'¿En qué se parecen?'
Ya febrero, el primer lunes de febrero también era sinónimo de la primera junta de ese mes. En todo ese tiempo México en ningún momento le dirijo la palabra a su padre España, y esto ya estaba hartando al europeo, sentía que ese berrinche de niñito ya estaba se pasaba de más.
Quería provocar a México para que al fin le dijera algo, por eso se espero a que ONU le pidiera hablar de algo -señor España, entonces sobre esto, nos puede dar una mejor explicación- España sonrió victorioso, se levantó de su lugar -yo no podría ONU, pero mi hijo mayor sabe mejor sobre esto-
-well, hijo mayor de España- habló a México, no le contesto ni lo regresó a ver -hijo de España- de nuevo, ninguna respuesta -¡México!-
-oh, ¿qué paso ONU?- preguntó con una sonrisa que trataba de ocultar su disgusto -te estuve hablando-
-lo siento ONU pero yo no soy hijo de España, si soy hermano de los demás latinoamericanos de segunda generación, pero no soy hijo de España, soy hijo de mexica, yo nací sin padre- al español le dolieron esas palabras, y por su parte México solo sonreía, ONU no comprendía del todo que estaba pasando. Rusia trataba de evitar meterse al conflicto haciendo garabatos con una lapicera.
Con el enfado en la garganta fue inevitable hablar para España -¡Malcriado Nueva España! Estáis llevando muy lejos este berrinchito tuyo, ¡no seas infantil!, A veces realmente me preguntó si de verdad eres mi hijo, eres arrogante e infantil-
El mexicano seguía con esa sonrisa, no quería hacer un show enfrente de todos como los que le encanta hacer a su padre, no lo quería hacer por unas cuantas razones, primero, sus hermanos lo verían perder la postura, segundo, no le gustaba que hablarán de como la "unida" familia latina era separada por un berrinche del hijo mayor, tercera, Rusia le haría de segunda si se pelea, no estaba del todo mal el último punto, solo que Rusia era de golpes, no quería luego que se metiera en problemas.
Rusia seguía haciendo garabatos tratando de no explotar, España seguía hablando mierda de México y el mexicano seguía sonriendo esperando que España terminará.
El de sangre mexicana se repetía una y otra vez que no debía ceder, que si lo hacía solo se rebajaría a su nivel, ya ni siquiera escuchaba nada de lo que España le decía, solo escuchaba como un murmullo lo que eran gritos, como si estuviera silenciado el mundo, pero una cosa lo saco de ese trance.
En una de sus manos que estaban puestas en el escritorio sintió como si le cayera agua, luego vio como todos sin excepción miraban entre asustados y sorprendidos a su lado izquierdo, es decir, dónde estaba Rusia. Por inercia regreso a ver a dónde todos observaban, y miro como todo el escritorio se mancho de una tinta roja, por un momento se asusto, pero sintió alivio al ver que Rusia solo había roto su lapicera.
Al parecer la paciencia de Rusia había llegado al límite, dejo de lado el resto de lapicera puso ambas manos en el escritorio impulsando a levantarse en sus ojos negros se veía que se molestó con alguien en específico.
Alemania reconocía esa mirada y sabía que ya no se podía hacer nada ante ese enojo, se limitó a observar a su alrededor para ver quién podría ayudar a detenerlo a la fuerza. Sin embargo toda su teoría se fue al carajo -Rus, siéntate- de forma casi automática Rusia respiro profundamente para tranquilizarse y acto seguido tomó asiento, México vio el desastre de la tonta, dejo de fingir la sonrisa para verdaderamente reír.
Dejó de lado el que toda la atención estaba en ellos para sacar un pañuelo y ayudar a limpiar ese desastre, así como empezó esa discusión, así terminó, de la nada.
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Del río
RomansaUna noche como cualquiera, una cara bonita y una bebida en juego ¡Un beso no se le niega a nadie! Hasta que de das cuenta que besaste a quien menos debías. [Rusmex]