Pasado. (4)

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Habían pasado dos años, poco después de que le pedí la receta de los dorayakis a Wakasa deje de verlo. Iba a buscarlo todos los días al mismo lugar donde nos veíamos pero jamás se presentó así que deje de buscarlo y continúe con mi trabajo.

Hideki estaba comenzando a actuar raro, había días en los que no llegaba al trabajo y otros salía más temprano que de costumbre. Y por otro lado Sayumi se ponía nerviosa cuando le preguntaba sobre mi amigo lo cual me estaba haciendo sospechar de que había algo entre ellos.

....

Habían pasado ya dos años, de un tiempo a otro Hideki dejó de venir a la casa lo cual me ponía muy triste, después de todo él es mi primer amor.

Como de costumbre me encontraba haciendo la comida con la pequeña Kairi. Estaba por terminar cuando me di cuenta de que ya no tenía jitomates para hacer el caldo.

- Mamá iré a comprar verdura, me llevo a Kairi- me acerqué al sofá donde estaba jugando y la levante y fui por dinero.

- Esta bien tengan cuidado- ambas salimos de la casa caminando rumbo a la verduleria. Al llegar nos formamos y esperamos nuestro turno mientras le hacia cosquillas a Kairi.

- Bata- pedía mientras movía sus manos.

- Siguiente -

- Me da un Kilo de jitomate y medio de manzas -

- Algo más -

- Sólo eso -

- Serían 55 yenes- entregue el dinero y tome mis cosas para después caminar hacia una tiendo para comprar un jugo. También a lo lejos logre ver a Yoichi en esa misma tienda, estaba por gritarle cuando sentí como alguien me tapó la boca haciendo que soltara la mano de Kairi y las cosas que había comprado.

- Subanlas a las dos!- gritaron y yo empecé a forsejear para evitar que nos llevarán, abrí mi boca y mordi la mano del tipo haciendo que este me soltara. Tome a Kairi de la mano y en eso sentí un golpe en la cabeza.

Caí junto con mi hermana y ella comenzó a llorar llamando la atención de mi hermano el cual corrió hacia nosotras junto a alguien más.

- Subanlas rapido!- volvieron a gritar y logre reconocer aquella voz. Mi hermano saco su arma y comenzó a disparar yo aún seguía aturdida por el golpe así que me levanté tambaleando y tome a Kairi para comenzar a correr. Sentí como mi hermano me detuvo y yo lo abrace. Antes de que pudiera decir algo vi a Hideki apuntando con su arma a mi hermano y lo último que vi fue como los tres caímos al piso.

Él chico que venía con mi hermano también le disparó a Hideki y yo comencé a llorar.

- Yoichi, Yoichi reacciona!- le gritaba mientras lo movía bruscamente pero no obtenía respuesta alguna. Haciendo que mi desesperación aumentará. - Eres un tonto- lo golpee en el pecho haciendo que mis manos se mancharan de sangre, dirigí mi vista hacia su mano viendo como apretaba algo. - Eres un idiota muy estúpido- hable abrazando su cuerpo al mío mientras lloraba en silencio para no asustar a Kairi.

El chico que venía con mi hermano llamo a más personas y después tocó mi hombro.

- Señorita tenemos que irnos- yo no respondí, sólo vi como unos hombres tomaban a mi hermano y lo subían a otra camioneta y a nosotras nos llevaron a casa.

....

Habían pasado dos días después de la muerte de Yoichi hoy lo enterrariamos. Desde temprano mi mamá nos despertó a todas y nos metimos a bañar, todas vestíamos de negro al salir de la casa logramos ver como el patio estaba rodeado de todos los hombres que trabajaban con mi padrastro y enmedio había un ataúd blanco donde se encontraba mi hermano.

Mamá no aguanto más y corrió hacia el comenzando a llorar. Aneko me tomó de los hombros y las tres caminamos hasta mamá. Despues de un rato todos salimos de la casa, el llanto de mamá aún no cesaba. Al llegar al cementerio los hombres que cargaban el ataúd lo bajaron donde estaba el hoyo y comenzaron a echarle tierra, antes de que lo taparan por completo mi mamá tomó un puño de tierra y se lo echo formando una cruz, mis hermanas y yo nos acercamos para poner las flores dentro de su tumba y después terminaron de echarle tierra.

- Será mejor que ya nos vayamos- dijo Ibikki tomando a mi mamá de los hombros, nosotras sólo los seguimos hasta llegar a la camioneta y después nos fuimos rumbo a la casa.

- Yo debí de haber evitado su muerte- le dije a Aneko, ella me abrazo y yo comencé a llorar. - Le debí de haber dicho que Hideki lo quería matar -

- No fue tu culpa nadie se lo imagino -

- Yo en verdad lo amaba y él intento matarme- volví a llorar, sintiéndome culpable por la muerte de mi hermano mayor.

BECAUSE I LOVE YOU Donde viven las historias. Descúbrelo ahora