ᴜsᴀᴍᴇx (ᴅᴀʀᴇ)

47

"¿Cariño?." Porfavor despierta... I don't want you to leave me alone...

El estadounidense estaba realmente preocupado su amado había quedado inconsciente, no importaba el dolor qué sentía en el hombro por la bala, si no qué esa bala de había atravesado el pecho a su amado ¿Una vida sin el? No tendría sentido vivir. Realmente necesitaba al mexicano.

No quería qué las cosas fueran como antes, sólo quería pasar tiempo con el, el resto de su vida. Estuvo al pendiente las 24hrs, el mexicano desafortunadamente estaba inconsciente ¿Habría llegado al estado en coma? Los doctores no sabían cómo explicarlo parecía qué si, un tal vez. Así hacían qué el estadounidense se preocupase más por el latino.

"I need you."

Onu y Canadá conversaron mientras veían al estadounidense tumbarse más de lo qué ya estaba, las cosas estaban saliendo bien pero, el estúpido del ruso tenía qué arruinarles la fiesta. Odiaba al ruso con toda su alma. "Damn Russian."

Onu y canda le escuchaban en ocasiones maldecir al ruso, no podría comer, no podía dormir hasta qué su amado mexicano despertara. No sin antes una noche fue a un departamento ¿A qué? A arreglar cuentas con el ruso.

Claro qué ninguno de los dos se dirigió la palabra, mientras se tenían uno al otro, frente a frente, mientras el ruso tenía una lesión en la espalda gracias a ONU, el Americano tenía un brazo lástimado, Claro qué ambos no tardaron en encontrar sus puntos débiles, ambos se lastimaron cayeron al piso después de unos buenos golpes y arañazos cómo si se trataste de dos gatos muy enojados.

"глупый гринго."

"yo lo amo no te puedes quedar con el... El es mío."

"mira estoy hasta el cuello, dejaré qué México decida entre tú y yo."

...

Una semana después el doctor le dio buenas noticias, México había recuperado la conciencia, se encontraba algo débil pero afortunadamente se sentía mejor, lo habían operado. Cosa qué alegró mucho al estadounidense, se sentía aliviando por nuevamente tener una oportunidad de estar con el amor de su vida, está vez quería hacer las cosas bien, cuidar bien de México y amarlo cómo nunca.

Cosa qué lo cambio por completamente, la mayoría del tiempo se la pasaba con el mexicano, su hermano Canadá lo noto, era lindo pero demasiado empalagoso. Mientras usa tuviera oportunidad, estaba ahí para México.

Para México era extraño y a la vez algo vergonzoso, su futuro esposo era demasiado para el. México suele ser cariñoso pero no demasiado...

"Hey usa ¿Qué haces por qué comes tan rápido?." Dijo el canadiense.

"Tengo qué ir a ver a mi mexi."

"Esta bien pero tranquilo te puedes ahogar con toda esa comida."

"Lo siento no quiero llegar tarde."

El estadounidense termino su desayuno para después ir al hospital y ver a su amado mexicano. Cuándo llegó se sentía reglamente triste al ver al mexicano durmiendo débilmente, El doctor había dicho qué no tenían por qué preocuparse “Pero una bala es una bala, no es cualquier cosa". 

Pasaron unos cuentos días México en ocasiones despertaba, no duraba mucho despierto, sentía un fuerte dolor en su herida. Aún así el estadounidense no perdía e tiempo con sus papeleos está vez estuvo ahí para México día y noche, si no estaba el por algún asunto urgente, dejaba al cuidado a Onu o al canadiense.

“Quiero mejorar, quiero ser mejor para ti México". No podré ser un país tan apuesto pero quiero estar contigo y ayudarte siempre.