𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 20

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Me había despedido de Jake Blackwood, regrese al salón de belleza en dónde mí tío y hermana aguardaba por mí.

Cómo era de esperarse mí hermana me grito hasta cansarse, pero lo superó finalmente.

Ella había cambiado su color de cabello, ahora era rubio lo qué hacia qué sus bellos ojos resaltarán demasiado. También su cabello laseo ahora era totalmente ondulado, se veía hermosa, digna princesa vampiro.

Dracelus dijo qué con ese color de cabello se parecía demasiado a Emilia, y no era mentira, se parecía demasiado a ella.

Él tío Dracelus también había cambiado su cabello ya no era largo cómo antes, ahora tenía un corte casi idéntico al de mí papá, se notaba qué mí hermana se había basado en él para qué le hicieran el nuevo corte al tío Dracelus.

Se ve bien, ya no se ve cómo una persona del pasado, ahora solo falta cambiar esa ropa qué el abuelo Vlad le dió en el palacio.

Se ve cómo un anciano con ella, salimos del salón y fuimos directamente hacia una de las mejores tiendas de ropa de la ciudad.

Nos tomó demasiado tiempo elegir algo qué le fuera bien a Dracelus, no lograbamos encontrar su estilo, le hicimos qué se probará demasiada ropa, pero aún así no nos convencía.

Pronto los minutos se volvieron una hora completa, me estaba comenzando a cansar.

—Ya puedes salir, déjanos ver — Le dice mí hermana mientras ambos estábamos delante del probador en dónde se encontraba nuestro tío —.Vamos tío, sal ya.

La cortina se hace aún lado y el tío Dracelus sale del probador.

—Se ve bien — Sonrió mí hermana —.Sabía qué le iba a quedar perfecto, sin duda es su estilo.

El tío Dracelus traía puesto un pantalón blanco, zapatos negros, una playera negra y un saco blanco, le quedaba bien, casi se parecía a mí papá Vladimir con eso puesto.

—Más bien es el estilo de los gemelos Drácula — Comenté, veía casi idéntico a mí papá Vladimir —.A nuestro padre le viene bien el negro, mientras qué al tío Dracelus le sienta bien el blanco, sin duda ese es tú color tío Dracelus — Sonreí.

—Gracias — Dijo él.

—Pues bien, nos llevamos esté, iré a pagar — Dijo mí hermana —.Después vamos a comer y a seguir de compras.

—¿Más? — La miré —.Hermana acabas de comprar demasiada ropa para ti aquí también, creo qué es tiempo de qué pares.

—Bastián, te daré un consejo de supervivencia, nunca de los nunca le digas a una mujer qué pare de comprar, te podrían tumbar todos los dientes — Dijo, mí hermana sonó demasiado amenazante, dió demasiado miedo —.Voy a la caja — Dió media vuelta para después ir hacia la caja para pagar.

Trague saliva por los nervios qué mí hermana me había provocado, por un momento pensé qué me iba a golpear.

—Tú hermana da mucho miedo.

—Claro qué da... creí qué me iba a golpear.

Una risa se escapa de la boca de mí tío.

—¿Qué? — Volteé hacia él.

—Nada es solo qué... tú hermana me recuerda bastante a Emilia, tú tía también daba miedo cuándo se molestaba, pregúntale a tú padre... Vladimir una vez se metió con sus cosas y no le fue muy bien cuándo Emilia se enteró de lo qué había hecho — Respondió Dracelus —.Y ahora con ese color de cabello me parece estarla viendo.

—Supongo qué el dar miedo es algo qué un Drácula sabe hacer muy pero muy bien.

—Sí.

—Vamos con ella tío, sí no queremos qué nos lanze del edificio más alto de está ciudad.

El Heredero De Drácula: Capitulo Final Donde viven las historias. Descúbrelo ahora