◌●Bajo la ropa◌●

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Estaban dentro de un centro comercial de varios pisos, un shopping que suelen frecuentar para que el albino se compre ropa, para mirar juntos laguna película o directamente para comer y dar unas vueltas en fechas especiales; aniversarios, cumpleañ...

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Estaban dentro de un centro comercial de varios pisos, un shopping que suelen frecuentar para que el albino se compre ropa, para mirar juntos laguna película o directamente para comer y dar unas vueltas en fechas especiales; aniversarios, cumpleaños; ese día era diferente, no hay ninguna fecha especial que festejar, solo es un viernes por la tarde-noche, donde el frio abunda por las calles y los obliga a ir con abrigo pesado constantemente mientras deambulan, cada uno con su estilo claro, un abrigo más largo que el otro. Al igual que todos los comerciantes y personas en general que caminaban por los extensos pasillos, sin prestarles atención.

El más alto de ambos pagaba las entradas mientras el más bajo pagaba los pochoclos y las bebidas para poder ingresar al cine; todo muy normal; una salida normal de pareja donde irían a ver un filme de acción bastante popular entre las personas de su edad, solo que a ellos, en realidad, no les interesaba tanto.

Cuando Gon recibió las bebidas junto al paquete de dulces, un pequeño pinchazo le hizo dar un saltito que casi le hace tirar todo encima del vendedor,

―Lo siento mucho― enojado y sonrojado sutilmente se disculpó con el chico frente a él y las personas detrás por haberlas chocado.

Una vez los trámites estuvieron concluidos la pareja se colocó en la fila de espera, con Killua sosteniendo los copos de maíz bañados en azúcar mientras los comía como si estuviese muerto de hambre; poco a poco avanzaban por la fila, de a uno o dos pasos por minuto.

A la hora de sacar las entradas de ambos para entregárselas al guardia e ingresar a la sala hubo un pinchazo que encorvó a Killua, casi dándole un cabezazo a la mesa donde se encontraba el guardia por lo repentino del hecho,

―Lo lamento, no fue mi intensión― Apenado se disculpó y sonrojado caminó junto a su pareja hasta la sala para poder sentarse en las cómodas bancas. Nada extraño, solo un chico de cabello negro riéndose de su pareja.

―"Venganza"― Pensó el de cabello en puntas mientras buscaban sus respectivos números en los lugares.

Para Gon, al inicio fue incomodo sentarse y veía a Killua riéndose de él, lo que causaba aun más enojo. Solo le sacó la lengua y se aguantó el jadeo para robarse un puñado de pochoclos y comer con las cejas fruncidas.

Los primeros minutos fueron comerciales, tuvieron que hacer un esfuerzo gigante para no acabarse las bebidas y los pequeños copos dulces antes de que la verdadera película comience; ninguno tenia saltos extraños, solo esperaban pacientemente mientras hablaban de cosas comunes; como la universidad, una próxima salida a la playa a la que el albino no quería asistir por el calor incesante de esa época del año, los exámenes venideros y por supuesto, de sus trabajos; una ajetreada vida joven.

Los comerciales terminaron, la pantalla se puso en negro antes de que los títulos correspondientes entren en escena, ambos se miraron antes de hablar,

―Odio las peleas surrealistas, será gracioso ver cuando se pangas a dar mil giros solo para dar una pequeña parada― Dijo el albino, un comentario normal, claramente, sabiendo que a él, en realidad, le aburren de sobremanera ese tipo de películas por su falta de realismo.

Smuttober - KilluGonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora