Ven conmigo

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El umbral de la casa de Rusia está a oscuras.

Ale- ¿Si estará aquí? Ya llame a la oficina y me dijeron que hoy no fue. ¿Dónde más podría estar?

Toca el timbre. No hay respuesta. Mira a través de las pequeñas ventanas laterales. Oscuridad. Rebusca algo en sus bolsillos.

Ale- ¿Dónde está? Ya la encontré. Suerte que tengo copia de su llave.

El rechinido de la puerta le da la bienvenida.

Ale- Hallo? Russland, ¿estas aquí?

Silencio.

Enciende la luz. Rusia está sentado en el sillón pequeño de la sala. Encorvado, viendo a la nada.

Ale- Verdammt, casi me matas de un susto. ¿Por qué no contestas?

Rusia solo se queda inmóvil.

Ale- ¿Qué te sucede?

Rusia- Lo intente.

Ale- ¿Qué cosa?

Rusia- Le dije a Mexico que dejara a Hungría y viniera conmigo. Me precipite. Yo...

Ale- Ya veo- se sienta en el sillón adjunto-¿Qué te dijo?

Rusia- Me rechazó. Solo quería que estuviéramos juntos, como antes. Y ahora ni siquiera puedo verle de nuevo.

Ale- Lo siento. Aunque es comprensible. Todo es muy precipitado.

Rusia- Fue mi culpa. Fui muy imprudente. Debí dejar pasar más tiempo. Ahora ya no importa.

Ale- ¿Más tiempo? Pero, ¿estamos hablando de la misma persona? ¿Si sabes porque te está rechazando ahora, verdad?

Rusia- Ama a su esposo.

Ale- ¿Qué? No, no eso no es.

Rusia- ¡¿Qué sabes tú?! Él es su compañero, un alfa y ella está enamorada de él. Lo peor es que ese estúpido no la ama. Solo la ve como un trozo de carne. Yo...yo soy un idiota.

Ale- Si, lo eres. Pero por creer tan tontería. Ella te rechazo porque está protegiendo a su padre y a ti.

Rusia-¿Qué?

Ale- Hungría tiene secuestrado a España. No le permite verlo sin que él este informado. La tiene controlada por todos los medios. Y España es su soga al cuello. Por eso te rechazo. Para cuidarte. Blöde Sau.

Rusia- ¿El señor España secuestrado?

Ale- Sí. Hungría lo tiene en estado catatónico según creo. Lo mueve de sitio continuamente, pero lo mantiene vivo. Él es la razón por la cual México se casó con Hungría. Ese hombre es realmente peligroso. Eliminará a cualquiera que intente ayudarle. Ya lo hizo una vez.

Rusia- Ella, ¿ella está cuidándome?

Ale- ¿Tienes cerilla en los oídos o no hablo español? Hay que salvarla, pero para hacerlo necesitamos salvar primero a su padre.

Rusia- Soy un idiota.

Ale- Uno grande.

Rusia- ¿Por qué no me habías dicho esto antes?

Ale- Porque un Blöde Sau no lleva su teléfono consigo.

Rusia- Tengo que irme.

Ale- Ey, a donde...

Pero Rusia pasa a su lado antes de terminar la frase. Alemania solo suspira negando con la cabeza sonriendo.

Al llegar a la casa de México Rusia golpea con fuerza la puerta.

Rusia- Mek, Mexico, ábreme, por favor.

Sigue golpeando.

Rusia- Mexico, no me iré hasta que me...

La puerta se abre.

Mex- Ya deja de golpear. Se oyen tus gritos por toda la cuadra.

Rusia- No me importa, permiso- pasa por un lado de la chica entrando a la casa.

Mex- ¿Qué te pasa?

Rusia queda frente a ella. Esto provoca que México quede de espaldas a la puerta. Retrocede hasta que topa con esta.

Rusia- Tus ojos. ¿Lloraste?

Mex- No, no es nada. Te pedí que no volvieras aquí. Vete.

Desviando su mirada cierra sus ojos fuertemente para evitar llorar de nuevo. Los brazos del chico que la envuelven la sorprenden haciendo que sus ojos se abran.

Rusia- Lo siento.

Mex- ¿Qué? Porque...

Rusia- Soy un idiota. Perdóname.

Mex- Ya te dije mis sentimientos, solo...

Rusia- Se lo de tu padre, lo de España.

Un nudo en la garganta surge, así como lágrimas que amenazan con caer en la tricolor.

Mex- Rusia, yo solo...yo...

Rusia- Perdón, perdóname. En verdad soy el mayor idiota que existe. Yo solo pensé en mis deseos. Nunca me detuve a pensar porque no me hablabas de tu padre. Ni porque eras esquiva conmigo. Solo quería tenerte junto a mí. Lo siento.

El latido del corazón acelerado, su colonia, su fuerte abrazo que le brindaba un refugio seguro. Todo eso en un instante lleno el vacío y alejo la soledad que México sentía. Se sentía segura.

Mex- No tienes que disculparte. Yo solo no quería, no quería que tu...

Intenta hacer distancia, verle el rostro. Pero el abrazo se lo impide. El rostro de Rusia esta recargado en su hombro. Con sus manos en la espalda siente el leve temblor del cuerpo del chico.

Rusia- Perdón, por ser tan egoísta, perdón.

Mex- No, no te disculpes. No has hecho nada malo. Soy yo quien te hirió.

Por fin Rusia muestra su cara. Las lágrimas formaron un casi imperceptible rastro húmedo por sus mejillas.

Rusia- Solo buscabas protegerme. Y cuidar de tu padre. Soy el peor- la tricolor limpia las mejillas con sus manos.

Mex- Claro que no, no sabías lo que pasaba. Pero, ¿Cómo te enteraste?

Rusia- Eso no importa. Es verdad, a lo que vine. Te llevare lejos de aquí.

Mex- No, no puedo.

Rusia- Mek, no te dejare con ese hombre.

Mex- Tengo que quedarme.

Rusia- Bien. En ese caso aquí lo esperare yo también. Si quiero que te vayas tú. No querrás ver como terminara todo.- la expresión del joven se vuelve oscura.

Mex- No, no. Si él te llega a lastimar, yo...yo moriré. No hagas nada. – ahora ella es quien lo abraza. La cara de Rusia se relaja, sonríe.

Rusia- Vámonos de aquí. Encontraremos a tu padre. Se recuperara.

Esas palabras son todo lo que necesita.

Mex- Si, me voy contigo.

Rusia- Andando.

Mex- Eh? Pero mis cosas...

Rusia- Te comprare todo. No puedes permanecer un segundo más aquí.

Mex- Vamos.

En la calle la luna les da la bienvenida a los dos. Parecen como dos enamorados que se fugan en el resguardo de la noche.

La promesaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora