Capitulo 6

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Decir que Levi le había dado a Eren el mejor orgasmo de su vida y viceversa, sería un eufemismo decirlo. Aclararse que Levi, intentó controlar su libido era una mentira. Asegurar que no quería repetirlo era una completa basura que nadie se creería si supieran lo perro que se había mostrado con su mejor amigo.

Joder, Levi no podía recordar la última vez que el sexo había sido tan espectacular. Eran contadas con una mano, las veces que Eren había follado; sinceramente su vida giraba lejos de la satisfacción de sus genitales, a diferencia de Levi. Pero el castaño no podía decir que sus experiencias anteriores hubieran sido malas, lejos de eso, él nunca había quedado con ganas de más después de correrse.

Quizás ese es el problema, pensó mientras apretaba el control de la Play Station.

Estaban en la casa del mayor a punto de echar una partida de Mortal Kombat, y Levi veía el vídeo con su cara de "chico normal" que se le metería en el culo a cualquiera.

Eren ahogó un suspiro y miró los zapatos que habían comprado esa mañana con el pago de su último trabajo. Armin y él impartían clases de Pole Dance y baile de forma particular, y la última clase privada que habían tenido, había sido bastante lucrativo, incluso si lo único que hicieron fue enseñarle a la hija de los Reiss a bailar normalmente en tacones. Su paga había tenido dos ceros de más por lo que Armin no trastabilló en jalarlo al centro comercial a comprar ropa extremadamente costosa, invirtiendo dinero de forma innecesaria sólo porque su amigo era un prestigioso y gozaba de derrochar sus ingresos en ropa de marca.

Para él era estúpido que Armin comprara ropa tan cara, al fin y al cabo nunca le duraba la ropa. Siempre terminaba rompiéndola o perdiéndola en sus encuentros de alguna u otra forma. Como Levi le había roto una camisa una vez en un juego, no podía ni imaginar como Levi había roto la ropa de alguna pareja sexual.

Mierda. Ahí estaba de nuevo. Eren quería saber cuándo había pasado a ser tan consciente de los exclusivos e irrelevantes detalles de Levi-rompe-camas.

¿No es obvio? Desde que dejaste que metiera su polla en ti ayer.

Muy buen punto.

Nuevamente, se quedó tieso. Esperó y esperó, pero otra vez seguía sin sentirse indolente a haber follado con su mejor amigo, como si realmente fuera lo de todos los días.

Quizás lo era. Es decir... los amigos follan todo el tiempo ¿no? Eren no quería excluirse de ningún estereotipo. Si los heteros follaban entre sí y mantenían relaciones abiertas, él podía sentarse en la cara de su añejo -y heterosexual- mejor amigo, Levi. No había porqué sentirse culpable ni esperar tal sensación.

Le echó un vistazo a su amigo que ya había empezado a configurar la partida.

Ellos no habían tocado el tema. No porque alguno lo evadiera, todo lo contrario, era como si ni siquiera recordaran que habían tenido sexo la noche anterior como un par de lunáticos pervertidos. Como si de verdad fuera algo de todos los días, algo normal.

¿Lo era?, ¿De verdad su relación con Levi era tan liberal y espontánea como para hacer de menos esto?, su mejor amigo no lucía preocupado ni tenso en lo absoluto, y era él quién tenía novia, era él quién había iniciado todo. Por razones que Eren anhelaba conocer, Levi no estaba experimentando ningún enloquecimiento gay, aunque la sola idea del pelinegro preocupándose por sexo era ridícula.

Sólo fue sexo. Si Levi no se alteraba mucho menos Eren que era el más beneficiado con esto. Porque lo era. Estaba soltero pero no tenía la fluidez como para ir a un bar o discoteca a buscar un ligue, sus acompañantes solían ser personas conocidas que coincidían en sus calenturas. Era práctico, pero no algo que se diera tan seguido como debería querer. Levi sólo había sido como, como el más exclusivo de todos, y sin dudas el mejor. Una gran polla, experimentado, era generoso para complacerlo aún cuando no se sentía atraído por ese bando, y su forma de tocarlo, *cariñosa pero apasionadamente* era simplemente la receta para el sexo ideal.

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