Ella no conocía la otra faceta de su novio, siempre estuvo cegada ¿por qué desconfiaría de su primer amor?, hasta que llego él a poner su mundo de cabeza.
Adriana; dueña de una de las cadenas de hoteles más reconocidos en todo Europa.
Kenneth, con u...
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Adriana
Enterarme que Katherine manipula a Kenneth no ha hecho más que calentarme la sangre. ¿Por qué no aceptar que ya el no siente lo mismo que tú?, ¿por qué humillarse así?.
No es que quiera que ya deje a Kenneth, pero deja muy por el suelo su imagen como mujer.
No digo que lo que Kenneth y yo hicimos estuvo bien, pero tampoco estuvo mal. Como ya lo he dicho no soy de las personas que se arrepienten de lo hecho.
Estoy en casa, me gusta mi espacio, el silencio y la soledad. Lo único que agradezco es que Alejandro no vivía conmigo. Lo amaba pero sus acciones me hizo recapacitar. Quien te ama no te lastima, Quien te ama no te miente y él... él hizo las dos cosas.
Lo que aún no comprendo es por qué si el y Astrid están esperando un hijo aún no me ha dejado y llegar al extremo de pedir matrimonio.
Cada vez entiendo menos.
Me gusta la soledad pero ahorita mismo no me gusta para nada.
Tomó mi teléfono y le escribo a la persona que necesito en estos momentos.
Tú: ¿Qué haces?
🔌M🔌 Estoy en el bar y ¿tu?
Tú: Estoy aburrida en casa 😕 ¿no deberías estar en casa?🤔
🔌M🔌 ¿quieres salir a comer tacos?🥰 Y no. Ya busque mis cosas😮💨
Tú: Claro que quiero ☺️
🔌M🔌 Te paso a buscar en 15 minutos chica loca 😉
Salgo corriendo hasta mi cuarto para buscar que ponerme y encuentro unos jeans rotos en la rodilla, con un suéter y tenis blancos. Para terminar un bolso color negro y una camisa de cuadros ya que la noche está muy fría.
Termino de arreglarme el pelo y me visto con lo que encontré. Al terminar paso a la cocina por un vaso de agua y escucho el timbre.
Justo a tiempo.
Voy hasta la puerta y al abrir me encuentro con un Alejandro enojado y ¿este que?.
-¿Qué sucede? – pregunta borde. No disimularé mi desagrado.
-Asi recibes a tu futuro esposo – dice de forma burlona. Trata de buscar mis labios y yo volteo la cara – ¿estás enojada princesa? – Si es cínico - ¿para donde vas así vestida? Estas horrenda. Mira se te marcan las lonjas que tienes.
-¿Qué quieres Alejandro?, voy de salida – solo necesito que se vaya de mi casa.
Él solo sonríe de manera cínica, como siempre.
-Saldrás con el ¿verdad? – lo ignoro y trato de cerrarle la puerta pero el impide mi cometido – que zorra eres muñequita – le suelto una bofetada.
