Jack x lectora | ❝Mi Perla es tu Perla❞
Nada existe por azar, al igual que nada se crea de la nada. Todo tiene una causa, y si tiene una causa estaba predestinado a existir desde el momento en que la causa surgió. Debido a que la inmensa cantidad de...
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—La estrella que falta.
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—John... —me observo y después miro a Jack —Por suerte salió a su madre —reí y escuché a Jack bufar —Su carácter...
—Es igual a Jack —hice un pequeño puchero —Aunque en ocasiones se comporta como yo.
—Por cierto Héctor —dijo Jack —Queremos renovar nuestros votos —lo miré sorprendida —________ dijo que preferiría que tú nos casaras.
—Jack... —susurre sorprendida, no creí que lo recordará después de tanto.
—¿Quieren que lo haga como lo hice con Turner y Swann? —pregunto Héctor, estaba sorprendido por lo que dijo Jack, pero después miro el mar —Podríamos hacerlo si quieren... pero no los voy a desatar.
—De acuerdo —acepto Jack sonriendo mientras John permanecía sorprendido.
—Solo entre nosotros —se puso adelante poniendo una mano en su pecho —Queridos hermanos nos hemos reunido hoy, para renovar este matrimonio que no sé cuando fue realizado —rodé los ojos y miré a Jack —Digan sus votos.
—Se dicen los mismos ¿Verdad? —pregunto Jack y asentí.
—No es necesario, pero si quieres si.
—Yo, el Capitán Jack Sparrow, voy a seguir entregándome solo a ti, seguiré siéndote fiel y estaré contigo en los días de salud y enfermedad por toda la vida.
—Yo, ________... Ross —fruncí un poco el ceño, ¿Qué apellido debo decir? —... Sparrow, seguiré eligiéndote a ti, con todos tus virtudes y defectos, continuaré siendo tu compañera incondicional... apoyándote todos los días.
—Como Capitán ahora los declaró casados, puedes besar a la novia —sonreí y acerqué mi rostro a Jack besándolo, fue corto, estaba avergonzada al dejar que John nos vea.
Jack rozo nuestras narices y sonreí.
—Felicidades —dijo Héctor y nosotros asentimos, miró a John —No los liberes muchacho —se fue.
—Nunca pensé verlos renovar sus votos —dijo John y reí un poco avergonzada —Me alegra, quisiera tener la suerte de papá.
—¿Por qué lo dices? —pregunté.
—A pesar de todas las cosas que pasaron juntos y más por los problemas que tuvo papá, tú siempre estuviste a su lado y viceversa, espero encontrar a alguien así —sonreí enternecida.
—Encontrarás a la indicada, hijo —dijo Jack y asentí —Así como yo lo hice, sabrás que es la indicada cuando la veas y llegues a conocer.
—En eso tiene razón —sonreí —Sé que está mal decirlo, pero agradezco que Elizabeth se haya caído de ese acantilado.
