Cuando te toque elegir

Sospecha.

Cada vez faltaba menos para la graduación, como también para la boda de Ashley, Peter no había parado de insistir, todo los días llamaba o mandaba mensajes, decidí cambiar de teléfono y así el ya no tendría contacto conmigo, estaba en casa de Ashley ya que tenía varias opciones para su vestido de graduación y quería mostrarmelos, después ya haberse probado como 5 vestidos, tanto a mi como a ella nos gustó no rojo que le hacía muy buena figura. Ash estaba viendo su teléfono cuando su semblante cambió a uno más serio.
-Peter está engañandoe- dijo susurrando.
Rápido gire sobre mi eje y me incorpore a donde ella estaba, quedando nuestras miradas de frente.
-¿Por qué dices eso-  le pregunte, sujetando sus manos.
Ash bajo su mirada - Ha estado muy distante conmigo, siempre llama a alguien por teléfono y se enoja por que no le contesta, aparte lo escuche hablando con su madre acerca de alguien con quien pasó un fin de semana en el campus. -  dijo sollozando.

Soy una mierda, fue lo primero que pasó por mi mente al escuchar a Ash, yo soy el causante de que ella esté así, y todo por que no supe alejarme de Peter, solo me límite a abrazarla y ella pego su cabeza a mi pecho y soltó unas lágrimas, -¿Aún piensas casarte con el?, ¿de verdad quieres hacerlo? - le dije mientras alzaba su mirada. Ella solo puso una expresión cansada y seco las lágrimas de sus ojos y después asintió.
-Tu me vas a ayudar a descubrir quien es ella-dijo
-¿cómo?-añadí nervioso
-Vamos a seguirlo estos días, tendrá que verse con ella en algún momento y cuando lo tengamos, lo enfrentare- dijo
-¿Estás segura? -
-Si Sebas, ¿vas a ayudarme o no? - dijo lanzandome una almohada. Solo me queje  asentí, me dio un poco de tranquilidad saber que no atraparia a Peter en nada ya que yo no pensaba volver a acercarme a él.

Ashley empezó con el plan "Atrapar al infiel" , viajamos a donde estaba el campus de Peter, ya no teníamos que asistir a clases, y pasamos muchos días y horas solo estacionados afuera del campus de Peter observando, con quien hablaba y salía de clases, Ash solo tomaba nota, y fotos, parecía una detective. - Ash ya llevamos aquí tres días, no crees que si Peter viera a alguien más ya lo habríamos atrapado? - ella solo me lanzó una mirada de que me callara y añadio- Estaremos solo unas horas más te lo prometo - dijo mientras no despegaba la vista de unos binoculares que compró en una gasolinera.
Mi teléfono sono, era Javi, había estado al pendiente desde que salí de la ciudad con Ashley, me mandaba mensaje o llamaba cada que tenía un tiempo libre ya que estaba practicando para obtener una beca deportiva, en unos días era el último juego y habría reclutadores de las universidades más importantes de Estados Unidos, aunque desde que le dije que me iría a Nueva York, ha querido buscar una escuela cerca de ahí, me di cuenta que realmente tiene planes conmigo y eso me alegro bastante.

Mi celular cayó al suelo cuando Ash encendió el auto de golpe y aceleró, tanto causando que diéramos un pequeño brinquito del asiento. Tarde un segundo en darme cuenta que estaba siguiendo el auto de Peter, no dije nada y solo me sujete de algo y abroche mi cinturón ya que iba demasiado rápido, finalmente se detuvo, Peter entró al lugar dónde habíamos comido el día que estuvimos juntos, me imagino que lo frecuentaba mucho, Ash y Peter solo habían intercambiado mensajes estos tres días, él respondía de una forma seca al igual que ella, después de unos 20 minutos Peter salió del lugar con unas bolsas que pudimos suponer que era comida.
Subió a su auto y avanzó, Ashley hizo lo mismo y lo seguimos de vuelta al campus, y unos amigos salieron a recibirlo, Ash volteó los ojos al pensár que se había equivocado y haber perdido tres días para nada, - Lo siento-diji poniendo su cabeza contra el volante, yo solo le di una risita de que no había problema, ella arrancó y nos dirigíamos al aeropuerto para ir a casa.

Después de largas horas, llegamos, Ashley mencionó que se quedaría en mi casa, ya que era tarde para que fuera a la suya - No hay problema - mencioné - Sabe que a mamá le dará mucho gusto verte -.
-Lo sé, tu madre me adora - dijo, entramos a casa y Ashley se tumbo en mi cama con su computadora para mencionar que buscaría una película, yo baje a la cocina a preparar palomitas y ella mencionó que también pidiéramos pizza, a lo cual solo asentí y ella arrugó la nariz, estábamos viendo una película nueva, era una comedia romántica, tocaron el timbre de la casa y baje apresurado, seguramente era la pizza que ya venía 40 minutos tarde, abrí la puerta y el rubio estaba parado ahí, viéndome con sus bellos ojos verdes y con una sonrisa entusiasta. - Puedo pasar - mencionó, yo rápido cerré la puerta - ¿Ashley está aquí? ¿Acaso estas loco? Su auto está estacionado aquí.
-Lo sé, y no me importa, por que no voy a casarme con ella - dijo mientras acariciaba mi rostro.
-¿De qué estas hablando? - mumure.
-Sebastián, mírame- alzó mi mirada hacia la de él y sus ojos tenían un brillo hermoso.
-Siempre has sido tú, mencionó, desde el primer momento, desde que derrame mi trago sobre ti en la fiesta de Ashley, desde que bailamos en ese club y desde la primera vez que te bese, desde ese momento supe que eras tu, pero quería estar completamente seguro, y ahora lo estoy.

Estaba a punto de darme un besó, cuando llego el repartidor y oí un grito de Ashley de que por que tardaba tanto. - Hablamos después ¿si?- mencioné mientras recibía la pizza y trataba de entrar antes de que Ashley bajara, él me tomó por mi brazo y me besó, ahí al frente de mi casa y bajo la luz de la luna, - Te veo mañana en el parque de la ciudad a las 8- solo asentí y el se marchó, me quede ahí parado por un momento y unos segundos después la voz de Ashley se hizo presente - ¿Estabas coqueteando con el repartidor?  O ¿por qué tardas tanto?, solo solté una carcajada y entre a casa para continuar nuestra velada.