Pov Lisa
En total he cenado tres veces con ella, la diferencia está entre la cena de despedida de la secundaria, la cena de despedida de la preparatoria, así como la cena de despedida de la universidad.
Nos encontrábamos en el salón de fiesta donde había sido organizada aquella cena, todos se encontraban en sus asientos a lo largo de una extensa mesa que era cubierta con un mantel blanco por encima y unos cuantos floreros con rosas como centro de mesa repartidos a lo largo del comedor. Un lugar bastante elegante si me preguntan. Yo me encontraba sentada en mi lugar y a mi lado estaba ella. Sostuve mi celular en la mano y discretamente moví la camara en dirección de aquella rubia y le tome una foto mientras estaba distraída con su plato de comida.
De pronto escuché el sonido de una copa ser sutilmente golpeada con una cuchara.
— Hay algunas personas que parecieran estan tomándole fotos a las rosas ¡Pero apuesto a que en realidad le están tomando fotos a nuestra guapísima Rosé!
Hay tres cosas que las personas no podemos ocultar: La tos, la pobreza y el amor.
— En estos cuatro años nosotros ya lo hemos notado, si no te confiesas hoy dentro de unos cuantos días Roseanne tendrá que irse del país, hazme caso ¡Simplemente aprovecha esta oportunidad para confesarte!
Al rededor se escuchaban los murmullos de varias personas diciendo "Confiesate".
— Esta bien ¡Me confesaré a Roseanne!
Me sorprendí al escuchar aquella voz femenina proclamarse, por un instante creí que se dirigían a mí. Vi a aquella mujer levantarse de su lugar y colocarse justo enfrente de Rosé, todos alrededor aplaudían la osadía de aquella chica, el bullicio fue acallado cuando empezó a hablar en voz alta.
— Shh, primero aclararé esto, la razón por la que no me confesaba era porque no necesitaba hacerlo. Rosé Park no está interesada en mí, esta realidad no cambiará únicamente por mi deseo. Sin embargo, Félix tiene razón, si no lo digo hoy no tendré oportunidad después.— Dijo aclarando esto último mientras volteaba a ver al antes mencionado.— Rosé, quizás después de hoy ya no te volveré a ver jamás, por eso tengo algunas palabras que quiero decirte— Hubo un breve silencio en la sala.— Me gustas.
La volteé a ver de reojo, quería observar su expresión la cual se mantenía neutra, pareciera no importarle que alguien se le acaba de declarar justo enfrente de todo el alumnado y en la cena de despedida.
— Al menos— Continuo aquella chica.— Acompáñame a beber una copa de vino.
Rosé se levantó de su asiento y tendió su copa haciendo un brindis con la otra persona, luego ambas bebieron de esta y cada quien regreso a su lugar. Realmente lo había hecho sin pensarlo.
Me gire hacia ella para dirigirle la palabra.
— Siento que no has cambiado mucho durante tantos años, siempre has sido tan popular.
— Sin embargo tú has cambiado demasiado.
— ¿De verdad?
— Sí— Afirmó mientras me sonreía.
¡No me sonrías así! De esta manera yo... Lo siguiente que escuche fue a ella caer rendida sobre la mesa.
— Umm ¿Rosé? ¡Oye Rosé!
←→
Llegamos a su departamento, la traía cargando sobre mi espalda, tome su mano para colocar su huella en el sensor de la cerradura digital y así abrir la puerta. Una vez dentro la lleve hasta su habitación, la recosté en la cama y le quite los zapatos.
¿Cómo llegamos a esto?
[Hace un rato]
Nos encontrábamos afuera del salón donde había sido la reunión, cada quien estaba dispuesto a irse a su hogar o continuar la fiesta en otro sitio.
— Es más seguro si te la dejamos a ti ¡No tendremos de que preocuparnos!— Dijeron mis compañeros mientras se alejaban y se despedían con la mano.
Ugh ¡¿Acaso no han escuchado el dicho de que el lugar más seguro es en realidad el más peligroso?!
[De vuelta al presente]
— Sé que te gusta estar limpia, pero si de verdad te cambio la ropa temo que pueda cometer un crimen. Así que simplemente haré esto— Mencioné al aire mientras la cubría con una sábana.— Eres una alfa pero aún así te desmayaste con una sola copa. Pero como sea te ves muy linda.
Suspiré recordando lo que sucedió en la cena. Ella te había estado mirando por cuatro años, todos se dieron cuenta. Yo te he mirado por diez años y nadie se ha dado cuenta.
Soy increíble.
Apuesto a que no lo sabes, aún que mi yo actual. Tan solo puede seguirte por detrás, ya he agotado todas mis fuerzas.
"Dentro de unos cuantos días Roseanne tendrá que irse del país"
"Quizás después de hoy ya no te volveré a ver jamás"
El final este ya es el final. Ya no puedo seguirte más.
Me acerqué lentamente a su rostro, la tome se las mejillas y.... Ella de pronto abrió los ojos. Me separé lo más rápido que pude sentandome en la orilla de la cama, intentando actuar como si nada hubiera pasado y trate de hablarle lo más tranquila posible.
— ¿Ya te has despertado? Dejé tu bolso en la mesa. Tus zapatos están en la entrada, me retiraré primero.
Me disponía a levantarme de la cama e irme, cuando sentí que su mano sujeto la mía evitando que me fuera.
— Lalisa Manoban..¿Por qué estás llorando?
No me di cuenta en que momento las lágrimas comenzaron a salir. Me encontraba temblando, e hice lo único que creí necesario, me gire e incline sobre ella... Y la bese.
🥀
¡Gracias por leer!
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Roses: Florecer Tardío ⟩⟩ Chaelisa
Fiksi Penggemar🥀 Lalisa Manoban ha estado enamorada de Roseanne por 10 años, pero su amor es ocultado por todo ese tiempo. En la fiesta de despedida de la universidad Rosé se embriaga con una copa de vino, así que Lisa es quien la lleva a casa ¿Qué les tendrá pre...