar un tanto confundida por todo lo que estaba pasando.

Eran conscientes de que las cosas escalaron demasiado rápido y ahora no pueden quitarse las manos de encima, aún así, siente que debería pensar con claridad para darle una respuesta certera pero por como se estaba comportando parecía que la quería ahora, cosa que la estreso un poco.

No tenía ni la menor idea lo que debía hacer hasta que se dio cuenta de algo, ella había hablado con Mina de ese tema y llegó a pensar en algo que era la respuesta correcta si llegaba a preguntarse algo o qué Tzuyu le preguntará algo.

"Seamos lo que somos, dos personas con encuentros sexuales casuales, que se gustan y pueden llegar a ser algo más". Contestó viéndola a los ojos, esa respuesta la hacía quedarse en un punto medio, no le dijo que se estaba enamorando pero tampoco le dijo que no quería nada más que no fuera sexo, estaba segura que eso sería suficiente.

Tzuyu sonrió un poco al escuchar esa respuesta porque aunque no fue tan directa como quería, era más o menos lo que estaba esperando porque estaba comenzando a conocer a Sana y sabía que diría algo parecido. "Me parece perfecto". Se acercó para darle un casto beso en los labios. "Quiero dejar bien en claro que te cuidare hasta que te vayas de mi lado". Era algo de lo que no quería pensar pero sabía muy bien que cabía la mínima posibilidad de alejarse por lo que sea.

Lo que en verdad le daba mucho miedo después de decir lo que dijo es que si llegaba a pasar algo por los problemas que tiene en Japón tendrá que volver a mudarse, tendrá que dejar a la chica que le gusta atrás.