Ella no conocía la otra faceta de su novio, siempre estuvo cegada ¿por qué desconfiaría de su primer amor?, hasta que llego él a poner su mundo de cabeza.
Adriana; dueña de una de las cadenas de hoteles más reconocidos en todo Europa.
Kenneth, con u...
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Adriana
-Claro que si te amo...Te amo mas que ayer y menos que mañana mi vida, no debes de estar pensando esas cosas; sabes que eso le hace daño al pequeño frijol- Solo puedo ponerme a llorar por todo lo que dijo Kenneth. El me abraza, mientras que restriego mi cara en su pecho - vamos amor, creo que fue demasiado por hoy... Además, aún falta la sorpresa que tengo para ti.
Volvemos al auto, no sin antes pagar la cuenta. Elliot va en su sillita para bebes con su carita de cansado, lo mas seguro es que cuando lleguemos a casa caiga rendido.
Vamos llegando a la villa y todo esta en total oscuridad, mi esposo estaciona el auto y primero baja a nuestro hijo para poder venir donde mi y ayudarme a bajar. Esto esta muy extraño...Desde que tengo conocimiento, nunca se había ido la luz en la villa.
Kenneth nos guía hacia la parte trasera de la villa, esta todo muy callado y ya me esta dando miedo esto; le tomo fuerte la mano a Kenneth y el solo me sonríe.
- ¿Por qué sonríes bobo, no ves que esto da un poco de miedo- se acerca y deja un beso sobre mi coronilla para soltar mi mano, tanteo alrededor y solo siento la pequeña mano de mi Elliot -¡KENNETH! ...NO ES GRACIOSO, ¡KENNETH! - lo ultimo que esperaba era esta situación.
-Aquí estoy amor, no te alteres - al momento en que termina de hablar las luces se encienden y esta toda mi familia y amigos en el patio rodeando un gran letrero que dice ¨ ¿TE QUIERES CASAR CONMIGO? ¨ miro donde esta Kenneth y no sé en qué momento quedo al frente de el letrero, pero esta de rodillas con un hermoso anillo - Se que ya estamos casados, pero quiero hacer esto bien. Si hace 8 meses me hubieran dicho que una chica hermosa intentaría asesinarme con su auto, les hubiera respondido que estaban locos. - ruedo los ojos con una sonrisa, porque le encanta recordarme mi irresponsabilidad detrás del volante - si me hubieran dicho que esa isma chica iba a ser mi esposa y madre de mis hijos, estaría en prisión porque los molería a golpes - todos ríen mientras Kenneth continua hablando - Adriana amor de mi vida, eres y serás la única mujer por la cual dejaría todos mis sueños para poder hacerte feliz, por ti iría al mismísimo infierno si fuera necesario; nunca debes olvidar que eres el amor de mi vida...Por eso quiero preguntártelo frente a tu familia y amigos, ¿te casarías con este humilde hombre? - siempre le echare la culpa a este embarazo por tenerme tan hormonal. No tengo palabras para tan linda sorpresa.
-Claro que si amor, si me quiero casar con usted señor Moull - nos fundimos en un beso cargado de tantas emociones, se cuanto amo a este hombre y el sabe cuanto lo hago yo y para mí eso es una de las cosas más importantes en nuestra relación.
- ¡ASCO! - nuestro hijo viene hasta donde nosotras y nos separa - ¡MAMI MIA!
Cargo a Elliott con un poco de dificultad y su padre me lo arrebata en pocas palabras.
Me pego mas a ellos para que Karol pueda tomar la foto segun ella para tener el recuerdo de cuando el cucaracho de Kenneth me pidió matrimonio. Ya cerca le hablo por lo bajo a mi esposo, que ahora es mi prometido.
- Nunca te dejare para que otra tenga lo que es mío. Nadie debe desear lo que por derecho me corresponde.
Todos aplauden cuando Kenneth me pone el anillo en mi dedo anular.
Inspecciono mi alrededor y veo a mis padres los cuales están tan felices, que mama se encuentra llorando en el pecho de mi padre.
Lo que más había deseado era tener una relación como la de ellos y se que con Neth lo he conseguido.
Sigo mirando y veo a Karol junto a Valentino el cual solo sabe poner los ojos en blanco.
Por último, veo donde esta Héctor el cual tiene su mano entrelazada con la de Jaime... Aunque Kenneth casi nunca menciona a su familia, sé que los extraña.
Por eso mi principal tarea al regresar a España es traer a su madre para que este cerca de el y de sus nietos.
......
Semana 33 y cada día que pasa parezco mas una pelota con patas. Hace mas de dos semanas regresamos a España, con Kenneth aun no coordinamos cuando realizaremos la boda, pero quisiera que fuera después de dar a luz a nuestra o nuestro pequeño.
Me encuentro preparando el almuerzo de mi esposo e hijo ya que Neth no demora en venir con Eliot de la guardería, hablamos mucho sobre el tema de dejarlo en la guardería mientras yo estoy de licencia en casa; pero sin mantenerme tan descuidada de los hoteles.
Hasta que llegamos a el acuerdo de que el niño se quedaría solamente en las mañanas y después estaría todo lo que resta del día junto a mí.
Hoy tengo la cita con el doctor Morgan, quien a estado llevando mi embarazo todo este tiempo. Solo espero que esta vez el pequeño poroto se deje ver, tratamos de comprar algunas cosas en color neutro; pero muero por saber ya que será el porotito.
- ¡AMOR! - salgo de mis pensamientos cuando escucho la voz de el padre de mis hijos.
- ¡EN LA COCINA! - escucho las pisadas de Kenneth y más atrás escucho los de mi pequeño bebe - ¿Dónde están los hombres de mi vida? - Eliot corre hasta mí, mientras que su padre lo carga para que yo pueda darle un beso.
- ¿Para mí no hay beso? - pregunta mi esposo, mientras niego con una sonrisa - me duele, me hieres, me lastim... - le corto su drama para darle un pequeño beso - mi madre no crio un perico para que me den piquitos - dice y me besa, aun no comprendo como un beso de el puede dejarme tan excitada.
Se aleja para poder bajar a nuestro hijo que se retuerce en sus brazos ir a ver la televisión.
-En un momento estoy contigo hijo - le dice su padre - entonces, ¿señora Moull en que estábamos? - dice arrinconándome la isla de la cocina mientras trata de besarme, pero lo evito.
Si no lo hago, se que faltaremos a la cita con el doctor y es lo ultimo que quiero.
-Tenemos cita para ver a nuestro frijolito amor - le recuerdo y el hace cara, sabe que no sedere - vamos a arreglarnos cariño - camino hasta donde se encuentra Eliot y lo llevo a su habitación; mientras su padre me sigue los pasos.
Lo primero que hicimos cuando regresamos fue arreglar la maleta que llevaremos el día del parto y me siento un poco tranquila por esa parte.
Escucho que suena mi teléfono y veo que se trata de Karol haciéndome una video llamada descuelgo y los gritos de mi mejor amiga nunca faltan.
-Pequeña ingrata, te olvidaste de tu mejor amiga, solo porque el cucaracho tiene un pene en medio de sus piernas - ruedo los ojos porque sé que comenzará con su drama - yo fui la primera persona en tu vida - si las personas escucharan a esta payasa hace rato la mandarían al psiquiátrico.
- ¿Que necesitas niña?, como vas con mi pedido - mientras hablo con Ka observo como Kenneth le busca la ropa a nuestro hijo.
-Por eso te llamaba mujer - me dice ahora mas seria - quizás, puede ser, que tu suegra este llegando mañana - dice mientras me da una de sus sonrisas tranquilizadoras y yo se la devuelvo - ¿AMOR DONDE ESTAS? - enarco una ceja y ella solo se encoge de hombros - nos vemos Adri... - la ingrata que tengo por mejor amiga me acaba de colgar.
Siento que nos hemos alejado un poco las dos y no es algo que quisiera, Karol a sido mi amiga desde... siempre. Con el pensamiento de que tengo que tomarme un día para salir y hablar con mi mejor amiga me encamino hasta dónde está mi hijo pulcramente vestido con un suéter de dinosaurio y un pantalón a juego.
-Papá hizo un gran trabajo - le digo al pequeño mientras le paso los juguetes y el asiente. Eliot sigue siendo un niño de pocas palabras y nosotros como familia no tenemos problema con eso, ya que la psicóloga dijo que es normal en niños de su edad.
