4 años atrás
Era 2 de abril, el cumpleaños número 15 de Hidan. Para él ya ni siquiera era una fecha que pudiera celebrar, solo le mostraba que era otro año en el que sufrirá en su estadía en el prostíbulo. Sus compañeros le festejaron en la mañana y estuvo todo el día descansando... Hasta que llegó la noche.
Solo por ser un día tan especial, sus jefes le dejaron salir y no trabajar ese día, por lo que el menor aprovechó y salió a comer por ahí con las propinas que había recogido esos últimos meses. Se alistó, se puso su mejor ropa y se arregló lo mejor que pudo, esa libertad temporal que le prometieron era lo único que lo mantenía con una sonrisa en su rostro desde que despertó.
Ya a eso de las 7 de la noche, Hidan había terminado de cenar en un restaurante de comida rápida muy popular en esa zona, estaba feliz y después de comer un helado, tenía pensado volver al burdel a llevarles algunos dulces a sus amigos... Lastimosamente no volvió al burdel con esa misma sonrisa.
En la actualidad
- ¿U-un hijo? -
El peliblanco no pudo evitar sentir vergüenza y solo pensaba en que Kakuzu ahora tenía algo más por lo que juzgarlo, como autodefensa, se cubrió en su totalidad con la sábana y empezó a llorar para si mismo.
- Perdón Kakuzu... Lo último que quería hacer era ocultarte algo tan importante.... Solo no quería que me vieras de esa forma, como ahora - Dijo entre lágrimas y evitando que el contrario le quitara la manta de encima.
- ¿De que forma? ¿De verdad crees que te miraré diferente solo por esto? - No hubo respuesta alguna, solo suspiró - Solo estoy sorprendido... Pero no estoy enojado Hidan, no hay ninguna razón para que lo esté - Tocó la espalda del peliblanco aún escondido en señal de apoyo - Y no tienes que disculparte... Debes dejar de hacer eso -
- P-pero -
- ¡Nada! Nada de lo que pasa es tu culpa ¿Si? No tienes que pedir perdón por todo - El moreno abrazó a su amigo que parecía una bola de masa acurrucado en la sábana.
Hidan quedó un momento en silencio y empezó a llorar con más fuerza soltando todo lo que tenía acumulado, lloró y lloró hasta que decidió salir de su "espacio seguro" y abrazó a Kakuzu directamente. Ya tranquilizado decidió hablar seriamente y dejar de lado su temor.
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.Ambos compañeros discutieron todo lo que faltaba en su historia. Hidan contó con detalle lo que le pasó en esa época, Kakuzu solo lo escuchaba atentamente mientras trataba de calmarlo y hacerlo sentir cómodo.
Ambos durmieron juntos esa noche, al día siguiente Kakuzu no fue a trabajar y también evitaron cualquier tipo de visita, convirtió de la casa su nuevo lugar seguro mientras se aliviaba de la culpa y los malos pensamientos.
El moreno le prometió crear un plan a largo plazo para que el menor tuviera un buen futuro y recuperara a su hijo.Desde ese momento, cualquier distancia que hubiera entre ambos, había desaparecido; el menor si resultó encontrar un gran apoyo en Kakuzu, así como este con el contrario... Aún faltaban muchas cosas que afrontar y explicar, pero en definitiva, habían logrado un gran avance y Hidan volvió a tener interés en recuperar a su bebé, aún si creía que era muy tarde, ya no iba a retroceder.
...Supongo que el sufrimiento es una buena forma que conectar con alguien más...
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ₓₓ Eʀᴇs ᴅɪғᴇʀᴇɴᴛᴇ ₓₓ Kakuhidan
FanfictionHidan es un omega de 19 años de edad que ha trabajado en un burdel los últimos años de su vida, cualquiera que lo viera lo juzgaría, pero para el ahora es cuestión de sobrevivir día a día con lo que puede. Saliendo de su "trabajo" una noche, su cel...