Destino

CAPITULO 5: Vacía

Eran las siete de la madrugada ya no aguantaba más el dolor de tripa que tenía, no pude dormir ni tan solo una hora del dolor que me entró anoche de repente, no sabía si había comido algo si era algún virus o cualquier otra cosa así que me tome una pastilla y decidí tumbarme una media hora más para haber si hacía algo mientras me hacía masajes yo misma; Parecía que el dolor disminuía pero aún seguía ahí, decidí aprovechar ahora que no me dolía tanto para prepararme e irme al insti.

Cuando llegue Ryan no estaba y me desanime ya que con tan solo verlo me conformaba.

La hora tan pesada de primer idioma se hacía eterna menos mal que a la siguiente tocaba educación física; Cuando el timbre tocó recogí mis cosas y me tope con Nora, la verdad no me apetecía hablar con ella pero en su rostro parecía que tenía que decirme algo.

—Ya se que tienes algo con Ryan, Jade

—¿!WHAT!? Que estás diciendo yo no tengo nada con Ryan

—Si ya te e visto un par de veces hablando con el a solas y se nota el feeling, la manera en que lo miras y sonríes, Jade no soy imbécil

—Mira Nora lo primero no tengo nada con el, es la segunda vez que lo digo y no lo diré más y segundo lo dices como si estuvieras molesta como si fuera tú novio y yo te lo hubiera robado, es que no entiendo porque últimamente actúas así.

—No, ¡que va!, pegáis mucho—Dijo con mala cara mientras se reía burlona y se iba

—Se notaba muchísimo lo que pasaba pero prefiero olvidarlo.

me dirigí hacia el campo donde practicábamos educación física y por fin lo vi a él, mis ojos empezaron a brillar, mi corazón latía demasiado rápido y mis labios se estiraban lentamente dando una bonita sonrisa, el no me miraba o no me había visto aún pero durante la hora se estuvo acercando aunque no hablamos nada, si hubo un par de miradas pero nada más, yo me moría de ganas por hablar con él pero era tan difícil.

Al entrar en clase quería que la tierra me tragase, tenia puesta una sudadera negra y de bajo un top blanco, al hacer educación física me entró la calor y me quedé en top pero claro todas las pelusas de la sudadera de quedaron en mi axila por el sudor, haciendo ver que mi axila se viera completamente negra y ahí entendí que las miradas de Ryan no era hacia a mi eran hacía mi axila, dios me quería morir en ese momento que vergüenza.

El día paso muy lentamente ya que sin conversar con el se me hacia muy largo el día.

En la salida estuve la mitad del camino con Nora y sus amigos, y uno de ellos me dijo:

—Oye ya que el miércoles no hay instituto por la obra que están haciendo al lado, ¿porque no vienes el martes por la noche a mi casa? estaremos haciendo una fiesta.

Mi único pensamiento era en que si Ryan asistiría, pero algunas veces pensaba que si que seguro que iría y otras me desanimaba y pensaba que no ya que la mayoría de cosas que hacemos nunca asiste, tampoco es que el sea tan amigo de los amigos de Nora pero ¡ay yo que se! podría visitarlos de vez en cuando, sólo lo veo en el instituto y a veces ni nos dirigimos la palabra.

—¡Jadeee! espabila

—¡Ay si dime!

—¿Martes por la noche, fiesta en mi casa?

—Ah si si pero ¿Quién ira?

Decidí preguntar para sacarme las dudas más rápido. Pero antes de que me respondiera Nora interrumpió

—Ella lo que quiere es que invites a Ryan

¿PERO QUE HACE? OS LO JURO QUE ESTABA APUNTO DE MATARLA pero mantenía la calma

—¿Si?, si quieres le digo que venga

Osea que no estaba invitado, con eso me lo ha dicho todo

—No, no te preocupes, la pasaré bien igual (mentira, estaba rezando para que lo invitara)

Cuando llegue a casa comí macarrones con queso y tomate y me fui directamente a la cama, no tenia pensado echarme una siesta porque sobre las siete de la tarde debería de ir al gimnasio pero caí redondo en la cama, de todas formas cuando me levante sobre las ocho me vestí rápido y fui.

Sentía que me hacía falta algo no sabía el que pero eso hacía que me sintiera vacía, mi mente no paraba de dar vueltas mientras el sonido de la música penetraba en mi odio y mi cuerpo se cansaba cada vez más.

—Oye,  ¿vas a la fiesta que vamos a hacer los del gimnasio?

Hablo un chico atractivo pero mucho mayor que yo

—¿Que comida?—Dije bastante confundida

—Todos los del gimnasio vamos a hacer una fiesta  en una casa lujosa cerca de aquí y hay cocineros haciendo muy buena comida

—Am si, nose ya veré que hago, nose donde es exactamente ni tengo mucha información —Dije dudosa

—Puedes hablarle al entrenador por WhatsApp o Instagram, pero se te ve muy tímida seguro que no vienes—Dijo riendo

—Si claro que iré— Me arrepentí rápidamente ya que no conocía a nadie del gimnasio y tampoco sabía quien me iba a llevar ni a recoger, me estaba estresando pero como me había dicho que seguro que no iba porque era muy tímida pues le dije que si, es igual que cuando te dicen la típica frase de "No tienes huevos".

Cuando termine allí me despedí de las personas de alrededor, recogí y me fui a casa, me seguía sintiendo igual de vacía y aún no sabía el porque, pero el pensar de que él martes por la noche, ósea mañana, tenía también una pequeña fiesta y el sábado de dos semanas también me motivaban algo ya que casi siempre solía estar en casa porque no tengo muchos amigos y tampoco me salían planes que hacer y ahora que me estaban saliendo planes ¿porque rechazarlos? bueno en fin el único problema que tenía era eso que en la fiesta de allí no conocía a nadie y no tenía a nadie con quien ir y tampoco tenía mucha información sobre eso y me daba algo de corte preguntar pero bueno ya se verá en estos días.

Al llegar a casa cené filetes empanados que estaban buenísimos y me di una relajante ducha caliente para luego hacer un trabajo de literatura que tenía justamente para mañana, Jade como no siempre todo para última hora.