Luna y Marca

Amerville 12

Dimitri estaba con unos pantalones negros y musculosa blanca, se veía relajado y volvía a poner esa sonrisa que me incomodaba.
Me puse en posición para recibir golpes o atacar, definitivamente no tengo ganas de volver al piso.

_ Vamos Nat, no seré tan rudo como mi padre_

Supongo que fue él quien nos estaba mirando ayer, tenía razón no tenía porque estar tan a la defensiva, me relajé y lo observé para que me indicara que tenía que hacer.

_ Supongo que no te desagrado cómo a tú padre_

Agregué al final, sabiendo que sus intenciones eran otras y mostró una sonrisa ladiada.

_ Es entendible su posición, parce que te interesa su hijo y se trata del próximo líder del clan de los Deker_

_ Querrás decir que su hijo el próximo líder del clan de los Deker se fijó en mí_

Aclare y su sonrisa solo se amplio.

_ ¿Cincuenta, cincuenta?_

Sonreí y me acerqué a él, bastante relajada, cuando estuve lo suficiente cerca le lance un golpe y lo esquivo de inmediato.
Odió sus tonterías me ponen nerviosa, se alejó y recuperó la sonrisa.

_ Lo tomaré como un si_ decretó y se puso en posición de defensa.

Un golpe tras otro y Dimitri los esquivo a todos, hasta que decidió comenzar a moverse y en vez de lanzarme al piso me desarmaba sujetándome contra su cuerpo, prefiero que sea rudo como su padre definitivamente.

Entre conocer el piso y su cuerpo, prefería el piso, un golpe mal dado me lleva a terminar sujetada contra su pecho casi siempre, aunque me liberaba cuando lo deseaba.
Traté de alejarme cuando sentí que lo tenía detrás y me regreso contra su pecho mientras me inmovilizaba, habló a mi oído.

_ Tienes que saber defenderte para saber si tienes una oportunidad de atacar primero. Incluso, deberías saber cuándo huir de tú oponente porque sabes que no tienes ninguna oportunidad_

Creo que está disfrutando más que nadie mi incomodidad, no es como si tuviera nervios de acero, hace rato que no deja de tocarme y apoyar su cuerpo contra el mío.

Después de un momento me dejó ir, parecía que estaba dispuesto a seguir si yo lo deseaba, pero no hice nada. Ya me quedó claro que no voy a ganarle de esta manera, se dió cuenta que estaba dispuesta a escuchar después de todo, solo quería hacer que dejara de decir tonterías pero terminó haciendo tonterías.

_ Empezaremos entonces, el calentamiento ya terminó_

Estoy caliente de muchas maneras, incluso molesta con su arrogancia.
Después de eso las cosas fueron en serio y sus explicaciones eran mejor que las de su padre, que eran completamente nulas.

Al fin podía defenderme y empecé a leer mejor sus movimientos o eso creía hasta que su emoción aumentó y fue más rápido que yo volviendo a evitar que me moviera mientras me encerraba contra la pared. Él apenas estaba agotado pero yo ya estaba exhausta.

Se inclinó hacía adelante, su mirada estaba en mi boca, parecía dudar de sus próxima acciones y recupero la seriedad en su rostro, mientras volvía a alejarse.

_ Tú hermana se ofreció a tomar misiones con Nicolás_ dijo rindiendose con sus deseos.

Eso me tomo por sorpresa, me sorprendió y en el fondo me molestó porque me preocupé.

_ ¿No dijo tú padre que era peligroso?_

_ Lo es, creo que Carol solo quiere ayudar a evitar que alguien más salga herido_