CAPITULO 3: El Silencio Dice Mas Que Mil Palabras

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Todo iba bien, el feeling entre Ryan y yo aumentaba cada día más hasta que descubrí que Nora, como no, hablo en privado con nuestra tutora para que cambiara a Ryan de sitio ya que le molestaba que habláramos tanto, y eso hizo, lo cambio, nuestra comunicación se complicaba cada vez más yo no sabía que excusa poner para acercarme y las veces que hablábamos era porque el daba el paso, la verdad me frustraba mucho que Nora hiciera eso porque todo estaba fluyendo tan rápido con el y ahora todo se estaba yendo un poco a la mierda, de todas formas alguna que otra vez me sentía positiva ya que pensaba que al menos dábamos la mayoría de clases juntos aunque cada uno esté en una esquina de la clase y alguna que otra vez hablamos, ese feeling se mantenía aún pero yo como no siempre quiero más, también me mantenía positiva por que pensaba que si la vida lo quisiera para mi lo metería en mi vida si o si, pase lo que pase y si no será porque no sería el indicado.

Y también pienso que me estoy montando un poco la película a lo mejor el solo está siendo amable conmigo, PERO ES QUE LA MANERA EN LA QUE ME MIRA NO ME DICE LO MISMO.

Era cuarta hora, después del recreo y la mayoría de gente se queda más de la cuenta en el patio pero yo y Nora nos quedamos aún más de lo que debíamos.

Cuando entramos todos estaban sentados y no quedaban apenas sitio, éramos 54 personas en esa clase no era normal, pero por suerte quedaban solo tres sitios libres, una mesa al lado de la ventana, otra al final al lado de la puerta y otra al lado de Ryan, fui egoísta y pensé en lo que hizo Nora así que pensé sentarme con el, Nora estaba juntando la mesa de al lado de la ventana y la del final para sentarnos juntas pero yo mientras me dirigía hacia el sitio libre que quedaba al lado de Ryan le dije que me iba a sentar con el, ella solo me miró mal y yo le dije un falso "Te quiero" para que no se enfadara tanto, pero es que me molesto mucho lo que hizo así que cogí y me senté a su lado, después me sentí un poco mal porque ella no se sentó con las demás chicas, se quedo sola y eso me conmovió un poco, pero bueno que no le hubiera dicho eso a la profesora.

La hora a su lado se me hacía mágica, su presencia y su mirada apuntando hacia a mi todo el tiempo, aunque yo no era capaz de mirarlo a no ser que  me hablara.

—oye ¿No tienes calor con esto?— Dijo tocando mi brazo lentamente

— La verdad es que si pero no me gusta la camiseta que llevo debajo de la sudadera— Reímos ambos

Aquella hora la aproveche como nunca ya que sabía que no iba a tener la oportunidad de sentarme a su lado muchas veces.

La hora desgraciadamente termino, yo obviamente no copié nada de lo que estuvimos dando en esa hora así que se lo pedí a Nora, ella no me lo quiso dar ya que estaba enfadada por haberme ido a sentar con Ryan y no con ella, ella no sabía que yo sabía que ella le había dicho a la profesora que cambiara de sitio a Ryan para que no estuviéramos juntos así que tenia más la oportunidad de hacerse la víctima.

Terminando la hora siguiente Nora le dijo a la profesora si podía sentarse delante de Ryan porque no veía bien la pizarra, mira que había sitios libre pues ella se sentó en el sitio delante de Ryan, eso me dio muchísimo coraje así que tenía que pensar en hacer algo para quitarla de ahí, siempre me lo fastidiaba todo.

Los días pasaron y Ryan siguió en la otra punta del salón y Nora delante de él intentando llamar su atención siempre, yo estaba sentada con otra compañera de clase, aquel día sólo me dijo una frase lo cual si me decepcione un poco porque yo quería tener más trato con el.

—Oye jade

—Si, dime, ¿Que pasa?—Dije acercándome a su sitio ya que quedaba en la otra esquina del salón

—¿A ti te toca informática verdad?

—Si, cuando a mi me toca informática a ti te toca clase de segundo idioma en este aula.

Se lo dije con una amable sonrisa pero por dentro estaba que quería llorar pensaba que me diría algo nose el que pero me imaginaba que me diría cualquier cosa menos preguntarme sobre la clase tan aburrida de informática.

Pasaron algunos días y todo fueron miradas y pequeñas frases que recordaba todo el tiempo
hasta que una mañana en la hora de descanso lo vi venir hacia a mi; Estaba con algunas compañeras de clase sentada en unas escaleras donde no se suele poner nadie solo nosotras, Ryan vino y saludo yo salude con un amable "hola" y como mis compañeras ya nos vio hablar unas cuantas veces se creían que teníamos algo.

—Necesito ir al baño, me acompañas tú—Dijo refiriéndose a la otra chica que había.

Yo sabía que lo estaban haciendo a propósito y por dentro estaba que me quería morir.

Ryan y yo nos quedamos solos y fueron los mejores cuarenta y cinco minutos a su lado, todo fluía, no había incomodidad y me sentí súper cómoda con el
por desgracia era viernes y ya no nos veíamos hasta el lunes, espero que se repitan descansos así porque me gusta mucho pasar tiempo con el aunque estemos todo el tiempo callados, me transmitía demasiada confianza y sólo lo conocía de hace algunas semanas, me transmitía algo y eso no pasa con cualquiera..

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