15.

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Un augurio de esperanza cercana.

Louis sabía que quizás debió haber llamado la mañana siguiente. No lo hizo sin embargo.

No sabe si es porque esperaba que Harry lo hiciera de nuevo o por su simple espíritu de procrastinación, quizás sea un poco de ambas.

Mientras los días pasan, la mirada triste que Eve le regala se dispersa un poco más y tristemente Louis comienza a creer que ya es demasiado tarde para arreglar los platos rotos que él mismo rompió.

Y está bien, cree.

Justo ahora tiene poco tiempo para preocuparse por un corazón lastimado cuando tiene tanto trabajo por hacer, más cuando solo faltan algunos meses para que Louis por fin ocupe el puesto de gerente ejecutivo.

Pero todo es cambia una mañana mientras se dirige al trabajo.

Louis aparca –ahora- en su habitual lugar de estacionamiento. Su padre, quien por fin parece haber renunciado un poco a su apego, le ha estado prestando el automóvil de su abuelo para que pueda trasladarse más cómodamente.

Él sin duda lo agradece, más porque ahora si va tarde no tiene que volver a usar la skateboard como medio de transporte. Está un poco viejo para eso, cree.

Apaga la radio, sale del coche y una vez que se asegura de que este está asegurado, camina hasta la puerta de entrada de la empresa.

Está un poco cansado. Su horario de sueño es un completo asco y si es completamente honesto, no ha tenido un buen desayuno en un buen tiempo. Por eso cuando el primer flashazo se hace presente, Louis cree que quizás está a punto de desmayarse o algo por el estilo.

— ¿Eres Louis Tomlinson? —pregunta un joven acercándose a él con una grabadora en mano.

— ¿Qué?

Responde confundido, viendo a una pequeña multitud de no más de siete personas que parecen tener diferentes cámaras, todas dirigidas a él.

— ¿Es cierto que tú y Harry Styles están saliendo?

— ¿Desde hace cuánto? ¿Es una relación seria o solo es pasar el rato?

— ¿Qué opinas de las fotos que salieron de ti y Harry el pasado fin de semana? ¿Sabías algo de Amanda Tenjford?

— ¿Fotos?

Pregunta aturdido entre la magnitud de cuestionamientos que le hacen sin parar, incluso está seguro de que ha escuchado si es verdad que Harry y él están comprometidos.

Louis en realidad es bastante inteligente, pero justo ahora siente que es un completo idiota por no saber qué está pasando. Antes de que pueda cometer una estupidez, por las puertas de la compañía sale una Eve fastidiada.

— Muy bien, eso es todo —Dice—. Aquí no hay nada que documentar, señores. No me hagan llamar a seguridad.

Eve toma a Louis por la espalda y lo hace caminar hasta zona segura. Aun puede escuchar el viroteo de su nombre detrás de él y es simplemente confuso.

— ¿Qué está pasando? —Pregunta casi en un susurro.

— ¿Vives debajo de una piedra? —Responde su amiga—. Me sorprende que no lo sepas, Lou. Aún más considerando que tus bellas hermanas son la fiebre de la adolescencia.

— Eve.

La chica suspira, detiene sus pasos y luego lo mira.

— Una estúpida revista de titulares amarillista subió un artículo sobre ti y tu supuesta relación con Harry —responde cautelosamente—. No tuvo mucha atención, en realidad, hasta que subieron fotos a su sitio web.

La Belleza del Caos ➵ Larry's VersionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora