- ¿Seguro que estarán bien? Es una reunión larga, intentaré salir lo más rápido posible - dijo el omega abrazando un poco más a su cachorro.
Estaban en la ciudad una vez más, se había enterado de la reunión de trabajo que su novio tenía e insistió en llevarlo y cuidar a Milo en el departamento mientras Harry se reunía con sus compañeros tranquilo.
- Si, Hazz, encontraremos un lindo parque por ahí, almorzaremos y te esperamos - aseguró, mirando los ojos verdes de su omega.
Lo vio suspirar, dejando un beso en la frente de Milo antes de hablar otra vez.
- Bien, pero llámame por cualquier cosa y si quieres inventar una emergencia que me saque de ahí con urgencia, te prometo que no me molestará - dijo, pasándole a Milo.
Se rió, tomando al cachorro y besando los labios de su omega.
- Enviame un mensaje y nos atropellara un caballo o algo así - dijo, viendolo sonreír.
Tomó sus cosas y abrió la puerta del Jeep.
- Por eso te amo, adiós Milo, nos vemos luego amor - beso la mejilla del pequeño una vez más.
Se bajó mirando el bar donde lo esperaban con muy pocos ánimos.
- Adiós mami, nos vemos - saludó el cachorro moviendo su manito.
Espero a que estuviera dentro del bar para ajustar el cinturón a Milo en el asiento de acompañante y arrancar el pequeño paseo por la ciudad.
- Mami y yo vivíamos por aquí antes - dijo señalando los edificios - Pero no vivimos más aquí, papi.
Londres era una ciudad grande, pero el barrio en el que se encontraban parecía bastante acogedor y residencial. Ni en otra vida podría pagar por vivir en un lugar así.
- Claro, cariño, ahora viven allá en casa, conmigo y los tíos - dijo girando en una esquina, sabía que el departamento de a
Harry estaba por allí y tenía la llave, pero no le parecía correcto ir sin él.Además hacía un día hermoso y soleado, Milo necesitaba andar y aprovechar los últimos días cálidos de noviembre como ese, antes de que llegue el frío diciembre.
Estacionó en un parque enorme, había fuentes y juegos para niños, además que estaba rodeado de sitios para comer y estaba lleno de familias.
- ¿Qué te parece si esperamos a mami aquí, Milo? - dijo mirando a su hijo.
- Si! ¿Bruce y el triciclo? - preguntó, dejando que le suelte el cinturón.
Le puso su camperita y estaba listo, él tomó sus lentes y su propio abrigo. Comprobó que no tenía mensajes
- Bruce está atrás, míralo, con su cinturón abrochado - señalo al dinosaurio en la parte de atrás del auto, Harry lo había sujetado también para que Milo se quede tranquilo en su sillita - Y el triciclo está en el baúl, ahora lo bajamos, ¿Si?
- Oki doki - canturreo, estirando sus brazos para que lo cargue.
- Entonces vamos compañerito.
Una vez que tuvo a Milo, a Bruce y al triciclo, bloqueo el jeep y bajo el triciclo, el cachorro quiso subirse con el dinosaurio de peluche.
- Mira papi, soy muy rápido! - chilló tomando velocidad con el triciclo.
Sonrió al verlo ir con toda la fuerza de sus piernitas, siendo rápido pero sin irse muy lejos.
- Eres el rayo McQueen, Milo - dijo, sintiéndolo reír.
Louis se había enterado de que ni su hijo ni Harry habían visto Cars, así que un par de noches atrás los sentó en el living a ver las películas. Milo, hijo é tigre, tenía a McQueen como personaje favorito.
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beach boys [ social media l.s ]
Fiksi Penggemarharry sabía solo dos cosas del papá de su bebé, que se llamaba louis y que era el alfa más caliente que un omega soltero de 21 años podría haberse cruzado en una noche de verano o dónde el omega de 24 años y su cachorro comienzan de cero en un nuevo...