Capítulo 23

26 0 0
                                    


Asher despertaba dispuesto a prepararse para ir a su trabajo. Observó a Hayden quien dormía plácidamente, y en la cama de al lado, Celine. Esa chica que traía su mundo de cabeza.

No podía dejar de admirar esa belleza que emanaba. Se acercó, tratando de no despertarla y observó su rostro, tenía una piel perfecta. Acarició su rostro lentamente y luego desvío sus
mirada a sus labios. Ellos lo llamaban invitándolo.

Se sintió tentado, preguntándose como sabrían aquellos labios, así que se acercó con suavidad.

Estuvo tan cerca que sintió su respiración mezclarse con la de la chica que yacía dormida, y luego de meditar unos segundos, simplemente besó su mejilla.

No iba a negar que se moría por algún día probar sus labios, pero no era un sinvergüenza que se aprovecharía cuando ella no estaba consciente, por lo cual simplemente se dispuso a marchar.

Un par de horas después Celine despertó, había dormido demasiado y había perdido horas valiosas en las cuales podía haber buscado empleo en cualquier lugar. Fue donde el bebé quien dormía plácidamente.
Y se dio cuenta de que Asher ya lo había alimentado.
Lo tomó en brazos para poder llevarlo donde Carmen.

La mujer tomó al niño y lo llevó dentro, y ahí Celine se dispuso a marchar.

Ese día, fue el día de suerte, ya que la chica consiguió un trabajo atendiendo en una panadería.

La dueña del lugar le había dicho que la chica que trabajaba con ella había enfermado por lo cual necesitaba mucha ayuda para hacer el pan.

Si bien, no era mucha la paga, definitivamente era mejor que nada. Por lo que ese mismo día, empezó.

Esa noche, llegó junto con Asher, ambos se miraron y sonrieron.

-Estas llena de harina-Celine se sacudió rápidamente y contestó.

-Por fin pude encontrar un trabajo, ahora podré ayudarte.

Asher sonrió de medio lado, pues aún no le gustaba la idea, pero si Celine era feliz con eso, él lo aceptaba.

Ambos fueron a buscar al bebé que estaba desesperado por ver a su madre.

Celine en cuanto lo vio sonrió y lo tomó en brazos. Aún era demasiado pequeño.

Lo acostó en la cama y se dispuso a ir a la cocina a preparar algo de comer.

Asher observó todo en silencio hasta que la chica hubo terminado.

-¿Cuál es el empleo que conseguiste?

-En la panadería que queda cerca del mercado, es bastante agotador tener que amasar todo el día.

Asher sonrió pues la chica aún tenía vestigios de harina en el rostro.

-Pero tu querías trabajar...-Dijo con tono de reproche.

-Si, y no me arrepiento.

Asher sonrió ante la ocurrencia de Celine y se dispuso a quitar con la yema de sus dedos los restos de la blanca harina que cubrían algunas partes de su rostro.

Y algo pasó en ese momento. Algo surgió dentro de Celine en cuanto Asher acercó su mano a su rostro. Ese pequeño gesto tan simple de limpiar la harina de su rostro, hizo que algo se removiera dentro de ella. Observó fijamente los ojos de Asher, de un marrón claro, jamás se había percatado muy bien de lo llamativo de sus ojos. Observó detenidamente su rostro, la incomodidad en su pecho aumentaba más...

Relamió sus labios, lo que hizo que Asher se pusiera completamente nervioso, pero no se movió de allí. Quería disfrutar un poco más de la situación que estaban viviendo, quiza no tendría oportunidad nuevamente.

Notaba como Celine lo observaba detenidamente, y lo había sentirse más avergonzado, después de unos segundos estaba dispuesto sentarse derecho en su silla, pero la acción a continuación hizo que se quedara estático.

Celine no aguantó un segundo más, sentía que los labios de Asher la llamaban silenciosamente. Un deseo inexplicable de probarlos se sumergió en cada pizca de su ser. No dudo en acercarse, se sentía hipnotizada y con una necesidad de sentirlos...

Se acercó lentamente a él y rozó sus labios. Ese simple contacto duró sólo unos mili segundos.
En ese tiempo su corazón bombeó con fuerza, tanto que sentía que el mismo  saldría de su pecho. Algo afloró dentro de su estómago que la hizo sentir desesperada.

Para Asher era casi igual, su corazón bailaba dichoso dentro de su pecho, y así como el momento vino, fue interrumpido por el llanto de Hayden.

Celine se separó rápidamente y fue a ver al bebé a la habitación dejando a un Asher totalmente perplejo aún sin despertar de su ensoñación. Fue una situación muy extraña, que solo imaginó en sueños.

Tardó muchísimo en reaccionar, y cuando lo hizo luego de unos minutos, Celine venía saliendo de la habitación, ya había logrado que el bebé durmiera nuevamente.

Se había sentido tan bien el contacto con la chica que no pudo aguantar más. Debía hacerlo, ya que ese roce había desencadenado el querer sentirlos nuevamente.

Se puso de pie.

-Solo necesitaba m... - Pero no pudo finalizar ya que Asher solamente se acercó a ella atrayendola por la cintura, besándola.

La perpleja ahora era Celine, la reacción de su amigo la había dejado sin palabras y totalmente sorprendida.

Pero no se alejó.

Debía asumir que el gesto le encantó.
Sentía las manos temblorosas del chico, lo que le gustó.

Asher se separó, observándola, como si estuviera esperando a ver su reacción, un indicio que le dijera que podía volver a hacerlo. Añoraba con que Celine quisiera y tuviera tantas ganas al igual que él.
Ella no dejó de mirarlo a los ojos mientras sentía como su corazón saldría de su pecho, ¿Deseaba esto? Pues sí.
No sabía cómo expresar todo lo que surgía por su cuerpo en ese instante, solo sabía que quería más.
Así que no se hizo esperar y lo agarró por la nuca, atrayendolo nuevamente, besandolo de una forma muy intensa que hizo delirar la chico.

Un beso que se volvió rápido, insaciable. Asher no soltaba la cintura de la chica, el temblor de ella la había desaparecido poco a poco, mientras que ella no dejaba de enredar el cabello del chico con sus manos.

Ambos se dirigieron a la habitación donde se recostaron en la cama del chico, sin dejar de besarse aún.

Unos escalofríos recorrieron el cuerpo de Asher, tenía una necesidad enorme que no sabía que podía sentir.

La deseaba, la deseaba completamente.

Pero en ese trascurso, algo lo detuvo.

-No, Celine. - Asher se separó. La chica lo observó confundida con sus labios completamente rojos.

-¿Qué ocurre?

-No quiero que las cosas sucedan así, yo quiero ir en serio contigo, y además, Hayden esta a nuestro lado.

Celine observó las facciones de Asher, notaba su preocupación y comprendía todo este sentimiento que emanaba del chico.

Por lo que asintió comprensiva.

-Esta bien, Asher. Hagamos las cosas bien...

Asher sonrió con más tranquilidad, trató de controlarse antes, no dejando que se notaran las ganas que tenía de hacerla suya, por lo que salió un momento a tomar aire e intentar calmarse. Y luego de unos minutos volvió dentro. Observó a Céline quien lo esperaba ya recostada en la cama. Él sonrió acostándose a su lado, atrayendola a su pecho, donde después de unos minutos, ambos se quedaron dormidos, sintiendo el calor del otro.

Fue bastante extraño, en ningún momento supieron que ese sentimiento surgiría, al menos de parte de Celine.

No tenía claro que sentía en realidad, pero se sentía cómoda y le gustaba y Asher le daba una tranquilidad que jamás en su vida había sentido.

Un Secreto Imposible Donde viven las historias. Descúbrelo ahora