23.

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La belleza del caos. 

Louis está vibrando de la emoción cuando faltan solo un par de minutos para empezar. La gente ya ha estado entrando al recinto y si antes el caos ya existía en el área de maquillaje, ahora es mil veces peor.

— ¡Dos minutos! —Grita Francis, encargado de la organización—. ¡Todos preparados!

Las modelos ya están formadas en su sitio junto a la puerta que conecta al gran escenario, personas a su alrededor dando los toques finales.

La música del recinto suena con fuerza y la emoción de la sala es sorprendente. Los gritos de ánimo se escuchan por todo el lugar y aunque siente un dolor de cabeza golpearlo ligeramente, se siente increíble.

Está aplicando rubor sobre una de las modelos cuando escucha el abrir de una batería y lo remates que está hace mientras una guitarra eléctrica se le une con agilidad. Suena increíble.

Siente la adrenalina subir, entonces la entrada se abre.

— Estás lista, amor —Louis dice con una sonrisa.

— ¡Gracias!

Responde la chica, está nerviosa. Louis lo nota por la forma en que sacude sus manos repetidamente.

— ¡Vas a lucirte allá fuera, cariño!

Le dice, intentando apoyarla. Ella lo mira y asiente alegre, un chillido alegre sale de sus labios y por último una risa.

— ¡Estoy muriendo ahora mismo!

Louis se ríe. Quiere decir algo más pero no puede hacerlo cuando todas las chicas comienzan a animar a la primera modelo en línea. Entonces escucha el fuerte anuncio de Francis y es el comienzo:

— ¡Ahora, ahora!

Louis puede escuchar los fuertes gritos al exterior. Su vista se posa en la televisión dentro del lugar, la toma es clara. Con la chica caminando por la mitad de la gran pasarela mientras una banda de cuatro personas toca detrás de ella.

Y entonces, un segundo después Harry aparece en la pantalla. Su atención hacia el evento queda en segundo lugar cuando lo mira subir confiadamente al escenario. Lleva un micrófono negro en una mano y la otra está ligeramente debajo de su pecho con clase. Hay una sensación sobre él que Louis desconoce, es extraño, porque es obvio que conoce a Harry pero presenciarlo en lo que parece ser su faceta de artista es algo completamente diferente.

Sonríe inevitablemente cuando lo ve hacer una sutil reverencia hacia la modelo que camina de regreso hacia él y solo ahí su voz toma el protagonismo de todo el lugar.

Louis se recuerda que debe trabajar y termina siendo inevitable no ver la pantalla mientras revisa a las chicas que están por salir.

Jamás lo había visto en vivo, así que es una experiencia nueva verlo adueñarse del escenario con tanta facilidad y por un momento está completamente seguro de que Harry nació para eso. El orgullo se presenta una vez más y lo resguarda hasta el final de su presentación con una sonrisa suave.

Solo vuelve a ver a Harry cuando el cuarto bloque de cambios comienza. Entrando por la puerta con esa gran presencia suya y aunque conserva el traje, el saco ha quedado olvidado. La camisa rosada que deja al descubierto está vez está arremangada por encima de los codos y su cabello está ligeramente despeinado. No sabe cómo es ese sutil cambio lo hace lucir aún más atractivo, pero lo hace.

Por esta vez, Louis deja que Harry sea el que se acerque. No por soberbia, dignidad o lo que sea. Es más el hecho de que justo ahora la gente se acerca a él para felicitarlo alegremente y claramente él no va a entrometerse en eso. Así que se concentra por el momento en terminar su trabajo, dando los últimos toques de brillo en el rostro de la modelo.

La Belleza del Caos ➵ Larry's VersionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora