14.- ChangBin

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-Binnie, amor, más rápido, más...

-SeungMin ~

Maravilloso como es que termine con SeungMin sobre mí gimiendo desesperado mientras me exige sexo. Han pasados dos semanas desde nuestra primera noche juntos y tan solo dos días atrás desde que su hermano se enteró qué marque a SeungMin como mío. Admito que me tembló el cuerpo el enteró al ver al Alfa frente a mi muy dispuesto a arrancarme la cabeza por acostarme con su hermano menor, pero en mi defensa, ya no podía evitarlo en lo absoluto. Me enamoré de SeungMin como no me enamoré de nadie más. Soy completamente suyo y estoy para hacer lo que él quiera y mande no importa la hora, el lugar o que sea.

Pero esto qué esta pasando justo ahora se debe única por mi nueva asistente. La chica es una tierna Omega qué siempre está atenta a lo que necesito, suele traer café a mi oficina cuando estoy ocupado y en ocasiones puedo sentir como intenta coquetarme. SeungMin ya se dio cuenta de ello y la odia. Bastante a mi claro parecer.

SeungMin es muy celoso, a pesar de tener mi mordida en su cuello y miles de marcas en su piel, suele molestarse más de lo normal cuando la Omega esta cerca de mí y aunque ya le explique es únicamente mi asistente, SeungMin encuentra divertido tener sexo en la oficina cuando ella está a fuera probablemente atendiendo llamadas.

-¡Oh, Binnie! - chilla subiendo y bajando por toda mi intimidad mientras pasa saliva y abre la boca una vez más. Mis brazos rodean su cintura y lo ayudan a moverse porque se que le tiemblan las piernas desde hace unos minutos atrás. Y mi boca besa mi manzana de Adán para luego lamer la marca en su cuello, mandándole descargas en todo el cuerpo qué claramente puedo sentir.

-Silencio, Minnie. - le digo a pesar de que sea con que intención lo esta haciendo y el frunce las cejas antes de detenerse y mirarme.

-Yo puedo gritar todo lo que quiera. - responde antes de levantarse de mis piernas y acostarme en el sofá de la habitación. - ahora, cállate tú y sigue dándome sexo.

Le sonrió y él me besa antes de autocomplacerse con mi intimidad, sentándose sobre mi una vez más, pero ahora con fuerza. Se muerde los labios y sus ojos derraman lágrimas probablemente de dolor ante el brusco movimiento de su cuerpo, pero lo ignora y continúa con lo suyo audazmente. Sus expresiones faciales a la hora del sexo me encantan, son tan magníficas y maravillosas, tan calientes qué logran encenderme de inmediato.

Así que empujó mis caderas contra su estrechez y chilla mi nombre una vez más sin detenerse. No pasa mucho cuando siento como su interior me aprieta. Siento a su cuerpo caliente y a mi necesidad crecer así que lo sujeto de las caderas y lo ayudo a correrse. Hecha la cabeza hacía atrás y gime desesperado al mismo tiempo que mil incoherencias salen de sus labios volviéndome loco por él. Otra vez.

-Binnie yo, ¡por favor! - chilla y cuando su cuerpo tiembla, su interior explota y el semen sale de su miembro manchandonos a ambos. Y yo me corro en su interior sin tener un condon de por medio porque SeungMin quiso sexo fuera de casa y no es que yo esté teniendo intimidad en mi empresa todos los días. SeungMin chilla una vez más al sentir el nudo formarse y la mueca que su cara expresa me hace besarlo una vez más.

-Ya pasará. - le digo. - y tiene que tomarte esa pastilla porque no usamos condon esta vez.

-En cuanto se calmé tu pene, te aseguro que me la tomó. - sonríe. - ahora, ¿nos habrá escuchado?

-Yo creo que sí. Eres muy escandaloso. - le digo sonriendo.

-Uy, arrepientete de eso o no me tomo la pastilla...

Infla sus mejillas y yo lo atraigo hacía mí para besar su marca con suavidad.

Tú, Omega, le das miedo a mi AlfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora