La princesa de las donas

Capítulo 1: "Tráfico de lechuga"

Dedicado a Sara Gutierrez de LBCTS:)

Bogotá, Colombia.

Agosto de 2013.

Realmente no creí que Fernando Vallejo tuviese razón en su libro "Los caminos a Roma" : "Cuando vivía en Roma soñaba con Medellín; cuando regresé a Medellín empecé a soñar con Roma." Hasta que cuando me encontraba en Europa, soñaba con volver a Colombia. Extrañaba a mis amigos e incluso la comodidad de mi casa. Y al volver, en definitiva extrañaba conocer el mundo.

Pero dejando mis pensamientos de lado, he decidido revisar mi Facebook por milésima vez en el día, a ver si algo interesante ha ocurrido (lo cuál es poco probable) o si a mis contactos les ha gustado mi foto en Italia.

Doy click en mi inicio y sólo veo las típicas publicaciones de los grupos: fotos que suelen decir cosas de tu signo, formar frases según tu fecha de nacimiento y ropa, imágenes en las que si pones "Hola" y otro "linda" tienen que pretender ser novios por una semana... Aburrido.

Sin embargo, no me salgo de esta red social porque... ¿qué más podría hacer? Ya no tengo libros para leer y el pdf no se me da bien, además de que prefiero estar plantada frente a un computador que ayudar en el aseo de la casa (no me juzguen), y tampoco es que mis padres me dejen salir mucho.

Sigo bajando por mi inicio y veo la publicación de un chico que tengo agregado, esta es la primera vez que noto su existencia. Debo tener más cuidado con respecto a quienes agrego. La publicación dice:

"Voy a cerrar este Facebook xdd comenta y te agrego en el nuevoxdd"

No sé por qué me parece tan divertido. Así que decido comentar "Yo xd". 

Sé que no me va a agregar el chico, acabo de revisar sus fotos y no es nada feo. Y yo... bueno, no es que sea la más linda de todas. Respondo un mensaje de Vanessa Vela, una de mis internet friends favorita. Hablamos de pendejadas, sin mentir.

De repente, me llega una solicitud de amistad.. de un chico. Es él. El chico del "xd".

Le acepto la solicitud y creo que ahí ya ha terminado todo. Pero no. Es sólo el comienzo.

Minutos después, se abre una ventana de chat en mi cuenta de Facebook, es él.

Sólo es un saludo. Le respondo igual y empezamos la típica conversación, ya saben, "Hola" "¿cómo estás?" "¿qué haces?" y así sucesivamente. Pero no termina ahí la charla. Siguen surgiendo temas. Temas tontos, en realidad.

Él

¿Qué te fumaste?xd

Frunzo el ceño sonriendo, así te decido de seguirle el juego.

Yo

Lechuga xdd

Espero unos minutos a que responda, después de todo aplica la regla de "si tu me respondes en tres minutos, yo igual esperaré tres minutos para responderte. Y si tardas, yo igual lo haré."