Esto es un sueño

Volumen 4.10

Mientras dormía, una sensación agradable lo cobijó, el aroma tan familiar lo atrajo suavemente y Taerim se sintió tan ligero como una pluma. Hacía mucho tiempo que no sentía algo tan agradable. Sus párpados se abrieron suavemente y fue capaz de ver los movimientos tranquilos del pecho de Seo Bae-Joon que estaba abrazándolo.

Su rostro se inclinó hacia arriba, el afilado mentón, las pestañas largas y la nariz respingada. El rostro dormido de Seo Bae-Joon ahora le resultaba tan diferente. Su corazón latía aceleradamente con el simple hecho de estar a su lado. ¿Eso era el amor?... No era la primera vez que dormían o mezclaban sus cuerpos, pero las sensaciones eran diferentes.

¿Es porque ahora él es un Omega? Antes la sola feromona de Seo Bae-Joon le resultaba molesta y repulsiva, pero después de que pasara por la cirugía eso fue cambiando. Realmente eso no importaba ahora.

Su mano, que se movió hasta su estómago acarició suavemente la piel cálida. No iban a ser solo dos personas, sino cuatro. Realmente fue una sorpresa inesperada. Taerim no dejaba de mirar ese rostro. Era definitivamente idéntico al chico que estuvo a su lado durante el tiempo que estuvo dormido.

'¿Serán como tú?'

Taerim pensó lo que sería de su vida con un Seo Bae-Joon y dos versiones miniatura de él. Aún no sabían que sexo tenían los bebés, pero Taerim se sintió un poco ansioso. Definitivamente, eso sería un problema, pero uno muy hermoso. Le costaba creer por todo lo que había tenido que pasar para estar allí.

Quizás si se hubieran encontrado juntos en la universidad... No, Taerim nunca se hubiera acercado a Seo Bae-Joon. Como lo viera, ellos eran de mundos diferentes, definitivamente, era un hombre que representaba todo lo que un Alfa en extremo dominante debía de ser. Aun así, Taerim jamás escuchó de otros Omegas ni de ex amantes de Seo Bae-Joon. No es que le importara, pero una extraña curiosidad había nacido en su corazón.

Los brazos que estaban rodeando su cuerpo se tensaron y aplicaron una sutil fuerza.

"¿Vas a mirar mi rostro toda la noche?"

"¿Eh? ¿Estás despierto?"

"¿Cómo voy a dormir a lado de una fábrica de feromona Omega? ¿Qué pasa últimamente? Te he notado muy extraño. ¿Todo está bien?"

"Sí..."

Taerim escondió su rostro en el pecho de Seo Bae-Joon mientras su rostro se ruborizaba. ¿Desde cuándo tenía una voz como esa...? Estaba avergonzado. Su cuerpo reaccionaba inesperadamente cuando estaba junto a Seo Bae-Joon y su corazón latía como si quisiera salir de su pecho.

"Puedes soltarme, es un poco incómodo".

"Oh, claro".

Seo Bae-Joon, que no estaba satisfecho con la respuesta, soltó un poco la fuerza de su abrazo. Taerim se giró y se acostó del lado contrario haciéndose bolita. Seo Bae-Joon miró el reloj en la pantalla de su teléfono celular.

[3:00 am]

Tenía que estar listo a las seis y no podía llegar tarde. Dado que se robó al protagonista de la fiesta, era seguro que el profesor Kan estuviera de mal humor. Además, él era un hombre muy exigente respecto a separar el tiempo personal del laboral. Sin embargo, deseaba tanto quedarse junto a él.

Después de mucho tiempo, pudo sentir la sensación del roce de su piel y mirar esa hermosa expresión empapada en lágrimas mientras se aferraba a su cuerpo con desesperación.

Seo Bae-Joon jamás se sintió tan afortunado como en esos momentos. Y la situación de la feromona podía deberse a un efecto por el embarazo. Solo tenía que hacer que los doctores lo atendieran de nuevo.