Un Amor Imposible

Seamos más que amigas

A la mañana siguiente mis padres me preguntaron cómo me había ido la noche anterior y decidí entonces contarles sólo sobre el concierto para que estuvieran tranquilos, al terminar de desayunar preparé lo que me faltaba y procedí a irme a la escuela con muchas ansias ya que entrando me tocaba taller con Regina y moría de ganas por verla aunque por otro lado era el último día que vería a Verónica en la escuela para después irse de viaje y eso me causaba tristeza.

Al llegar a la escuela pude ver a Abril y platicar un poco con ella sobre cómo le iba en la escuela ya que últimamente ya no nos veíamos, solamente algunos fines de semana y éso a veces, al hablar con ella me contó que todo iba bien y que ya casi se terminaba el castigo que había obtenido por lo que había pasado en la última salida con sus compañeros así que me alegré por ella, hablamos de muchas otras cosas hasta que abrieron la puerta y tuvimos que entrar, nos despedimos entonces y procedí a irme a mi taller a esperar con mis compañeros a que llegará Regina y así entrar al salón, después de haber estado esperando unos minutos unos compañeros nos hicieron saber que Regina estaba subiendo al edificio y procedimos a formarnos para entrar, al verla pudimos notar que venía acompañada de Alejandro y él venía cargando una bocina un poco grande, nadie sabía para que era pero tampoco nadie hizo ninguna pregunta, procedió a abrir la puerta del taller y Alejandro fue a dejar la bocina cerca del escritorio para después retirarse del lugar, a los pocos segundos comenzamos a entrar al salón y al pasar enfrente de Regina la saludé y ella hizo lo mismo.

E - Buenas tardes profesora Regina. - Estaba un poco nerviosa por ver nuevamente a Regina y pasar tiempo con ella en clase que no pude evitar sonreír cómo tonta.

R - Buenas tardes señorita Emma ... ¿Cómo se encuentra usted hoy?

E - Muy bien ahora que puedo verla ... ¿Y usted? - Al terminar de decir esto Regina me sonrió.

E - También muy bien, adelante. - Dijo señalando con la mano el interior del salón.

Al entrar tomamos asiento y Regina comenzó a contarnos el propósito de la bocina que traía consigo.

R - Buenas tardes jóvenes, me da mucho gusto volver a verlos después de tantos días ausente pero todo éso se debe a que los profesores de taller fuimos enviados a un curso en otra escuela con una duración de tres semanas, curso en el cuál tratamos algunos problemas que hemos visto en los talleres y los cuáles intentaremos darle solución durante éste tiempo ... Lo que resta del curso estaremos implementando algunas cosas nuevas en los talleres para beneficio de ustedes y una de ellas será el uso de ésta bocina, los profesores e incluso yo misma en ocasiones hemos notado que ustedes suelen motivarse a trabajar en clase con algo de música y el ambiente es más activo así que hemos decidido que durante las clases ustedes van a tener la posibilidad de poner la música que les guste siempre y cuándo ustedes se esfuerzen en trabajar durante las clases y que sea música apta para todos sin mensajes negativos.

Así que me gustaría escuchar sus opiniones sobre el tema ... ¿Les agrada la idea? ... A quién le parezca buena idea por favor levanté la mano y a quién no con toda confianza puede dar su opinión.

En ése momento todos en el salón levantaron la mano incluyendome a mí ya que era una muy buena idea lo cuál confirmó la propuesta de Regina.

R - Ok, ya que todos están a favor de ésta idea la forma en que ustedes pondrán la música será por medio de sus celulares y cada uno va a ir poniendo la canción que quiera cuándo sea su turno, comenzaremos por la primer fila uno por uno y así hasta llegar a la última y volver a comenzar si es necesario durante las cuatro horas de clase hasta que estas terminen pero eso sólo será posible en los momentos que estén trabajando en la libreta o en la computadora después de haber explicada el tema del día, así que por ahora les voy a pedir que por favor abran su libro en el tema que nos quedamos la última vez que daremos inicio a la clase del día de hoy.