-Hola. -Saludó en un murmuro lo suficientemente alto como para que apenas pudiera escucharle. Alice dejó de lavar los trastes casi de inmediato y giró medio cuerpo para mirarlo devolverle el saludo.- Hola Innie. -Una cálida sonrisa se asomó en su rostro, el pelinegro avergonzado bajó su cabeza y Alice notó que el chico no traía su uniforme y su cabello estaba húmedo.
- Lamento mucho lo de ésta mañana, no quise ser tan duro. -La pelirroja cerró la llave del agua y secó sus manos con el primer trapo de cocina que encontró.
- Está bien cariño. -Se acercó al chico y dejó una mano suavemente sobre su mejilla. -No te preocupes, sé que no quisiste decir eso. -Las ligeras caricias de Alice enviaron pequeñas corrientes eléctricas que recorrieron el cuerpo del pelinegro.
Antes de que comenzara a sonrojarse rodeó la cintura de la mayor con sus delgados brazos y recargó la cabeza en su pecho. Alice aceptó gustosa el abrazo rodeando los hombros del pequeño con sus brazos.
-Tu cabello está húmedo. -Murmuró.
- Sí, acabo de ducharme. -El chico se alejó lentamente. -Tengo un proyecto de matemáticas por hacer y me asignaron como compañero a Joseph, el chico nuevo de la clase. -Alice notó que Jeongin comenzó a jugar con sus dedos como siempre hacía cuando estaba nervioso.
Esa imágen causó estragos en la mente de la pelirroja. Jeongin apoyado en el marco de la puerta de la cocina, vestido con jeans claros y una simple camiseta blanca un poco holgada, su cabello húmedo pegado a su frente con la mirada en el suelo mientras jugaba nervioso con sus dedos era una imágen tierna y atractiva. Y el corazón de Alice se sacudió ligeramente por ello.
- Olvidé decirles que vendrá después de la hora de la comida para hacer el proyecto. -Miró a su mayor temeroso de recibir algún regaño de su parte por no avisarle antes a su tío y a ella.
- Está bien Innie. -La sonrisa cálida de Alice le hizo relajarse. -Serviré tu comida y después de comer haré algunos bocadillos para ustedes.
El chico asintió frenéticamente, si había algo que Jeongin amaba, definitivamente era la comida de Alice.
Tal y como la pelirroja prometió, después del almuerzo se fue a la cocina a preparar algunos bocadillos dulces y salados para los dos chicos, mientras Jeongin esperaba en la sala a su compañero de estudios que no tardó demasiado en llegar.
Escuchó a los chicos hablar en la sala, tratando de ponerse de acuerdo para iniciar el proyecto, sin embargo, parecía que necesitaban ayuda.
Alice colocó sobre una bandeja de plata dos tazas de té, tomó la bandeja en sus manos y salió de la cocina hacia la sala dispuesta a ayudar a los chicos y de paso, darles algo para beber.
- Chicos, les traigo té ¿Necesitan ayu...? -Su pregunta quedó suspendida en el aire cuando miró al chico sentado a un lado de Jeongin en el suelo frente a la pequeña mesa de café.
Pelirrojo, piel tostada, ojos oscuros, nariz pequeña y labios gruesos ¿Era él?
El estruendo de la bandeja y las tazas rompiéndose en el suelo alertaron a los menores, segundos después, el ruido sordo de un cuerpo que se azotó contra el suelo de madera oscura los hizo correr completamente asustados hacia Alice.
- Profesora Flannagan ¿Está bien?
- Alice, por favor Alice despierta.
Por supuesto que no era él, aunque solo tal vez tenía un ligero parecido, y eso logró que los recuerdos que creyó olvidados arrasaran en su mente como un huracán.
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Hidden Town 'Han Jisung'
Fanfic- Escucha bien, -Suspiró. -Sé que esta ciudad está llena de criminales fugitivos, aun así, no puedes hacer lo que se te venga en gana. Según la ley de Hidden Town, solo existen dos castigos, el exilio y la muerte. -Su rostro serio daba a entender qu...