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Ese día competiría contra Yeji, Yeonjun, Ryujin, Jake y Juyeon, y a decir verdad, se sentía nervioso. Ellos eran considerados los mejores junto a él, aunque sabía que de todos modos ganaría, tenía la certeza de que lo haría.

Y sobre todo, debía hacerlo, cómo se lo prometió a Karina, ella estaba en primera fila junto a su hermana y Jackson, se sentía honrado, y como lo espero, Minho no estaba ahí.

Corredores, prepárense rápido, iniciamos en unos minutos.— la voz de Joy se escuchaba nítida y emocionada.

El australiano estaba junto a Changbin, este le ayudaba en lo que le faltaba, a su lado, pasó Yeji, el traje que portaba se veía apretado pero cómodo.

—Suerte hoy, Bang.— la peliroja sonrió para alejarse y estar junto a Ryujin, aquellas chicas se animaban entre sí.

—Debes ganar, amigo, hazlo como siempre lo haces.

El más alto no dijo nada, tomó su casco y salió a la pista, chocó puños con todos y encendió el motor, en espera de la señal.

La luz verde del semáforo y el sonido de la trompeta hizo que todo diera inicio, las llantas dejaron el característico rallado en la pista.

Yeonjun llevaba la delantera, pero en la curva fue superado por los demás, quizá aún era principiante, esta vez la pista estaba rodeada por obstáculos y muchas más curvas. El tiempo se sentía más lento, y la velocidad era poca a lo que debía acelerar, sentir aquella adrenalina nuevamente en sus venas.

Poco le importaban los gritos, las curvas o las personas contra las que estaba compitiendo, él solo tenía una meta la cual debía cumplir.

Las personas estaban eufóricas, la mayoría apoyaba a Cristopher, pues sabían que siempre ganaba, sin importar el obstáculo.

El sonido de las motocicletas era música para sus oídos, sentir que debía ir cada vez más tapido, apretó sus puños en el manubrio y aumentó más la velocidad si es que se podía, sentía el sudor por todo su cuerpo debido al traje y al sol.

Faltaba cada vez menos y sabía que tenía la victoria en la palma, no supo que más pasó cuando volvió a cambiar de velocidad y pasó la línea de meta, suponía que había ganado, pues las personas gritaban su nombre.

Joy anunció su victoria nuevamente, el segundo lugar lo obtuvo Juyeon y el tercero Ryujin. Miró hacia donde estaba Karina, decir que estaba emocionada era poco, cuando conectaron miradas ambos pusieron una sonrisa boba en sus rostros, no supo porque lo hizo.

Se acercó y le robó un beso a la jóven, captando la atención y murmullos de todos, se separó rápidamente y se dirigió con Changbin, sin notar las otras presencias a sus lados.

—Así que eres de los que aman hacer un espectáculo, ¿Cierto, señor perfección?— aquella voz hizo que girase su cabeza de manera rápida.

No sabía porque la presencia de Minho lo ponía nervioso hasta los dedos, pero sonrió al ver que al menos si había ido, ni siquiera observó que estaba junto a Jisung.

—Oh, en verdad me encanta como no tienes idea.— dejó su casco de lado y tomó el mini ventilador que le ofrecían.

—Me alegro que hayas ganado, has dado una buena impresión— mencionó moviendo su mentón hasta donde estaba su familia.

—Eso era lo que quería, aunque de todos modos sabía que iba a ganar.

Minho negó riendo mientras recogía la botella que el castaño le ofrecía, Chris apenas cayó en cuenta que Jisung estaba con el cenizo, ¿Pero cómo?

—Veo que conociste a Jisung.— interrumpió el silencio que se había formado.

—Exactamente, creo que llegué muy tarde, por suerte él me ayudó a entrar.— murmuró orgulloso.

Aquello hizo que algo en Christopher se tensara, ¿Por qué Minho lo alteraba de una manera tan fácil? Ni siquiera parecía notar los nervios que tenía al estar cerca.

—¿Por qué no vamos a comer? Yo los invito.— Minho habló dirigiéndose a los tres presentes ahí.

—¡Yo si quiero! ¿Podemos ir, Chris?— el menor de todos pregunto nervioso.

—Pero claro que...— el cenizo carraspeó al saber que el corredor se negaría.

—¿Por qué le estás pidiendo permiso? Yo te estoy invitando.— los ojos de Minho se fijaron en él de una manera espeluznante.

—Minho, realmente eres un hijo de puta.— Christopher sonrió al acercarse peligrosamente al menor.

—Lo sé.— no apartaron miradas en ningún momento, su relación era bastante extraña.

ਏϊਓ

Minho los llevó a un restaurante cercano, lujoso pero familiar, ahí todos estaban reunidos celebrando la victoria de Christopher.

—Debería agradecerle a Baekhyun.

—¿Utilizaste su nuevo modelo?— Jackson sonaba emocionado ante la idea.

—Así es, no me pude resistir y la compré.

Aquella comida fue tan espontánea y sencilla que por un momento olvidaron de que estaban hablando, así como no notaron cuando Minho y Christopher fueron a fumar, alejándose de los demás.

—En verdad eres un acosador, eh.— Minho estaba divertido ante la idea.

—Cállate, también tenía antojo de uno de estos.

—Fuma los que quieras, algún día tendrás que morir, y ese día lo esperaré con ansias.— solo hubo una pequeña risa antes del silencio absoluto.

Christopher se preguntaba si en verdad le agradaba a Minho, no le gustaba la idea de que no lo hiciera. Cuando quiso encender su cigarrillo notó que no tenía fuego, pero el cigarrillo del contrario yacía prendido sobre sus labios.

Colocó el suyo en los propios y se acercó en demasía hasta Minho, quien solo alcanzó a abrir los ojos en sopresa, pero no se separo. La distancia era poca, alcanzaban a sentir la respiración de si mismos, los ojos de Chris conectaron con los de Minho y todo el mundo se fue al carajo con esa simple mirada.

—Lo siento, necesitaba fuego.— dijo cuando por fin se separaron.

—Descuida, no fue nada.

Aunque eso era lo opuesto a lo que sentían sus respiraciones aceleradas y sus manos temblorosas.

. ·ʚĭɞ 𝗳𝗮𝘀𝘁𝗲𝗿 ਏϊਓ | Minchan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora