Cásate conmigo

811 46 5
                                    

Por fin he logrado concluir mi 2do año de estudios en la universidad, en pocos días comienzo el tercero y aunque sé ahora es cuándo todo comienza a complicarse otra vez, estoy bastante motivada en seguir adelante, ha pasado también 2 años desde que Regina y yo volvimos, en general puedo decirte que todo va bien pero últimamente la he estado notando algo extraña, quizás distraída por momentos y un poco distante debido a tantas ocupaciones en el trabajo, sé que trata de disimular que no está pasando nada pero es evidente que si, he tratado de hablar con ella respecto al tema y lo único que ha logrado decirme es que se trata de ciertas cosas que debe resolver en el trabajo, la realidad es que estoy bastante tranquila respecto al tema pero a veces es inevitable no preocuparme de más al ver cómo en ocasiones suele recibir diversos mensajes de texto o llamadas telefónicas, las cuáles suele responder en privado con el pretexto de no querer interrumpir lo que sea que estemos haciendo... Raro... ¿Cierto?

Quizás si fuera cualquier otra persona pensaría que me está siendo infiel con alguien más pero tratándose de Regina puedo asegurarte que no existe alguien más fiel y leal que ella así que lo único que llega a preocuparme por ahora es que realmente pueda estar teniendo algún tipo de problema grave en el trabajo sobre el cuál prefiere no hablar mucho al respecto, pero bueno, fuera de eso supongo todo se encuentra bien entre nosotras dos.

Regina llevaba semanas bastante ocupada con sus asuntos del trabajo que cuándo por fin tuvo algunos días de descanso me propuso salir a cenar fuera de la ciudad, me dijo que quería compensar aquél tiempo de ausencia entre nosotras dos así que sin pensarlo dos veces decidí aceptar, me pidió que fuera a dicha cita con ropa cómoda y bastante abrigada, no entendía mucho porqué me pedía hacer tal cosa pero decidí obedecer, por fin llegó el día de aquélla cita tan esperada así que por la noche al llegar a casa por mí decidió hablar con mis papás un minuto para avisarles que llegaría un poco tarde a casa, prometió que cuidaría mucho de mí así que una vez que logramos despedirnos de ellos procedimos a irnos rumbó al lugar de nuestra cita, viajamos media hora en carro hasta llegar a lo que parecía ser un ... ¿Aeropuerto?

No entendía que estaba pasando así que una vez que logramos llegar por completo a dicho lugar, Regina me explicó que aún faltaban 2 horas más de viaje para llegar a nuestro destino final por lo cuál para reducir un poco el tiempo iríamos en helicóptero hasta allá, sabía que esto ya no era "tan normal" para una cita común que sinceramente ya no supe que más esperar, aún así opté por no decir nada al respecto para entonces ambas subir a aquél helicóptero que ya se encontraba esperándonos, el viaje hasta dicho lugar fue algo realmente lindo, ver la ciudad de noche en compañía de Regina será siempre uno de mis más grandes recuerdos, ver lo feliz que estaba mientras me mostraba algunas partes de la ciudad enamoró aún más mi corazón, amaba verla feliz... Así que en medio de tantas conversaciones, risas y por supuesto muchas muestras de cariño por parte de las dos, el pilotó del helicóptero nos indicó que comenzaríamos el descenso, fue entonces en ése momento cuándo Regina me pidió permiso para cubrir mis ojos con una venda, me dijo que tenía lista una sorpresa para mí pero debía cubrirme los ojos así que acepté con un sin fin de emociones dentro de mí al sentir aquél descenso, por suerte Regina decidió abrazarme fuertemente mientras esto pasaba así que todo mejoró en cuestión de segundos.

El helicóptero aterrizó así que pronto todo estuvo listo para comenzar a bajar, Regina me ayudó a hacer ésto con mucho cuidado, comenzamos entonces a caminar por dicha zona, el piso del lugar era de tierra o al menos eso era lo que podía percibir, hacía demasiado frío y el viento soplaba fuertemente, ahora entendía porqué Regina me había pedido fuera bastante abrigada a dicha cita, tenía tantas ideas en mi mente de dónde pondríamos encontrarnos que eso simplemente aumentó la emoción que ya sentía, después de haber caminado alrededor de 5 minutos, paramos un segundo así que Regina me avisó que quitaría la venda de mis ojos con sumo cuidado para que éstos comenzarán a adaptarse a la luz del lugar, en realidad fue bastante fácil hacerlo al habernos encontrado al aire libre así que una vez logré hacerlo, vi frente a mí un largó camino empedrado con diversas antorchas iluminando su alrededor, era hermosa la vista que tenía así que con una gran sonrisa Regina me ofreció su mano para comenzar a recorrer juntas dicho sendero, caminamos alrededor de otros 5 minutos cuándo de pronto comenzó a escucharse a lo lejos un fuerte sonido, era cómo si el viento soplará aún más fuerte así que caminando uno poco más, logré ver a lo lejos un enorme globo aerostático comenzar a llenarse de aire caliente, de ahí venía aquél enorme ruido de viento, no podía creer lo que estaba pasando así que pronto quedé sin palabras.

Un Amor Imposible Donde viven las historias. Descúbrelo ahora