VI

41 10 3
                                    

Por la noche Jin llegaba a su casa y ahora en lugar de pan traía un poco de dinero, el cuál siempre su familia se lo quitaba.
Antes de que se formarán más problemas Jin bajaba al sótano para dormir, ese oscuro cuarto se había convertido en la habitación de Jin, había un colchón viejo, una pequeña mesita con una vela y una manta, suficiente para pasar un buen rato, según Jin.

El castaño se recostó en el viejo colchón y se tapó con la manta, trató de conciliar el sueño, pero imagenes de aquel pelinegro invadieron la mente de Jin.

- ¿Cómo se supone que deba verte?- susurra al mismo tiempo que se remueve en la cama- Todavía me acuerdo del beso!!!- lo último lo grito en un susurro.

-yo también

Jin se incorporó de un brinco, tomó su zapato y sin dudarlo lo aventó con fuerza a aquella voz.

- Ay otra vez no!!

Namjoon se acercó a Jin y gracias a  la vela se pudo ver cómo el pelinegro se sobaba la nariz.

-Mierda ¿Puedes dejar de aparecer como un maldito psicópata?

-No es mi intención, lo siento

- ¿Qué haces aquí?

- Bueno, quise que fuera como los viejos tiempos -sonrie nerviosamente.

- ¿Viejos tiempos?-alza una ceja.

-Si, ya sabes... -Namjoon se notaba nervioso, mientras hablaba jugaba con sus manos sin hacer contacto visual- Contar historias, leer o simplemente pasar el rato... Juntos.

-Namjoon tengo que trabajar mañana muy temprano y puede que mi familia te descubra - Jin se para del colchón y se acerca a Namjoon - Tienes que irte.

- Oh sí claro -sonrie-lo siento, claro tienes que descansar -suspira- Bueno, nos vemos luego Jin.

-Si... Hasta luego.

Y sin más Namjoon se fue.
Por alguna razón quería alejar a Namjoon, no quería que estuviese en su mismo entorno. Lo que sentía cuando lo veía fijamente era algo para alarmarse, se había dado cuenta de eso cuando ambos tenían quince años.

•••

-Vamos Jin tenemos que ir a ver las estrellas!!!

-shhh te van a escuchar

Ambos adolescentes se habían escabullido entre la oscuridad para adentrarse hasta el bosque.
Namjoon había ido por Jin a su casa para sacarlo de ahí y distraerlo un poco, después de que recibió una golpiza por parte de su padre.

La noche era cálida y mientras corrían por entre los árboles las manos de ambos se entrelazaron inconscientemente, sin embargo sintieron un choque eléctrico recorrer todo su cuerpo.
Corrieron hasta llegar a un lugar del bosque donde se podía apreciar con claridad el cielo, las estrellas lo adornaban hermosamente, mientras el ruido del río fluyendo les acompañaba.
Ambos chicos se acostaron en el pasto, uno a lado del otro, las respiraciones de ambos estaban agitadas por correr tanto y una sonrisa adornaba el rostro de cada uno.

- ¿La luna es hermosa no lo crees? - Dice Namjoon mientras alza su brazo apuntando a la luna- Ojalá pudiéramos verla todos los días.

- ¿Crees que algún día podamos ser libres?, Expresar lo que sentimos realmente, ser nosostros mismos, amar sin miedo...
- mira a Namjoon.

-Amar... -Namjoon toma la mano de Jin y la aprieta suavemente - Entonces hay que crear nuestras propias reglas y amar a quien nosotros queramos.

Namjoon se había acercado bastante al rostro de Jin, sus respiraciones chocaban y sus ojos estaban atentos a los labios del contrario. Se iban a unir en un beso delicado, pero un ruido hizo que ambos pegaran un brinco y se pusieran alerta.

Más allá de lo Prohibido (Namjin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora