- Domingo, 09:15 a.m. -
Noah Miller
Tras cogerme el pelo con una coleta voy a la cocina para desayunar algo, leo el mensaje de Blake y sonrio puesto que lo echaba muchísimo de menos.
Salgo de casa y tras cerrar la puerta camino hasta su antigua casa, antes de llegar me encuentro con Jordan.
— Jordan, ayer hablé con Blake. -digo sonriendo.
— ¿Si? -dice abriendo los ojos como platos.
— Me dijo que esta en su antigua casa, voy para allá; ¿vienes? -le pregunto sonriendo.
— Vale. -responde haciendo una mueca-. Tengo que hablar con él.
— Genial, vamos. -sonrio.Al llegar a casa de Blake siento la necesidad de cogerle la mano a Jordan y así hago, él mira nuestras manos y sonrie.
— ¿Estás segura de que esta aqui? -dice mirándome.
— Si, eso me dijo. -respondo nerviosa.
— No parece haber nadie. Vámonos. -rueda los ojos.
— Igual no sale porque estás tu aquí. -digo soltandome de él.
— Me has dicho tu de venir. -se cruza de brazos-. Mejor me voy, ya volveré otro día.
— Quédate. -susurro.Él me mira y acto seguido me dispongo a tocar el timbre cuando la puerta se abre, dejándome ver a un hombre con una sonrisa curiosa, siento miedo y agarro la mano de Jordan que esta en shock como yo, siento unos brazos rodear mi cintura y acto seguido caigo en un profundo sueño haciendo así que mi mano se soltará de la suya.
~ 10:20 a.m.
Jordan Davis
Abro los ojos y siento un dolor tremendo en la cabeza, no se dónde estoy y solo puedo ver a Noah a mi lado, la cual esta apoyada sobre sus piernas con la cabeza entre ellas, por los movimientos que siento debajo de mi pienso que estábamos en una furgoneta o algo por el estilo.
— Noah. -susurro.
— Jordan, tengo miedo. -me mira con lágrimas en los ojos.
— Tranquila, todo va a salir bien. -me pongo a su lado con cuidado.Entrelazo mi mano con la suya y intento acercarme más a ella pero las cadenas que rodean mi tobillo me lo prohíben.
Tras varias horas en este sitio las puertas de la furgoneta se abren y varios hombres con pasamontañas nos miran, Noah apreta mi mano con fuerza y uno de ellos sonríe pícaro mirándola.
— Jefe, tenemos aquí a una bonita pareja. -dice éste riendo.
— No somos pareja. -digo serio.
— Vaya el caballero dando la cara por su doncella. -se ríe.Me quitan la cadena del tobillo y me sacan a estirones, me ponen unas esposas y me llevan hasta quien sabe dónde, miro hacía atrás y veo a Noah gritando tras los agarres de esos hombres.
~ 12:00 p.m.
Noah Miller
Me llevan hasta una habitación y cuando la abren no puedo creer lo que veo. Blake esta con cadenas sobre un mugroso colchón.
— Blake. -grito llorando.
— Noah lo siento tanto. -dice mirándome.El hombre me quita las esposas y me empuja cayendo frente a él. Me acerco despacio a Blake y pongo mis manos en sus mejillas, él me mira y no puedo evitar llorar, junto mi frente junto a la suya y beso sus carnosos labios sin importarme nada más, echaba de menos sus besos y sobretodo a él todas las mañanas.
— Te quiero. -susurro triste.
— Yo te quiero más. -dice él-. No deberías estar aquí. -cierra los ojos-. Esto es culpa mía.
— Blake. -digo con lágrimas en los ojos.
— Bueno pareja, espero que ya hayáis acabado, todavía tengo cosas que hacer con la señorita y además debo ocuparme del otro acompañante. -dice el hombre cogiendome.
— ¿Que acompañante? -dice Blake mirándolo.
— Jo..Jordan. -trago saliva.El hombre me saca de la habitación y lo golpeo debido a que no tengo las esposas. El me coge de la muñeca y su mirada se clava en mi como un puñal.
Me lleva hasta una habitación, más bien a su habitación.
— Te han dicho alguna vez lo bonita que eres. -susurra acariciandome la mejilla.
— No me toques. -digo escupiendole.
— -se limpia-. Niñata de mierda. -me da una bofetada.Me lleva hasta la cama y me esposa en ella.
— Luego volveré para hacerte mía. -dice sonriendo.
— Eso no te lo crees ni tú. -digo gritando.Sale de la habitación dando un portazo y cierro los ojos para dar un largo suspiro.
~ 12:45 p.m.
Blake Jones
Escucho un grito y mi cuerpo se tensa, Leonard entra en la habitación y se pone de cuclillas ante mí.
— No veas como ha gozado conmigo. -dice sonriendo.
— -lo miro con asco-. Mientes. -grito.
— -se ríe-. Que poco me conoces, Jones.
— No eres capaz de hacerlo. -lo miro serio.
— ¿Que no? -se ríe-. Si quiero me la puedo follar delante de tí.
— Deja que se vaya. -lo miro.
— ¿Y perder la oportunidad de hacerte daño igual que tu me hicisteis a mi? -se ríe irónico-. Nunca.
— Eres un miserable, Leonard. No se como pudiste ser mi mejor amigo. -digo con rencor.
— Pues para ser amigos bien que me quitaste a mi novia. -dice serio.
— Hasta ella decia que yo follaba mejor que tú. -me río.
— Ahora veremos que opina tu querida hermanastra. -se levanta para irse.
— No la toques, hijo de puta. -grito.
— Tranquilo, ahora la traigo y verás con tus propios ojos como goza. -cierra la puerta.Grito de la impotencia y apreto mis puños llenos de furia, si le hiciese algo jamás me lo perdonaría.
~ 15:30 p.m.
Jordan Davis
Me sacan de la habitación y me llevan a otra, al entrar veo a Blake en el suelo.
— Blake, ¿que coño haces aquí? -digo serio-. ¿Dónde esta Noah?
— No lo sé, no se dónde esta. -dice serio.Me empujan hasta él y tras varios minutos la puerta se vuelve a abrir, Noah esta asustada y a su lado esta el hombre que nos secuestró apuntandola con un arma.
— Quítate la ropa. -le ordena a lo que ella se niega.
— Hazlo o lo haré yo. -dice apuntándole con el arma.
— No lo hagas. -grita Blake.
— Cállate. -esta vez nos apunta a nosotros-. Ahora hazlo. -vuelve a apuntarla tras disparar hacía nosotros dándole así al colchón.Miro a Noah que se desviste ante la atenta mirada de todos los que estaban en la sala y su cuerpo tiembla como si de un flan se trátase, el hombre la mira de arriba a abajo y muerde su labio para acto seguido cogerla de la cintura acercandola a él, aparta su pelo y empieza a besarle el cuello, su mano va descendiendo hasta llegar a su trasero y Noah cierra los ojos para acto seguido golpearle en sus partes. Él se retuerce de dolor y cae al suelo de rodillas.
Le quita las llaves y se acerca a nosotros para quitarnos las esposas; tras acabar nos levantamos para irnos pero el hombre coge su pistola y nos apunta, dispara y lo último que escucho es el disparo impactar contra algo, Noah me mira asustada ya que Blake esta en el suelo con un disparo en un costado.— Blake, ahora no. -grita Noah arrodillandose frente a él.
— Jordan, cuídala. -susurra antes de cerrar los ojos.
— Quédate conmigo porfavor. -susurra ésta.Miro al hombre que nos mira y acto seguido un disparo vuelve a sonar, su cuerpo cae al suelo y un charco de sangre se empieza a formar alrededor suyo.
— Noah, vámonos. Ya no podemos hacer nada. -digo calmandola.
— Yo le quiero. -dice apoyada en su cuerpo.
— Él a ti también. -digo dolido.Cojo su ropa y salimos de la casa dejando a Blake en aquella habitación, Noah temblaba de miedo y yo todavía seguía en shock por todo lo que había ocurrido, la abrazo como si no hubiera un mañana y ella se hunde en mi pecho con lágrimas en los ojos.
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Besos prohibidos.©
RomanceDesde pequeños nos han mostrado que los prototipos perfectos son chicas delgadas con curvas y buen trasero, en caso de no ser así ya eres el bicho raro, ya eres el hazme reír de todo el mundo, ya eres simplemente "La gorda". Sue, una adolescente de...