Capítulo 6 Noticia ya esperada.

1.1K 94 1
                                    

Cada día que se la pasaron encerrados parecían estar acaramelados, Sasuke habia tomado la manía de estar siguiendo al rubio por todas partes del departamento, incluso cuando tomaba una ducha, bueno solía quedarse en la puerta para esperarlo, no sabís muy bien porqué, ni cuando era un gato hacía eso.

—¿Sasuke te sientes bien? — preguntó cuando lo vio tirado en el sillón viendo la televisión.

—No, me siento mareado — murmuró mirándolo unos instantes.

El blondo tragó saliva nervioso — ¿Mareado? ¿Desde cuando? — preguntó acachándose frnete a él.

—¿Qué tiene de especial que me sienta mareado? — indagó alzando una ceja confundido.

— No tiene nada de malo — pensó unos segundos en si seguir preguntando o no — ¿Desde cuando te sientes así?

— Unas dos semanas — respondió alzando los hombros como si nada — ¿Por qué?

— Bueno, es que no es normal que te sientas mareado por tantos días — le estaba dando vueltas al asunto — Es posible que estés en cinta ttebayo — miró el abdomen del azabache que seguía confundido.

—¿Crees que voy a tener un bebé —cuestionó sentándose sobre el sillón con las piernas cruzadas — Pero dijiste que aún te falta terminar de estudiar — murmuró algo culpable.

Sabía lo que eso significaba para el rubio, tendía que dejar la escuela para conseguir otro trabajo, sobre todo le explicaría eso a sus padres y Sasuke no los había conocido en persona, solo por teléfono.

— Sasuke no tienes porqué preocuparte de eso — se sentó frente a él igualmente con las piernas cruzadas tomando sus manos — Ya estoy a casi nada de terminar la universidad, no hay problema con eso, en caso de que sea verdad.

—¿Seguro? No quiero que...

— No pasa nada Sasuke; recuéstate un poco — le indicó ayudándolo , esperó a que estuviera quieto y levantó la camisa que traía puesta.

— ¿Qué haces? — intentó sentarse siendo recostado de nuevo por Naruto.

— Voy a revisarte ttebayo — tocó su viente palpando por todas partes, deteniéndose en momentos — Oh...toca aquí — sujetó la mano del azabache y la guió a su abdomen — Presiona un poco — le indicó ayudándolo — ¿Qué sientes?

— Está brincando — murmuró impresionado, formando una pequeña sonrisa — ¿Vamos a tener un bebé? — preguntó sin quitar esa sonrisa de su rostro.

— Parece que sí — respondió mirándolo de una manera encantadora, que lo hizo sonrojar de una manera divertida para el rubio.

— Entonces... seremos padres — trató de confirmar esa idea — Todavía no llego ni a los veinte años, va a parecer mi hermanito — se burló del hecho.

— Cierto... espero que no me metan a prisión por embarazar a un menor de edad — tomó las mejillas del azabache besando sus labios tiernamente.

— Eres mayor por cuatro años Naruto, no por veinte — trató de calmarlo — Además, si te llevaran a prisión iría a verte todas las semanas — le dio un golpe en la nariz.

— Que tierno eres Sasuke — dijo con ironía, esperaba cualquier otra respuesta menos esa.

— Pero ¿es seguro que estoy embarazado? — seguía sin creerle del todo, quizá porque no se lo creía.

—¿Cómo crees que yo, un futuro doctor se va a equivocar? — se ofendió por la duda del Uchiha — Estoy seguro, pero no podríamos ir al hospital normalmente — tomcó su barbilla pensando —No sabemos si tenga orejas como tú, quizá se asustarán, no sé — se dijo a sí mismo.

— ¿Entonces voy a estar escondido aquí hasta que tenga que parir? — cuestionó dejando la mano sobre su abdomen.

— Me temo que sí, pero no tienes de que preocuparte, tengo una prima que es enfermera, ella podría ayudarte revisandote y todo eso — intentó consolarlo de cierta manera.

— Entonces supongo que está bien — hizo un gesto un tanto raro para el Uzumaki que solo rio por ello — Eres un grosero.

— Sabes que te adoro — tomó sus mejillas de nueva cuenta repartiendo tantos besos como podía — Tendremos un hijo mi amor — esa pequeña frase provocó bastante sorpresa en el azabache.

— En ese casi ya no habrá nada de nada — se burló del rostro de Naruto que abrió la boca confundido, sobretodo ofendido por ello — Sasuke no me puedes hacer eso ¿Cómo vamos a pasar de hacerlo todos los días a quitarmelo así como así — se arrodilló suplicándole, dando de golpes a su pecho.

— Tu dijiste hace mucho que si llegábamos a tener hijos debía cuidarme — le dió un par de palmadas en la mejilla como si se estuviera burlando discretamente de él.

— Condenado gato — murmuró en voz baja caminando hacia la cocina , antes de notar las orejas de Sasuke, sabiendo que lo había escuchado a la perfección.

— Así menos — se cruzó de brazos molesto por lo que había dicho su pareja.

— Sasuke.... te hago lo que quieras, pero no me quites los placeres de la vida — casi suplicaba, era capaz de hacer de todo con tal de no quedarse en abstinencia hasta quien sabe cuando.

— Lo pensaré — se acercó a darle un beso en los labios quedando como un pequeño gato negro con un vientre levemente hinchado.

— Sasuke así se te nota tu pancita — se acachó para tomarlo y cargarlo con cuidado, acomodandolo sobre sus brazos como si fuera un bebé — Te ves muy bonito así gordito — sabía de sobra que Sasuke no podía hablar ni nada parecido como gritarle si estaba de esa forma, solo escuchaba sus maullidos.

Si lo pensaba bien, le haría gracia como en un futuro tendría que explicarle a su hijo que su madre era un gato que se convertía en persona a su voluntad, mas o menos.

— Ven, voy a tener que darte de comer más, empezarás a comer por dos — lo acomodó sobre su hombro escuchando un montón de maullidos, como si se estuviera quejando, pero no le haría caso.

El pequeño gato negro se la pasó apoyando su cabeza sobre el hombro del rubio frotándose sobre este con insistencia.

— ¿Cuánto dudará en cinta? ¿Lo mismo que un gato, dos meses o como un humano, nueve meses? — preguntó recargando su mejilla contra la cabecita negra — Una lamida si es como un gato, dos lamidas si es como humano — le indicó recibiendo tres — Eso no me dice nada ttebayo.

Lo tomó por debajo de sus patitas delanteras para ponerlo frente a él — ¿Qué quieren decir tres lamidas? — le dio un beso para volver a ver al azabache de frente a frente.

—Seis meses, eso fue lo que me dijo mi madre — rodó los ojos por la insistencia del blondo — Si, no creo que cambie, mi padre era humano, mamá era la neko — se safó del agarre de Naruto caminando hacia una silla del pequeño comedor, viéndolo desde ahí — Tampoco te puedo decir que será, puede ser un neko o humano, mi hermano era humano y ya ves, yo no lo soy — explicó tratando de hacerle entender, aunque ni él mismo lo entendía.

— No importa si es un neko o un humano, lo que importa es que será nuestro hijo, una pequeña criatura que sea de ambos — lo miró con total devoción y amor, como si no creyera lo que había descubierto hace un poco.

Debía admitir que no le sorprendió en lo absoluto que Sasuke se encontrara en cinta, después de que no salían de la cama y solían hacerlo varías veces a la semana, y todas y cada una de ellas sin protección alguna, quizá algo irresponsable de parte de ambos, sobre todo suya.

Pero no importaba, no se arrepentía de nada y por la reacción de Sasuke, parecía que solo lo estaba esperando.

Sería un nuevo comienzo para ambos, habían empezado por el destino; poniendo al azabache en su vida y ahora, estaba formando una vida junto a él; formando una familia a paso acelerado.  

El Neko del que me enamoré [NaruSasu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora