୧ㅤ ۫ ⃝̫ ׅcat꒰ch꒱ me ,, yeongyu ㅤ ͡

✧ . Kitty n' kittens 🐈 ◝

Bienvenidos a K&Ks, tu primera opción para adoptar a un tierno híbrido gatuno, contamos con razas tan diversas y personalidades tan únicas que probablemente sea imposible que te vayas con las manos vacías, somos la empresa de adopción número uno de la nación, y una de las más importantes a nivel mundial, nuestro lema "un dueño satisfecho hace a nuestra empresa feliz" te hará darte cuenta de que nuestro trabajo es siempre dar el mejor servicio. Contamos con escuelas especializadas, hospitales y tiendas de comida para que tu mascota esté siempre feliz y satisfecha.

   —Calle 40B... ¿no es la calle de la casa de Soobin y Taehyun? —Yeonjun sostenía un papel con una dirección anotada en él—. Mataré a Beomgyu cuando lo encuentre, si es que lo encuentro...

   Llevaba un rato caminando, intentando encontrar la dirección, caminó unas cuadras más hasta encontrarse con el imponente edificio, los cristales como ventanas de este le daban un toque completamente futurista, mientras que las pantallas colocadas reproducían vídeos de chicos y chicas gato, en ese justo momento había un comercial de maquillaje para gatos, a Yeonjun le pareció curioso que un chico gato de cabello rosa hable en el comercial en lugar de una chica.

   —¡Doyun no me deja salir! —gritó Beomgyu del otro lado de la línea, ocasionando que Jiho pegue un ligero brinco y se aleje de su teléfono, luego cercó de nuevo su rostro al teléfono.

   —Hablaré con él, déjamelo a mí —el pelirosa escuchó a Beomgyu llevarle el teléfono a Doyun—. Oye, idiota. ¡¿Se puede saber por qué carajo no dejas salir a Beomgyu?!

   —Creo que el señor Park fue muy claro, Jiho —sentenció el contrario, Jiho respiró profundamente, nunca creyó tener que llegar a esos límites.

   —Bueno, creo que a Seojoon le gustará saber de tus encuentros con la secretaria regalada —oyó al contrario tragar saliva, su yo mental hacía el baile de la victoria y se auto-felicitaba por la magnífica jugada.

   —¿Qué quieres que haga?—respondió el contrario después de unos segundos.

   —Me temo que las cosas se puedan poner serias Doyun, y si es así, realmente necesitaré de ti —por el tono de voz, Doyun notó que Jiho estaba serio, que era algo importante, se preguntó cuándo fue la última vez que escuchó al pelirosa ponerse así.

   Yeonjun comenzaba a impacientarse, no podía evitarlo, los nervios eran algo que lo habían atormentado toda su vida, pero habían aquellas situaciones que helaban sus manos y su mente se volvía en blanco, justo como su situación actual.

   Kitty N' Kittens era un edificio realmente grande y muy lujoso situado casi en el centro de aquella gran ciudad, los autos desfilaban en largas y amontonadas filas, muchos entraban y salían del estacionamiento propio del edificio, cualquiera que sea el dueño de la empresa, debía de ser una persona con una gran fortuna, pensó Yeonjun.

   Después de distraerse con los anuncios de chicos y chicas gato para toda clase de productos bajo la marca K&K, siéndole totalmente normal y aceptable que todo, junto al logotipo general, estén plagados de rosa de todos los tonos existentes, decidió entrar. El interior del edificio era completamente blanco: pisos con lozas blancas, paredes blancas, sillones y mesas blancos, incluso el escritorio en el centro (a excepción de sus detalles rosas, y el computador de la secretaria, también rosa). Era como si aquel lugar le recordara que era medianamente pobre.

   —¿Por casualidad... tú eres Choi Yeonjun? —volteó hacia quien hablaba detrás de él, lo primero que vio fueron unos sorprendentemente bellos cabellos naranjas, no era un naranja como el de Jisung, este era más llamativo y a la vez más suave, era rosa como el glaseado de los cupcakes que Minho hacía.

   —Eh... sí, soy yo... espera ¿qué?—el moreno contestó automáticamente, para luego darse cuenta que el chico frente a él lo había llamado por su nombre, al mirarlo más de cerca se dio cuenta que el pelinaranja era el de los comerciales de la empresa, no sabía si sentirse como viendo a una celebridad.

   —Que alivio, en realidad no sé cómo explicarte esto pero yo también quisiera que Beomgyu regrese contigo, el problema es que... —su sangre corrió más rápido al escuchar su nombre, Yeonjun estuvo a punto de tomar al chico por los hombros y preguntarle rápido todo lo que sabía, pero respiró, calmándose a sí mismo. A decir verdad, Yeonjun sabía que el chico frente a él estaba diciendo algo, pero no podía atender muy bien a ello dado al shock momentáneo que sufría—, entonces... ¿qué dices? —fue lo que finalmente soltó el chico, sonriéndole. El chico suspiró, tomó a Yeonjun de la manga del suéter que llevaba, y lo dirigió hacia algún lugar dentro del edificio.