CAPITULO 2: ¿A Donde Estas?

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Han pasado meses desde la ultima vez que lo vi en aquel cumpleaños, ya no sabía nada de él, lo empecé a olvidar, a aceptar que ya no lo iba a volver a ver más, iba al gimnasio y ya no estaba, quedaba con los amigos de Nora que se suponía que también eran sus amigos y tampoco estaba él, así que me rendí, empecé a hacer mi vida normal mientras que el de vez en cuando se paseaba por mi mente, hasta que recordé que la semana que viene empezaba la feria, no había ni empezado aún y ya estaba agobiada porque no sabía que ropa me iba a poner, también recordé que había quedado también con los amigos de Nora.

Esa semana me la tire en casa viendo pelis y aburrida hasta que se me ocurrió la valiente idea de buscar al chico por redes sociales, es que ¿como no se me había ocurrido antes? busque al amigo de Nora por instagram ya que a él si lo conocía más de vista ya que había quedado un par de veces con ellos y me metí en su seguidores, por suerte seguía a poca a gente, me estuve fijando muy bien en las fotos de perfil y por suerte lo encontré, Ryan, Ryan Low, su nombre era hermoso, le seguí y me siguió de vuelta y ahí quedó todo, al menos tenía una red social suya y podía saber algo de él.

La semana paso y ya era el día de feria, me puse un bonito vestido blanco y me maquillé, no me hizo falta plancharme el pelo ya que lo tenia liso naturalmente así que me lo deje a lo natural.

quedamos todos en un sitio donde se encontraba un poco antes de la feria y ahí vi a Nora y a todos su amigos por desgracia no vi a Ryan, saludé y nos dirigimos hacia la feria.

Dimos una vuelta viendo las atracciones mientras comíamos algodón de azúcar y sobre las dos de la noche entramos a una disco que estaba estacionada cerca de las atracciones.

Tuvimos que esperar una larga cola pero mereció la pena porque Ryan y yo cruzamos miradas solo por unos segundos, el estaba en la misma que yo pero estaba con otro grupo de personas que todos de ahí eran los que estaban en el cumpleaños, nose porque no se juntó el grupo pero en fin estábamos separados y sólo lo vi unos segundos, esos segundo hicieron que esa mariposilla revoleteará de nuevo.

sobre las ocho de la mañana me fui a casa agotada, caí redonda en la cama y por desgracia me levanté a la noche, me tire la noche viendo pelis o con el móvil haciendo cualquier cosa, una de ellas viéndole el perfil a Ryan.

Los días pasaron y poco a poco fui cogiendo la rutina de nuevo, solía acostarme tarde y debía dormirme temprano y levantarme para acostumbrarme ya que en unos días empezaba el insti, tenia miedo y angustia ya que no sabía si Nora y yo caeríamos en la misma clase, aunque no me lleve genial con ella y tengo aceptado de que no es muy buena amiga por los comentarios que hace, es la única amiga que tengo si se puede llamar así.

La mañana que entramos me costó muchísimo trabajo dormir y levantarme, tenia pensado ponerme un top sin tirantes negro y unos vaqueros azules con las converses negras y eso fue lo que me puse, para el primer día no estaba nada mal, a Nora y a mi nos asignaron el aula quince y nos quedamos un buen rato buscándola hasta que la encontramos, como no llegamos tarde y como fui la primera en entrar me regañaron a mi

—¿Tú eres Jade Fielder cierto?

—Si señor— Respondí tímidamente

—¿Me podríais explicar a qué se debe la tardanza y más hoy, el primer día?

—Lo sentimos, estábamos buscando el aula y no la encontrábamos—Respondió Nora como si nada
estuviera pasando

—Que no se vuelva a repetir, Fielder siéntate al lado de Low y tú amiga que se siente en el sitio libre que queda adelante.

cuando escuché el apellido de Ryan, Ryan Low, pensé que esto era un sueño y acababa de despertar, me quedé segundos que parecieron largos minutos mirando el lugar donde el estaba mirándome a los ojos y nose como tuve la valentía de empezar a caminar hacia el lugar, una vez estando sentada su olor a tabaco mezclado con colonia de hombre me hipnotizó, odiaba el olor a tabaco pero su olor a tabaco era diferente me encantaba era un olor que tenia único hasta que su voz me hizo salir de mi mente

—Buenos días ¿Fielder si no me equivoco?

—Ese es mi apellido, llámame Jade mejor—Respondí amablemente

—Yo soy Ryan no se si sabras—Dijo con una hermosa sonrisa

—Ah si te vi un par de veces en el gimnasio y en algunas fiestas que hemos coincidido —Dije casi tartamudeando

—Si yo también te vi a ti

Le di una agradable sonrisa. Las horas pasaban muy rápido estando a su lado, aunque no habláramos mucho hasta que iba llegando la hora de desayunar, todos se dirigían hacia la cafetería pero los dos nos quedamos en el sitio.

—¿No desayunas?

ahí yo morí, me dio la sensación como que se preocupaba por mi o nose pero este chico me estaba volviendo loca realmente

—Me e traído desayuno pero no me apetece comerlo, ¿y tú?

—A a mi se me olvidó traerlo así que iré ahora a casa a desayunar y a la siguiente hora volveré ya que mi casa queda cerca del instituto

—Que suerte, yo no podría hacer eso ya que mi casa queda bastante lejos del insti, debo salir unos veinte minutos antes para llegar aquí bien

—¿Donde vives tú?

—En la plaza Nahia ¿y tú?

—Vaya si que queda lejos, yo vivo en la calle Terán

—Que suerte—Dije medio sonriendo

—Bueno voy a desayunar y en la siguiente nos vemos, hasta luego

—Hasta luego—Dije hipnotizada con su hermosa sonrisa.

Nora que estaba delante mío estaba todo el rato mirando hacia atrás y mirando súper mal, ya me estaba incomodando pero no le estaba haciendo caso porque estaba atenta a Ryan.

Ella se giró y se puso a imitar el momento en el que nos dijimos "hasta luego" sonriéndonos

—¿Que te pasa?—Dije bastante molesta

—Nada imitando lo tonta que parecías

—Tonta pareces tú te crees que no me e dado cuenta de la manera en la que lo mirabas después de haberme dicho que te parecía horrible, valiente hipócrita

—Nada que va, solo que ahora que lo visto de más cerca no parece tan feo

—No si ya me e dado cuenta.

Se creía que no la conocía, que no se como actúa, seguramente Ryan le guste a ella y por eso está actuando así de imbécil.

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